Handan, el taijiquan y la paz mundial

Por Augusto Soto, director del "Dialogue with China Project"

Handan respira tanta densidad histórica que incluso destaca en China, un país tan cargado de pretérito. Y no sólo porque la ciudad es la cuna del primer emperador que unificó al país (sinónimo de estabilidad y paz en el largo proceso histórico). Handan es también, para orgullo de sus habitantes, una de las pocas ciudades que no ha cambiado nombre en su milenaria historia. Situada en el extremo sur de la septentrional provincia de Hebei, limita con las provincias de Shanxi, Henan y Shandong y por ello ha sido igualmente entrecruce de influencias culturales desde y hacia los cuatro puntos cardinales.

Handan, el taijiquan y la paz mundial

La ciudad destaca también como referente del taijiquan: la tradicional meditación en movimiento cuya práctica sistemática y a conciencia reconocidamente mejora el equilibrio interno de sus practicantes. Paralelamente, al ser un saber integral, su ejercicio permite mejor interiorizar los principios de la medicina, la literatura, la filosofía y el arte chinos. Handan abandera el estilo Yang del taijiquan, una de las cinco escuelas de esta disciplina surgidas en el país.

El día 18 de marzo (auspicioso por la combinación 1 y 8) nos recibe en la Universidad de Handan el maestro Ma Jianhua, cultor del estilo Yang. En una edad venerable, Ma enseña con una convicción propia de quien difunde uno de los tesoros culturales más preciados de China. Acompañado de alumnos avanzados que se especializan en taijiquan en la misma Universidad, Ma, dueño de un cuerpo fibroso y atlético, muestra las secuencias continuas de la disciplina.

Handan, el taijiquan y la paz mundial

No se impacienta, particularmente ante mi torpeza al imitar sus movimientos. Y a la hora de mostrar pedagógicamente el aspecto defensivo de una secuencia, agita las manos y los pies con la rapidez de una golondrina, o, más metafóricamente si cabe, como un rayo, confirmando por qué el taijiquan es la madre de todas las artes marciales de Oriente.

Al día siguiente visitamos en las vecindades de Handan la casa del maestro Yang Luchan (1799-1872), fundador del estilo Yang. Los pasillos, el patio central y la ornamentación muestran la típica residencia de su época. Pero hay un detalle que llama poderosamente la atención: la cama, que denota el carácter espartano del fundador Yang. Es de madera dura y estrecha: una dimensión justa que seguramente le habrá dado el descanso suficiente a un cuerpo alimentado con lo necesario, no con lo superfluo, preparado para dormir profundamente y a la vez listo en caso de alerta en la profundidad de la noche. Cuando joven Yang tuvo su maestro, pero también fue una personalidad hecha a sí misma: el creador del estilo que alcanzó la fama nacional e internacional durante su propia vida.

Al día siguiente nos recibe el profesor Ma Jibin, rector de la Universidad de Handan. En su introducción anuncia que apoyado en las más recientes excavaciones arqueológicas puede afirmar que la actividad humana de su ciudad alcanza los 8.000 años de antigüedad. Explica que la Universidad con una tradición más que centenaria ha establecido el taijiquan como su sello característico y desea que éste se propague. Nos informa de la firma de un acuerdo de cooperación estratégico con la Radio Internacional de China para introducir a la ciudad de Handan, a su Universidad y a la cultura del taijiquan por todos los continentes. Cita los ejemplos de maestros de taijiquan de estilo Yang que han ido a enseñar la disciplina a Rusia, Bielorrusia, Malasia y Mongolia, y su voluntad de seguir expandiéndose.

Handan, el taijiquan y la paz mundial

Reflexiona en voz alta sobre el entendimiento entre las naciones y sobre la compleja situación internacional. Si todo el mundo practicara el taijiquan, "seríamos mejores personas", dice con convicción. Antes de despedirnos asevera que el taijiquan se puede entender como un aporte para la paz mundial.

Su declaración es una muy interesante coincidencia. Me viene a la mente una apreciación de un antiguo diplomático hispanohablante, quien ha dicho recientemente que cuando ve la acción de China en el escenario internacional actual le viene a la mente la técnica del taijiquan con sus "movimientos lentos, muy coordinados y muy precisos".

Parto de Handan con la certeza de que he visitado uno de los centros de irradiación cultural no sólo de China, sino que del mundo.