Tendencia mundial y cooperación chino-africana en la etapa de la pandemia

CRI 2020-06-18 10:25:01
Share
Share this with Close
Messenger Messenger Pinterest LinkedIn WeChat

Autor: Moustapha Kassé, decano honorario de la Facultad de Economía y Gestión de la Universidad de Dakar de Senegal, galardonado con la Orden Nacional, galardonado con la Orden del Mérito Académico.

Actualmente el mundo en su conjunto está sufriendo por la pandemia de la neumonía causada por el nuevo coronavirus, y su vez está padeciendo un gran desafío económico sin precedentes. Se trata de una crisis global de salud pública que está dejando incontables daños y efectos negativos en términos económicos, financieros, sociales y en la vida de los habitantes de todos los países.

Los campos más afectados son los más involucrados en la globalización como la manufactura, servicios, petróleo, aviación, transporte terrestre y marino, turismo, industria alimentaria, entre otros. A nivel macroeconómico, el PIB de todas las economías del planeta está disminuyendo, y se prevé que el volumen económico global baje en un 3%, mientras que en los países africanos se reducirá en un 4%. También se enfrentarán a un gran reto los indicadores relevantes que sirven como referentes de la estabilidad social, tales como el déficit financiero público, la inflación, el desempleo y la tasa de pobreza. Por otro lado, los presupuestos que planean invertir los países para recuperar la economía comprueban una vez más la situación que vivimos ahora, serían: 1,5 billones de euros para Europa, 2,5 billones de dólares para EE.UU., y para África, unos 150 mil millones de dólares para la recuperación económica post-epidémica.

Además, las medidas de cuarentena han debilitado la fluidez de la población, la mercancía y el capital, y el funcionamiento social ha quedado en desorden. Sin embargo, en esta crisis de salud pública global China ha demostrado su papel significativo en el proceso de la globalización. El valor agregado de la industria manufacturera de China representa el 30% del valor total del mundo, y el país también ocupa gran parte de la cadena de suministro y el mercado de materias primas. En cuanto a los aspectos del comercio de artículos y servicios, los flujos de capital y en la transferencia de tecnológica, China ya se ha convertido en el principal socio para África. Miles de empresas chinas están realizando negocios en distintos campos en el continente africano, contribuyendo a la creación de riqueza y puestos de trabajo. China se ha convertido en el segundo destino más importante para los estudiantes africanos, y ha hecho grandes contribuciones a la formación de talentos. 

El presidente de China, Xi Jinping, pronunció un discurso en la Cumbre de Beijing 2018 del Foro de Cooperación China-África, en el que señaló la dirección de desarrollo de la relación entre ambas partes en la nueva época. También propuso “cinco noes” en las relaciones con África, que consisten en no interferir en los caminos de desarrollo de los países individuales; no interferir en sus asuntos internos; no imponer la voluntad de China; no imponer condiciones políticas en relación con la asistencia; y no buscar beneficios políticos propios en la inversión y la cooperación financiera. En su cooperación con África, China siempre se ha adherido a los principios de sinceridad, amistad e igualdad. China cree que la única forma de cooperación entre ambas partes es aprovechar plenamente sus respectivas ventajas e integrar estrechamente el desarrollo de China con África. Al mismo tiempo, China está comprometida con el desarrollo para el pueblo, el pragmatismo y la eficiencia en su cooperación. China siempre ha puesto en primer lugar los intereses de ambos pueblos, promoviendo la cooperación para el bienestar mutuo y beneficiándolos a través de los frutos de la cooperación. En dicha colaboración, China se adhiere a los principios de apertura, tolerancia e inclusión. El gigante asiático siempre ha creído que es la aspiración del pueblo africano y la responsabilidad de la comunidad internacional lograr la paz, el desarrollo y la revitalización de África.

En medio de esta crisis mundial de salud pública, China, bajo el fuerte liderazgo de su partido gobernante, ha confiado en su sistema nacional abierto y en el espíritu transformador de los dirigentes, y ha aprovechado al máximo las características de su sistema político, mostrando al resto del mundo el modelo de gestión local. A fin de apoyar a los países de todo el mundo en su lucha antiepidémica, China ha compartido activamente su experiencia en materia de prevención, control y tratamiento, ha promovido la cooperación internacional enviando a muchos países grupos de expertos en salud, suministros médicos y asistencia financiera. En la apertura virtual de la 73ª Asamblea Mundial de la Salud, el Presidente Xi Jinping dijo: "Estamos dispuestos a trabajar con la comunidad internacional para ampliar el apoyo a los países sumamente afectados por la epidemia para ayudarles a superar las dificultades actuales. " En la misma ocasión declaró que "la vacuna de China para la COVID-19, una vez que se desarrolle y se utilice, será un bien público global que contribuirá a la accesibilidad y asequibilidad de las vacunas en los países en desarrollo ".

 

Informaciones relacionadas

Share

Los más leídos