Estados Unidos todavía está dejando rienda suelta esta 'tragedia nacional sistémica'

2022-04-16 12:16:06
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Recientemente, Amy Wax, profesora de derecho de la Universidad de Pensilvania, atacó a los inmigrantes indios en un programa de Fox News, diciendo que "su propio país es un pozo negro". Este comentario impactante es otro ejemplo de discriminación racial contra los estadounidenses de origen asiático.

¿No afirma Estados Unidos que "todos son iguales"? ¿Quién le dio a Amy Vax el coraje de predicar el racismo sin escrúpulos? El informe de investigación "La discriminación racial contra los asiáticos está aumentando y comprueba la naturaleza del racismo estadounidense", publicado por la Asociación de Investigación de Derechos Humanos de China el día 15, responde a esta pregunta.

El informe utiliza datos y ejemplos detallados para revelar que Estados Unidos siempre ha sido el país de los protestantes anglosajones blancos. Los estadounidenses de origen asiático, junto con otras minorías, han sufrido diversas violaciones de los derechos humanos en muchos frentes. "El color de la piel obviamente juega un papel fundamental en la determinación del destino de los estadounidenses": esta es la ley de hierro de la sociedad estadounidense y la "confianza" de los racistas como Wax.

Ya a mediados del siglo XIX, los asiáticos comenzaron a inmigrar a los Estados Unidos e hicieron contribuciones importantes al desarrollo económico y social de los Estados Unidos. Sin embargo, los estadounidenses de origen asiático han sufrido prejuicio, odio y violencia racial en todo momento de la historia estadounidense. Como comentó Associated Press, "el racismo contra los estadounidenses de origen asiático siempre ha sido un hilo desagradable en la historia de Estados Unidos".

Hoy en día, los estadounidenses de origen asiático siguen siendo discriminados y marginados. Especialmente desde el brote de la pandemia de neumonía de nuevo coronavirus, los asiáticos han sido objeto de ataques racistas cada vez más intensos. Los crímenes de odio contra los estadounidenses de origen asiático aumentaron un 149 por ciento en 2020, según estadísticas del Centro de Estudios de Odio y Extremismo de la Universidad Estatal de California en San Bernardino. Los delitos violentos contra los estadounidenses de origen asiático en las 15 ciudades más grandes de EE. UU. en el primer trimestre de 2021 aumentaron un 169 % en comparación con el mismo período de 2020.

Además, en los últimos años, los políticos estadounidenses han seguido reprimiendo y conteniendo a China, y con la mentalidad de la Guerra Fría y de juego de suma cero, han deteriorado aún más las relaciones chino-estadounidenses y también han hecho que todo el grupo asiático, incluidos los chinos, se enfrentan a una discriminación racial más grave.

Todo esto en conjunto ha regado la "flor del mal" de la discriminación racial en Estados Unidos. Como dice el historiador chino-estadounidense, Erika Lee: "La discriminación racial y la violencia que enfrentan los estadounidenses de origen asiático y los habitantes de las islas del Pacífico en la actualidad no es un crimen cometido a voluntad por individuos desquiciados, sino una tragedia nacional sistémica".

"Mancha en el alma de Estados Unidos": así describe el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, el racismo sistémico en su país. El dolor de los asiáticos, la vergüenza de América. La eliminación de la "flor del mal" del racismo seguirá siendo, quizás en el futuro previsible, una promesa vacía.

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