Al menos 60 personas han fallecido y más de 100 han resultado heridas en el tiroteo ocurrido el 22 de marzo en una sala de conciertos en el noroeste de Moscú, de acuerdo con las informaciones preliminares del Servicio de Seguridad Federal de Rusia.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia calificó el tiroteo de ataque terrorista e instó a toda la comunidad mundial a condenar el atentado. El Comité de Investigación de Rusia ha informado de la apertura de una investigación penal por el ataque terrorista.
Los videos publicados en línea por las agencias de noticias rusas han mostrado espesas columnas de humo y llamas saliendo del recinto.
El alcalde de Moscú, Sergei Sobianin, aseguró que se proporcionará toda la asistencia necesaria a quienes hayan sido afectados por el incidente. La capital rusa ha cancelado todos los eventos públicos programados para esta semana, incluyendo los deportivos y culturales. También se han reforzado las medidas de seguridad en múltiples trenes y estaciones del país.