Clara señal de contraataque a la venta de armamento a Taiwan

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China anunció el día 7 de enero que de acuerdo con la "Ley contra las Sanciones Extranjeras de la República Popular de China", se aplica sanciones contra cinco empresas militares-industriales de Estados Unidos. Esta contramedida es una respuesta a la nueva ronda de venta de armamento a Taiwan y a las sanciones estadounidenses contra empresas e individuos chinos bajo diversos pretextos y es una advertencia solemne a algunas personas que desde Estados Unidos utilizan la cuestión de Taiwan para interferir en los asuntos internos de China.

Las cinco empresas militares estadounidenses sancionadas por la parte china son BAE Systems Land and Armament, Alliant Techsystems Operation, AeroVironment, ViaSat y Data Link Solutions. Todas ellas tienen historial de venta de armas a Taiwan.

Organismos subordinados del Departamento de Defensa de Estados Unidos afirmaron que el objetivo de esta venta de armamento a Taiwan es mejorar las capacidades del ejército taiwanés en ámbitos como el mando, el control y las comunicaciones, así como reforzar la llamada "capacidad de defensa" de Taiwan. Los observadores señalan que, en el pasado, las ventas militares de Estados Unidos a Taiwan consistían principalmente en aviones, misiles, aviones no tripulados y otras armas. Pero la formación de fuerzas de combate depende de las comunicaciones, la electrónica, el mando y control, una red compuesta de un sistema completo, y "las ventas militares de Estados Unidos están destinadas a mejorar las capacidades militares de 'software' de Taiwan."

Si se juega con fuego, hay que pagar el precio. China ha declarado en repetidas ocasiones que la cuestión de Taiwan es el núcleo de los intereses fundamentales de China, el fundamento de la base política y la línea roja infranqueable de las relaciones entre China y Estados Unidos. En respuesta a la venta de armas de Estados Unidos a Taiwan, China ha impuesto en los últimos años repetidas sanciones a importantes empresas de la industria militar estadounidense, como Lockheed Martin, Boeing Defence y Raytheon. En esta ocasión, las sanciones anunciadas por la parte china incluyen la congelación de los bienes muebles, inmuebles y de otro tipo de bienes, así como la prohibición de que organizaciones y particulares de China a realizar transacciones, cooperar y llevar a cabo otras actividades con ellas.

En cuanto a la contraacción de China, los expertos pertinentes analizan que los EE.UU. insiste en "jugar la carta de Taiwan" en primer lugar, y China contraataca después, de forma que su respuesta está justificada y es razonable. Estas cinco empresas militares de EE.UU. sancionadas por lo general tienen proyectos de cooperación en China, en comparación con los ingresos de la venta de armas a Taiwan, las ganancias de su cooperación económica con China son mayores. La parte china ha tomado una serie de sanciones precisas, más probabilidades de golpear en el "punto sensible". Si la connivencia militar entre Estados Unidos y Taiwan sigue intensificándose, China no descarta la introducción de contramedidas más severas.

Con esta lista de sanciones, China ha demostrado claramente a la parte estadounidense su firme voluntad y determinación de defender su soberanía nacional y su integridad territorial. La parte estadounidense debe poner en práctica sus compromisos de adherirse a la política de una sola China y no apoyar la "independencia de Taiwan". Los hechos demostrarán que, a pesar de los intentos de injerencia de Estados Unidos, nadie podrá detener el proceso histórico de reunificación de China.