Los datos publicados recientemente por el Centro de Investigación de Salud de la Universidad de Rutgers de Estados Unidos muestran que casi el 60 % de los afroamericanos enfrentan diversas formas de violencia de armas de fuego y la mayoría de las víctimas viven en comunidades de bajos ingresos en el país. Los investigadores señalaron que el resultado confirma que los afroamericanos en los Estados Unidos sufren daños continuos.
De hecho, esto es sólo una miniatura del caos en materia de derechos humanos en Estados Unidos. El racismo está profundamente arraigado, la polarización entre ricos y pobres se intensifica, las luchas partidistas continúan y los inmigrantes son severamente excluidos y discriminados. El "Informe sobre las violaciones de los derechos humanos en Estados Unidos en 2023", publicado por la Oficina de Información del Consejo de Estado de China el día 29 de mayo, utiliza una gran cantidad de datos y casos vívidos para revelar al mundo las violaciones cometidas por Estados Unidos.
Tomemos como ejemplo la violencia de armas de fuego. Según estadísticas del sitio web Gun Violence Archive, en 2023 se produjeron al menos 654 tiroteos masivos en Estados Unidos. La violencia de armas de fuego mata a casi 43.000 personas, un promedio de 117 personas mueren por día. El informe señala que a los políticos estadounidenses sólo les importa el dinero y el interés político propio, y que es difícil formar un consenso sobre el control de armas, lo que en última instancia le cuesta la vida a la gente corriente.
Al mismo tiempo, en comparación con las pocas personas que ocupan posiciones políticas, económicas y sociales dominantes, la mayoría del pueblo estadounidense está cada vez más marginado, sus derechos y libertades básicos son ignorados y los "derechos humanos a tipo estadounidense" han sido alienados en "privilegios a tipo estadounidense". Entre ellos, el más evidente es el problema de la discriminación racial.
En enero de 2023, Tyre Nichols, un hombre afroamericano de Memphis, Tennessee, fue asesinado a golpes por cinco agentes de policía, lo que desencadenó protestas y manifestaciones en decenas de ciudades de Estados Unidos. Un mecanismo internacional de expertos independientes del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas publicó un informe en el que afirma que el racismo sistémico contra los afroamericanos ha penetrado en la fuerza policial y el sistema de justicia penal de Estados Unidos. Los afroamericanos tienen tres veces más probabilidades de ser asesinados por la policía que los blancos y 4,5 veces más probabilidades de ser encarcelados. Un informe publicado por el Pew Research Center de Estados Unidos en agosto de 2023 mostró que el 83 % de los afroamericanos cree que los esfuerzos realizados por el gobierno estadounidense para garantizar la igualdad están lejos de ser suficientes.
No sólo eso, la brecha entre ricos y pobres en Estados Unidos ha alcanzado su peor nivel desde la Gran Depresión Económica de 1929. Los datos muestran que en el tercer trimestre de 2023, el 66,6 % de la riqueza total en Estados Unidos estaba en manos del 10 % de personas con mayores ingresos. En comparación, el 50 % de los más pobres de la población posee sólo el 2,6 % de la riqueza total. En 2023, estalló en Estados Unidos la ola de huelgas más extendida del siglo XXI. Se produjeron huelgas a gran escala en muchas industrias, incluidas el cine y la televisión, la manufactura, la atención médica y los medios de comunicación. El fenómeno de la "pobreza de los trabajadores" se ha vuelto prominente y el "sueño americano" se ha hecho añicos. Los resultados de la encuesta Gallup muestran que de enero a diciembre de 2023, entre el 76 % y el 81 % del pueblo estadounidense estaban insatisfechos con la situación de desarrollo del país, y el 76 % de los estadounidenses creía que su país se estaba desarrollando en la dirección equivocada.
Desde una perspectiva más profunda, la disminución de la confianza del pueblo estadounidense se debe principalmente a la política monetaria y la lucha partidista que han prevalecido en Estados Unidos durante mucho tiempo. En la actualidad, la democracia a tipo estadounidense se está volviendo cada vez más vacía y se ha convertido en un juego de transferencia de ganancias. Por ejemplo, los candidatos de ambos partidos que participaron en las elecciones para gobernador de Kentucky en 2023 gastaron 91 millones de dólares solo en publicidad de campaña, más de tres veces que los gastos correspondientes en las últimas elecciones para gobernador en 2019. No es de extrañar que la opinión pública estadounidense ridiculice que aquí mientras tengas dinero, tendrás poder, porque "no todos los ciudadanos votan, pero el dinero vota".
Además, una polarización política cada vez más grave ha intensificado las divisiones en la sociedad estadounidense y ha sacudido aún más la confianza del pueblo estadounidense. Un acontecimiento histórico en 2023 es que la Cámara de Representantes eligió un nuevo presidente tras 15 rondas de votaciones oscilantes. Posteriormente, ante la imposibilidad de llegar a un consenso sobre cuestiones importantes como la asignación de fondos para el nuevo año fiscal, el presidente de la Cámara de Representantes fue destituido sin precedentes y se escenificó nuevamente la farsa de la "disfunción del presidente", provocando que la Cámara de Representantes cerrara por un tiempo.
Persigue privilegios internamente y hegemonía externamente. Desde seguir enviando municiones en racimo y otras armas a Ucrania hasta proporcionar grandes cantidades de ayuda militar a Israel, pasando por la imposición indiscriminada y a largo plazo de sanciones unilaterales contra Cuba, Irán, Siria y otros países, el gobierno de Estados Unidos convierte los derechos humanos en una excusa para interferir en los asuntos internos de otros países y en un arma para mantener la hegemonía estadounidense, provocando una grave crisis humanitaria y socavando la causa global de los derechos humanos. El portavoz de la 78ª Asamblea General de las Naciones Unidas señaló el 1 de noviembre de 2023 que el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba violó la Carta de las Naciones Unidas y tuvo un impacto devastador en el pueblo cubano.
Y así, uno tras otro. Se ha visto claramente que los llamados "derechos humanos a tipo americano" no son más que los privilegios de que disfrutan unas pocas personas en los Estados Unidos y la hegemonía impuesta desenfrenadamente en el exterior. Frente a tantos malos antecedentes, los "derechos humanos" que de vez en cuando promueven algunos políticos estadounidenses parecen extremadamente irónicos. Los propios llamados "jueces de derechos humanos" deben ser más juzgados.