El secretario general de la ONU, António Guterres, y el presidente de la Asamblea General de la ONU, Dennis Francis, pidieron el 13 de abril a las partes involucradas ejercer la máxima moderación en medio de las crecientes tensiones entre Irán e Israel.
Guterres condenó el ataque lanzado por Irán contra Israel y pidió un cese inmediato a las hostilidades, advirtiendo que ni la región ni el mundo pueden permitirse otra guerra. A su vez, Francis declaró que la respuesta iraní agrava la ya tensa situación en el Medio Oriente.
La misión iraní ante la ONU dijo el sábado que el ataque a Israel puede considerarse concluido, sin embargo, si el régimen israelí comete otro error, la respuesta de Irán será considerablemente más severa.