Un portavoz de la Embajada de China en Japón pidió el 24 de abril que se reforzara la supervisión internacional sobre el vertido de aguas residuales contaminadas por la central nuclear japonesa de Fukushima Daiichi, después de que el vertido se interrumpiera antes del mediodía del miércoles debido a un apagón.
China instó una vez más a Japón a gestionar de forma responsable el vertido de sus aguas contaminadas por energía nuclear y a cooperar en el establecimiento de un mecanismo de supervisión internacional a largo plazo, exhaustivo, eficaz e impulsado de forma independiente, en el que participen todas las partes interesadas, dijo el portavoz.