El BRI: una posibilidad para Sudamérica post COVID-19
Autor: Juan Manuel Harán
Periodista y Consultor especializado en relaciones corporativas entre China y América Latina
Si bien el COVID-19 afectó (como sabemos) a todo el mundo, en las últimas semanas ha ido tomando mayor preponderancia en Latinoamérica, con Brasil entre los principales damnificados a nivel sanitario y con Argentina empezando a sufrir las consecuencias económicas. Sudamérica en particular, que ya venía arrastrando problemas de crecimiento durante los últimos años, verá impactadas aún más sus proyecciones de desarrollo.
En este marco, la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI por sus siglas en inglés) aparece como una posibilidad cierta para el desarrollo de infraestructura ligada al comercio. Algunos países sudamericanos como Bolivia, Chile, Uruguay y Ecuador ya se adhirieron a la Iniciativa mediante la firma de sendos memorándum de entendimiento con el gobierno de China. El ojo está ahora puesto en las decisiones de Brasil y Argentina.
En el caso argentino, la nueva administración de Alberto Fernández (que asumió el último diciembre) ya dio señales positivas para un acercamiento mayor en las relaciones con China y una formalización de su participación en el BRI. Tal es así que el designado como Representante Especial de la Argentina para la Promoción Comercial e Inversiones en la Embajada de Beijing fue Sabino Vaca Narvaja, que ha mostrado públicamente el interés de colaborar más estrechamente con el Gobierno de Beijing en cuanto a la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Así lo manifestó en una nota de opinión publicada en medios argentinos: “Un buen modo de lograr una nueva relación bilateral sería retomar el diálogo para la firma del postergado memorándum de adhesión a la emblemática Nueva Ruta de la Seda”. (1)
A través de sus conglomerados estatales, China ya tiene una fuerte presencia en Argentina con diversos proyectos de infraestructura y energía que están siendo actualmente construidos. En el norte del país, la empresa CMEC lleva varios años avanzando con el ferrocarril de cargas Belgrano y el Grupo PowerChina está ampliando el parque solar Caucharí, que es el más grande de la región. En el sur, Gezhouba está a cargo del proyecto más importante que tienen las empresas chinas hoy en Sudamérica y que consta de dos centrales hidroeléctricas en la provincia de Santa Cruz. Además de la finalización de los planes en marcha, se espera también la participación de las empresas chinas en dos sectores de especial interés para el gobierno argentino: la transmisión de energía y la conexión ferroviaria y vial con Chile, que mejoraría la salida al océano Pacífico de los productos argentinos.
En el caso de Brasil, al ser China el principal socio comercial de Brasil, la salida de la crisis del COVID-19 liga a ambos países de forma concreta. No hay que olvidarse, en este sentido, de las grandes inversiones de compañías estatales chinas en proyectos de transmisión de energía en San Pablo y Brasilia, en especial de la State Grid Corporation, o de la adquisición parcial de la filial brasileña de la compañía estadounidense Duke, por medio de la asociación de la Corporación Tres Gargantas y el CLAI Fund en lo que significó la primera inversión del fondo dependiente del China Development Bank exclusivo para activos enLatinoamérica. Según Charles Tang, presidente de la Cámara de Comercio Brasil-China, para lograr mayor volúmen de negocios “Brasil tiene que demostrar de forma más inteligente la amistad que hay entre los dos países”. (2)
En este sentido, el Profesor Asociado de la Universidad del Rosario en Colombia e investigador invitado por la Universidad de Fudan en Shanghai, Daniel Barredo Ibáñez, indica en una nota publicada por el China Daily que “al parecer, la pandemia marcará el comienzo de un nuevo orden mundial, en el que China desempeñará un papel aún más importante y China y América Latina serán socios naturales. China debido a su capacidad de innovación y desarrollos tecnológicos e industriales, y América Latina debido asus recursos naturales”. (4)
Para tener un panorama más claro, en el corto y mediano plazo habrá que continuar con el seguimiento de los movimientos de losfondos de inversión chinos y de las políticas del Sinosure en cuanto a la aprobación de financiamiento de proyectos para los países de la región.
(1)https://www.elcohetealaluna.com/ahi-vienen-los-chinos/
(2)https://elpais.com/internacional/2020-04-10/las-provocaciones-del-bolsonarismo-tensan-el-futuro-de-las-exportaciones-de-brasil.html
(3)https://www.globaltimes.cn/content/1190087.shtml
(4)http://global.chinadaily.com.cn/a/202005/11/WS5eb88de0a310a8b2411549a7.html