La Fuerza Aérea nigeriana afirma que decenas de presuntos sicarios han muerto en distintos ataques aéreos en el norte del país.
De acuerdo a un comunicado militar, muchos otros hombres armados también resultaron gravemente heridos. Los ataques, que tuvieron lugar durante el fin de semana, tenían como objetivo sacar a los presuntos terroristas de sus escondites en los estados septentrionales de Katsina y Borno. La inteligencia militar previa determinó que la zona objetivo se había convertido en un centro de almacenamiento logístico y una zona de fabricación de artefactos explosivos improvisados y otras municiones. El ejército afirma que las operaciones continuarán hasta que se neutralice la amenaza.