Una compañía de ópera tibetana transmite la tradición a pesar de los desafíos actuales

El 21 de mayo se celebró el Día Mundial del Desarrollo Cultural, y aprovechando la ocasión hemos viajada a una prefectura autónoma de la provincia suroccidental china de Sichuan. Allí un grupo de artistas siguen transmitiendo el legado de la ópera tibetana, una expresión artística que se remonta 6 siglos atrás y que forma parte del patrimonio cultural intangible de China.

La ópera tibetana se remonta al siglo XIV. Está considerada una "reliquia viviente de la cultura tradicional china". Esta expresión artística sigue un formato de tres partes fijas. Las ocho obras tradicionales sobre la vida de Buda y las escrituras budistas se mantienen como el centro de sus representaciones, aunque en la actualidad algunos grupos tibetanos escriben sus propias obras. Los accesorios de este tipo de ópera son sencillos, pero su ambientación es majestuosa.

En el distrito de Xinduqiao, en la prefectura autónoma tibetana de Ganzi, una compañía compuesta de granjeros y pastores están ensayando su próxima actuación, dedicada al nacimiento de Buda. La ópera tibetana puede alargarse hasta 2 o 3 días, pero en esta ocasión solo tienen 10 minutos.

"La ópera tibetana solía representarse en las plazas, pero ahora se lleva a cabo más sobre un escenario. Podemos adaptar la ópera tibetana según la duración o el lugar. Sin embargo, mantenemos las características más básicas", dijo Zhaxi Jiangcuo, líder de la Compañía de ópera tibetana Xinduqiao.

Debido a que no todo el público entiende la lengua tibetana, prescinden de la segunda parte, que está compuesta por un monólogo y cantos en tibetano. Se han centrado en la danza del inicio y final de la obra que son interpretaciones de las ceremonias budistas. Su espectáculo ha sido muy bien recibido, pero Zhaxi está preocupado por el futuro de la ópera tibetana.

"No contamos con fondos suficientes. Ninguno de los 25 miembros de la compañía reciben remuneración alguna. Muchos de las personas que tienen talento prefieren hacer dinero antes que practicar o aprender ópera tibetana", añadió Zhaxi Jiangcuo.

Zhaxi tiene 53 años de edad, es uno de los veteranos, y entre los más jóvenes está Gama Duoji, de 23 años.

"Interpreto a Zhaxi Xuba, un hombre mayor que aparece normalmente en el tercer acto rezando por la buena fortuna. Me encanta la ópera tibetana, y la transmitiré en el futuro", expresó el actor de la Compañía de ópera tibetana Xinduqiao, Gama Duoji.

Duoji asegura que la ópera tibetana es parte de su vida, y espera que a través de él y su generación, esta tradición musical única pueda pervivir en el futuro.