China y Rusia establecieron este lunes una empresa mixta para construir aviones de pasajeros de fuselaje ancho, en el que constituye el último intento de los dos países por entrar en el lucrativo mercado dominado desde tiempo atrás por Boeing y Airbus.

China-Russia Commercial Aircraft Internacional Co. Ltd (CRAIC), con sede en Shanghai, ha completado su registro empresarial y ha obtenido la respectiva licencia de operación, informó su socio chino, la estatal Commercial Aircraft Corporation of China (COMAC).

comentario1705232

El presidente de COMAC, Jin Zhuanglong, dijo que la constitución de la empresa mixta representa un avance clave en el programa sino-ruso para desarrollar aviones de doble pasillo, y que el objetivo primordial es producir naves "competitivas" para trayectos largos para el mercado mundial de la aviación.

CRAIC será responsable de la investigación, la fabricación, el mercadeo, la comercialización y el servicio a sus aviones. Según un acuerdo firmado entre COMAC y su socio ruso, United Aircraft Corp (UAC), se dará prioridad al desarrollo y a la producción de aeronaves de 280 asientos con una autonomía de vuelo de 12.000 kilómetros.

El proceso de diseño del aparato comenzará "pronto", de acuerdo con el plan, que también señala que la línea de ensamblaje general estará ubicada en Shanghai.

La junta directiva, integrada por ocho personas, cuatro de China y cuatro de Rusia, estará encabezada por el vicepresidente de UAC, Vladislav Masalov.

Semanas atrás, el avión de pasajeros de fuselaje estrecho de COMAC, el C919, realizó exitosamente su vuelo inaugural. Se trata del primer avión de gran tamaño de fabricación nacional de China, diseñado para competir con el modernizado A320 de Airbus y la nueva generación del Boeing B737.

COMAC ya tiene en el mercado dos aviones de su modelo regional ARJ21.

Según otra información, la Asociación Internacional de Contratistas de China señaló en un informe reciente que los contratistas del proyecto de China presenciaron un fuerte crecimiento en la operación de ingresos y de contratos recién firmados en ultramar el año pasado debido a proyectos de transporte, electricidad y construcción.

　 Los ingresos empresariales combinados de proyectos contratados en ultramar aumentaron 3,5 por ciento interanual a 159.400 millones de dólares en 2016.

El informe indica que estas compañías firmaron nuevos contratos el año pasado por un total de 244.000 millones de dólares, un aumento de 16,2 por ciento interanual en 2016; 33 de esos proyectos alcanzaron un valor de más de 1.000 millones de dólares cada uno, seis más que en 2015.

　 El informe añade que a pesar de la anémica demanda del mercado global, el negocio en ultramar de los contratistas de proyectos chinos fue reforzado por proyectos de transporte, en particular de ferrocarriles, proyectos de electricidad y varios proyectos de construcción, en especial de construcción no residencial.

　 Los países a lo largo de la Franja y la Ruta continuarán siendo motores de crecimiento para el negocio de los contratistas chinos en ultramar, aunque también enfrentan desafíos como una competencia homogénea entre pares y un creciente estrés financiero en algunos países africanos y de América Latina.

　　El presidente de la asociación, Fang Qiuchen, sugirió incrementar el apoyo financiero a los contratistas, acelerar la innovación de modelos de negocios y mejorar sus capacidades de control de riesgo.

　 La Iniciativa de la Franja y la Ruta es un gran plan propuesto por China en 2013 para conectar a Asia con Europa y África a lo largo y mas allá de las rutas comerciales antiguas, mediante la construcción de una red comercial y de infraestructura.

　 La Asociación Internacional de Contratistas de China fue establecida en 1988 por inversionistas chinos en proyectos internacionales, contratistas, compañías de servicios laborales y proveedores de servicios relacionados. Cuenta con más de 1.300 miembros.