Parque solar de tecnología china ayuda a combatir pobreza en Argentina
El parque solar Cauchari de Argentina, con financiamiento y tecnología provenientes de China, ha dado un salto en su contribución al combate de la pobreza en el país sudamericano, al lograr capacitar técnicamente a pobladores de las zonas más inaccesibles y otorgar beneficios financieros que serán destinados a la mejora del sistema educativo.
Instalada en la provincia argentina de Jujuy (noroeste), la planta fotovoltaica, considerada la más grande de su tipo en Latinoamérica, alivia a unas 160.000 familias argentinas que hoy en día gozan de acceso a la electricidad, después de iniciarse el suministro de energía al Sistema Argentino de Interconexión (Sadi) en septiembre del año pasado.
El proyecto es el resultado de una sólida relación con el país asiático, materializado con el financiamiento del Exim Bank de China y tecnología suministrada por la firma Shanghai Electric Power Construction (SEPC).
APORTE A LA EDUCACIÓN
Durante su período de vida útil de aproximadamente 20 años, los parques Cauchari I, II y III generarán importantes beneficios financieros al distrito de Jujuy, con ganancias netas valoradas en unos 400 millones de dólares, lo cual permitirá optimizar el sistema de educación pública de la región, según explicó el gobernador de la provincia, Gerardo Morales.
"Nos va a quedar una utilidad por el orden de los 400 millones de dólares. Ya hemos solicitado un crédito educativo de 307 millones de dólares con la Corporación Andina de Fomento y el Banco Centroamericano, y estamos construyendo 258 escuelas nuevas", detalló Morales en entrevista con Xinhua.
El gobernador indicó que a lo anterior se suma la construcción de 2.000 nuevos kilómetros de conectividad, así como la reparación y equipamiento de otras 700 escuelas.
"Esto quiere decir que el proyecto nos permite construir en cuatro años más de un tercio de las escuelas que se construyeron en Jujuy en 150 años", enfatizó.
La actual infraestructura educativa también se potenciará con equipos de "alta tecnología" y con la creación de nuevos programas de capacitación docente.
En la actualidad, Cauchari es además el único proyecto de Argentina que remunera a las comunidades originarias de la zona de la Puna, con un margen de ganancias de hasta el 2 por ciento, según información del proyecto.
"Es el único proyecto en la República Argentina que es 100 por cien del Estado y en consecuencia de la provincia" y "además es el único proyecto que le paga una remuneración a las comunidades indígenas, que son propietarias de la tierra donde está asentado el parque solar", indicó Morales.
"Estamos hablando de que Jujuy, a partir del proyecto Cauchari, forma parte no sólo de la (nueva) matriz de generación de energía del país, (sino que) pasamos a ser generadores, pero además generadores de energía limpia", celebró.
Para el gobernador, se trata de un resultado que está en línea con los compromisos contenidos en el Acuerdo de París, para contribuir con el desafío mundial de generación de fuentes alternativas de energía.
"Son 300 megavatios que se aportan al sistema interconectado nacional argentino, que tiene como prioridad (...) las energías renovables", agregó.
El proyecto prevé ampliarse con la generación de otros 200 MW para alcanzar una emisión total de 500 MW, según explicó Morales, quien indicó, no obstante, que se estima un alcance de 3.000 MW para los próximos 10 años.
"De acá a 10 años la idea es que Jujuy pueda aportar 3.000 megavatios de energía renovable. Y el modelo de trabajo con las empresas chinas para nosotros ha sido muy cómodo, fácil. Desde un punto de vista del desarrollo científico y tecnológico, también (ha sido) de alto nivel, así que estamos muy conformes de seguir trabajando por esa vía", acotó el gobernador.
GENERACIÓN DE EMPLEO
En tanto, Paulino Martínez, quien trabaja en el área de operación y mantenimiento electromecánico de los paneles solares de Cauchari I, II y III, contó a Xinhua que su traslado al proyecto le permitió aprender un nuevo oficio que le posibilitará de ahora en adelante incorporarse a otras iniciativas energéticas.
"Antes de venir acá (a la planta) yo trabajaba con la ganadería, la agricultura, sembrábamos. Me dieron la oportunidad de venir a trabajar aquí en Cauchari (...) no sabía nada de cómo montar un panel o de cómo montar las hincas, y me enseñaron, me capacité y sigo", dijo Martínez.
"Aprendí mucho y con esto voy a seguir porque me gusta. Voy a seguir con otros proyectos acá en Argentina o en otros lugares", añadió.
A lo largo de su construcción y tras su puesta en operación, la planta ha logrado generar 1.500 empleos entre directos e indirectos, la mayoría ejercidos por habitantes de esta provincia.
Por su parte, el gerente de Obras de SEPC, Jorge Delgado, explicó que el proyecto ha brindado más de 1.000 puestos de trabajo a las comunidades cercanas.
"Muchos de ellos, un 30 por ciento de ellos, no habían tenido la experiencia laboral, debido a que en esta zona de la Puna, que estamos a 4.200 metros (de altura sobre el nivel del mar), las principales actividades son agricultura y ganadería", y "muchos de ellos forman parte ahora del equipo especialista de operación y mantenimiento electromecánico", indicó.
Delgado detalló que Cauchari es una "mega planta" que cuenta con 315 megawatts de potencia nominal instalada, que se generan a través de 105 centros de transformación y de aproximadamente 979.000 paneles solares.
"(Quiero) agradecer a la empresa extranjera china que ha sabido invertir en este proyecto de energías renovables. Ha permitido fortalecer el suministro de energía bajando la huella de carbono que tenemos en el planeta y ha dado oportunidades al pueblo argentino, especialmente a las comunidades que hemos tenido cerca", expresó.
NUEVA MATRIZ ENERGÉTICA
Contribuir al desarrollo de nuevas fuentes de energía ha sido uno de los objetivos de Argentina y China con la construcción de la planta solar.
Se estima que Cauchari evite la emisión de 975.000 toneladas de carbono por año, colaborando con la preservación del medio ambiente, razón por la que desde SEPC se destaca la voluntad de ambos países de continuar el desarrollo de proyectos energéticos alternativos.