La recuperación económica de China refleja la resistencia y el avance del sistema económico de China

Entrevistado: Toumert Alkhalloufi, director del Programa de Cooperación Educativa Internacional de la Universidad de Asuntos Exteriores de China

Recientemente, el canal de televisión CNN, el periódico "New York Times", y la revista "Forbes", entre otros influyentes medios de comunicación occidental; además de la Fundación Alan MacArthur, PricewaterhouseCoopers y otras organizaciones económicas no gubernamentales están prestando atención activamente a la recuperación económica de China. Una gran cantidad de estos análisis muestran que China ya ha revitalizado la economía y ha salido con éxito de la crisis epidémica.

China se ha convertido en la primera gran economía del mundo con una tendencia positiva de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que las principales economías de Europa y Estados Unidos están experimentando una contracción económica. La economía europea se encuentra en una recesión severa, de manera similar a la crisis financiera de 2009; actualmente se espera que su PIB se reduzca en un 7,4%, mientras que el PIB de Estados Unidos puede reducirse en un 5,9%.

La economía de China se contrajo un 6,8% en el primer trimestre, debido a la propagación del nuevo coronavirus; después de controlar la epidemia, las empresas chinas reanudaron el trabajo y la producción, y el PIB creció un 3,2% en el segundo trimestre.

También hemos visto que la confianza del consumo interno de China está aumentando gradualmente. La Semana Dorada de este año demuestra que las políticas microeconómicas de China han producido resultados, con buenos datos y que avanza de manera constante. Según estadísticas del Ministerio de Cultura y Turismo de China, los ingresos por turismo durante la Semana Dorada totalizaron 69.500 millones de dólares y se recibieron un total de 637 millones de turistas nacionales.

La rápida recuperación de la economía de China se debe principalmente a las sólidas políticas económicas. Después de 2000, China se unió a la Organización Mundial del Comercio, estableciendo su posición en la economía global y participando activamente en el comercio internacional. Alrededor de 2010, China comenzó a centrarse en el desarrollo del comercio electrónico, la construcción de infraestructura de comercio electrónico y la realización gradual de la transformación de la economía digital. Desde entonces, una serie de logros económicos, como la plataforma de comercio electrónico global de Alibaba y el pago electrónico de Alipay, también han confirmado la exitosa transformación de la economía china.

Desde 2015, China ha proporcionado fondos para fomentar la creación y el desarrollo de empresas nuevas, liderando el desarrollo de industrias emergentes como la inteligencia artificial, la robótica y el análisis de macrodatos en el siglo XXI.

Al mismo tiempo, ha cultivado un mercado de consumo sólido y ha establecido la confianza en las políticas económicas del gobierno. En la actualidad, ha establecido con éxito una economía moderna, con un conjunto completo de herramientas financieras y medios técnicos, con el objeto de convertirse en una verdadera potencia económica.

Como en 2009, China tiene suficientes medios financieros para hacer frente a la crisis económica, y el pueblo chino también está lleno de confianza en que el gobierno puede tomar las medidas fiscales adecuadas para impulsar la economía.

Los tomadores de decisiones chinos también están pensando en el desarrollo económico después de la epidemia, motivo por cual propusieron un nuevo patrón de desarrollo de ciclo dual.

Como dijo Chris Buckley en un artículo de análisis en The New York Times: "esto significa que China expandirá la demanda interna y promoverá la innovación como el motor principal para estimular la economía, mientras que los mercados extranjeros y la inversión se consideran como el segundo punto de crecimiento económico ".

Según Bo Zhuang, economista jefe de China en TS Lombard, un instituto de investigación independiente en el Reino Unido, el nuevo patrón de desarrollo del ciclo dual de China es una respuesta a la desglobalización de ciertos países. El propósito es reestructurar el equilibrio, evitar riesgos externos y promover el desarrollo de la cadena de suministro global al tiempo que se fortalece el poder económico interno.