Diez personas murieron y al menos otras 15 resultaron heridas en apuñalamientos en la provincia de Saskatchewan, en el oeste de Canadá. Los sospechosos siguen prófugos de la justicia.
Las víctimas fueron encontradas en 13 lugares. Los apuñalamientos se produjeron el 4 de septiembre por la mañana. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, calificó los ataques de "horribles y desgarradores".
Las autoridades han identificado a dos sospechosos llamados Damien Sanderson y Myles Sanderson, y la persecución está en marcha. La policía local considera que los sospechosos que se han dado a la fuga están armados y viajan en un vehículo Nissan Rogue negro. Han emitido una alerta de personas peligrosas en toda la provincia. También se han emitido alertas similares en las provincias vecinas de Saskatchewan, Alberta y Manitoba.