Los accidentes revelan dos mentiras de Japón sobre el agua contaminada con material nuclear

CRI 2023-11-03 16:05:34
Share
Share this with Close
LinkedIn

A pesar de la fuerte oposición nacional e internacional, la Compañía de Energía Eléctrica de Tokio (TEPCO, por sus siglas en inglés) inició el 2 de noviembre el tercer vertido de agua contaminada con material nuclear de Fukushima. Se espera que esta descarga dure hasta el 20 de este mes, con un vertido de unas 7.800 toneladas. TEPCO afirmó que la concentración de tritio en el agua nuclear contaminada vertida corresponde con las expectativas. Sin embargo, hace una semana, dos miembros de su personal fueron trasladados de urgencia al hospital después de que la empresa sufriera un accidente de contaminación causado por el vertido de residuos radiactivos líquidos. Esto demuestra que la afirmación de la parte japonesa de que el agua contaminada es "segura" no es en absoluto creíble, y que no deben subestimarse los riesgos que entraña el tratamiento del agua contaminada.

Según Kyodo News, el 25 de octubre cinco miembros del personal de TEPCO entraron en contacto con líquido residual que contenía sustancias radiactivas mientras trabajaban en la tubería del Sistema Avanzado de Procesamiento de Líquidos (ALPS, por sus siglas en inglés) que trata el agua contaminada con material nuclear. De los dos que fueron trasladados al hospital, uno tenía todo el cuerpo contaminado y el otro tenía afectados ambos brazos y la mitad inferior del cuerpo. Tras horas de tratamiento de descontaminación, el nivel de radiación en la superficie de sus cuerpos no había disminuido por debajo del valor estándar de seguridad. En cuanto a la cantidad total de residuos líquidos vertidos en el accidente, TEPCO dijo primero que era de unos 100 mililitros y luego calculó que era de varios litros, lo que es decenas de veces superior. Esta incoherencia confirma la valoración del periódico japonés Asahi Shimbun de que la desconfianza de la opinión pública japonesa hacia TEPCO es más profunda que sus tanques de almacenamiento de agua contaminada.

Desde el accidente en la central nuclear de Fukushima hace 12 años, ha habido demasiados escándalos por diversos tipos de accidentes, así como la presentación de informes tardía y poco clara por parte de TEPCO. Este último accidente no es más que otro añadido a la oscura historia de TEPCO. Ha puesto de manifiesto las dos grandes mentiras cuidadosamente tejidas por la parte japonesa: que el agua contaminada técnicamente tratada es "segura" y que el proceso de eliminación del agua contaminada es "seguro" y "fiable".

Los datos publicados por la parte japonesa en marzo de este año mostraban que alrededor del 70 % del agua contaminada radioactiva tratada por ALPS no cumplía las normas de vertido y debía volver a purificarse. Según se informó, tras este accidente, TEPCO comprobó los dosímetros que llevaban dos miembros del personal y confirmó que la dosis máxima a la que estuvieron expuestos tras el accidente fue de 6,6 milisieverts (mSv), superior al límite de advertencia de 5 mSv. Esto es un efecto secundario del hecho de que el agua contaminada por la central nuclear de Fukushima es altamente radiactiva y el proceso de tratamiento implica riesgos significativos.

Han pasado ya más de dos meses desde que Japón inició el vertido al mar. El último accidente demuestra que es imperativo establecer acuerdos internacionales de vigilancia eficaces y a largo plazo. Si la parte japonesa confía realmente en su "seguridad", debe eliminar el agua contaminada con material nuclear de forma responsable y apoyar el establecimiento de un mecanismo de vigilancia a largo plazo con la plena participación de todas las partes interesadas, incluida la vigilancia de terceros llevada a cabo de forma independiente por otros países. El océano es el hogar común de la humanidad, y el mundo no debe pagar la factura del egoísmo de Japón.

Políticas de privacidad y uso de cookies

Al continuar navegando en este sitio web expresa su conformidad con el uso de cookies y con la política de privacidad revisada. Puede cambiar la configuración del uso de cookies en su navegador.
Estoy de acuerdo