China es el mayor socio comercial de Alemania. En 2023, el comercio bilateral entre ambas economías superó los 253.000 millones de euros. Los principales productos comercializados entre ambas partes incluyen vehículos, repuestos, aparatos mecánicos, equipos eléctricos e instrumentos ópticos.
Alemania es, con diferencia, el mayor inversor europeo en China. El año pasado, la inversión directa alemana en China aumentó un 4,3 % hasta alcanzar la cifra récord de 11.900 millones de euros. La inversión en China como parte de las inversiones totales de Alemania en el extranjero aumentó el año pasado al 10,3 %, el nivel más alto desde 2014.
Según una encuesta de la Cámara de Comercio Alemana en China, más del 90 % de las empresas alemanas que ya están establecidas en China siguen muy comprometidas con el mercado. Más de la mitad de los encuestados prevén que los competidores chinos asuman el liderazgo en innovación en los próximos cinco años. Al respecto, la industria automovilística, entre otras, se destaca como un sector en el que se esperan grandes avances, con expectativas de que los competidores chinos se posicionen como líderes mundiales en innovación.