Tirillas de requesón de soja seca
Las tirillas de requesón de soja seca son un platillo muy famoso de la escuela culinaria de Jiangsu. Esta provincia se ubica en el tramo inferior del río Yangtsé, la provincia de Jiangsu ocupa una superficie superior a 100 mil kilómetros cuadrados y cuenta con una población de 60 millones. El renombrado río Yangtsé y el antiguo Gran Canal son dos importantes vías fluviales de China, los cuales cursan respectivamente de oeste a este y norte a sur. Innumerables lagos salpican su tierra haciéndola aún más bella y fértil, el delta de río Yangtsé es denominado desde tiempos remotos como “la tierra del pescado y del arroz”.
Los platos de Jiangsu comprenden principalmente tres estilos: el de Nanjing, la capital provincial, el de Yangzhou y el de Suzhou, ambas son ciudades milenarias. Se caracteriza por la rigurosa selección de sus ingredientes, su refinada preparación, la correcta adopción de métodos culinarios que resultan idóneos para cada uno de los innumerables ingredientes y ofrece variados platillos de acuerdo a cada estación del año. En cuanto al método de preparación, esta escuela tiene un prestigioso guisado, salteado, cocina al vapor y al mismo tiempo presta atención a la utilización del caldo original, de manera que los platos resultan tiernos, exquisitos, de buena presentación y un poco blandos, todo esto mientras brinda un sabor único a cada plato.
Las tirillas de requesón de soja seca son un plato de Yangzhou, esta ciudad impone su estilo en la receta de este platillo al incluir al pescado del río Yangtsé y algunas aves domésticas como sus principales ingredientes.
En cuanto a este plato, se cuenta la siguiente historia. El emperador Qianlong de la dinastía Qing (1616-1912) fue un líder con mucho humor y le gustaba entretenerse mucho en sus ratos de ocio. Durante su reinado la nación prosperaba y la paz reinaba, además el pueblo vivía con tranquilidad y riqueza. Durante su tiempo de ocioso, al emperador Qianlong le gustaba viajar por todas partes, e incluso salir de la capital. Por eso, en los lugares a los que él viajaba, se habían creado muchas interesantes historias, sin importar que fuesen verdaderas o falsas, se presentaron como historias extraoficiales. Según los datos históricos, el emperador Qianlong había viajado seis veces al sur del río Yangtsé y siempre que llegaba a aquel lugar, los funcionarios locales le ofrecían joyas y platos exquisitos. “El paraíso está en el cielo, y Hangzhou y Suzhou en la tierra.” En esta región, el paisaje es magnífico, tiene una cantidad innumerable de lugares pintorescos, el emperador Qianlong se divirtió tanto en aquel lugar que se olvidó de volver. Con el objetivo de congraciarse con el emperador, los funcionarios locales de Yangzhou gastaron mucho dinero para contratar a varios cocineros de muy alto nivel, siendo así los cocineros no escatimaron esfuerzos y demostraron sus habilidades especiales en la cocina, por ello con mucha dedicación prepararon múltiples platillos, entre ellos había un plato llamado sopa de nueve tirillas, en el cual utilizaron tirillas de requesón de soja seca, de carne de pollo, etc. Debido a que las tirillas de requesón de soja seca se cortaron muy finamente, cuando se cocieron con el caldo de gallo, se obtuvo un sabor fuerte. Después de probarlo, el emperador Qianlong quedó muy satisfecho y lo alabó con muchas ganas, dichos elogios tenían un valor mayor que cualquier publicidad. Desde entonces, este platillo se volvió muy famoso, en el libro Diao Ding Ji de la dinastía Qing (1616-1912) se escribieron varios registros sobre este plato.
Con el tiempo, las personas han mejorado y perfeccionado la preparación de los ingredientes y se han ido añadiendo nuevos, por ejemplo, tirillas de carne de pollo, camarones secos pelados, tirillas de jamón cocido, brotes de guisante, gambas frescas peladas, etc.
Para cocinar este platillo, se necesita una técnica de corte muy precisa. Hay que cortar un requesón de soja seca de 1 cm de grosor, en 24 rebanadas muy finas, luego se las vuelve a cortar en tirillas tan finas como las cerdas de un cepillo. Durante el proceso de cocción, hay que escaldar dos veces las tirillas de requesón de soja seca en agua caliente, con el objetivo de quitar el olor de soja. Cuando se las cocina, primeramente, se utiliza una llama fuerte, luego se la disminuye para así cocerlas juntos a las tirillas de carne de pollo, hígado de pollo, brote de bambú, caldo de gallina, etc. Antes de apagar el fuego, se puede poner gambas cocidas, tirillas de jamón cocido, etc. Luego de un momento, se puede añadir las verduras.
Xing,an Jushi de la dinastía Qing (1616-1912) escribió en una poesía describiendo el hermoso paisaje de Yangzhou. Los clientes fumaban, tomaban vino y comían las tirillas de requesón de soja seca. De verdad, la forma de cocción de la dinastía Qing (1616-1912) no se puede comparar con la de hoy en día, actualmente la forma de cocinar es mucho más detallada y precisa. En los restaurantes o las casas de té de Yangzhou, los clientes pueden pedir un plato de tirillas de requesón de soja seca con una copa de vino y quedar muy satisfechos, de esta manera se puede experimentar todo el encanto de este plato.
Ingredientes:
Requesón blanco de soja seca… 300g
Hígado de pollo… 2
Jamón cocido… 30g
Brote de guisante… 10g
Gambas frescas peladas… 50g
Brote de bambú… 50g
Carne de pollo… 50g
Sal… 3g
Manteca de cerdo…75g
Preparación:
Cortamos el pollo y el jamón cocido en tirillas, además cortamos el hígado de pollo y el brote de bambú en rebanadas.
Cortamos el requesón blanco de soja seca en rebanadas finas y luego las volvemos a cortar en tirillas aún más finas como hilos. Primero las ponemos en el agua caliente para escaldarlas, luego los ponemos en agua tibia y repetimos el mismo proceso de escaldado.
Ponemos la manteca de cerdo en la sartén y cuando esté caliente, ponemos el caldo de gallina, las tirillas de pollo, las rebanadas de hígado y de brote de bambú, las gambas frescas peladas, las tirillas de requesón blanco de soja seca. Cuando esté hirviendo, ponemos un poco de sal y tapamos la sartén.
Lo cocinamos por cinco minutos y luego apagamos el fuego. Al final, esparcimos los brotes de guisantes y las otras tirillas de jamón en el plato y Ya está listo, ¡A comer!
Las tirillas de requesón de soja seca son un platillo muy famoso de la escuela culinaria de Jiangsu. Esta provincia se ubica en el tramo inferior del río Yangtsé, la provincia de Jiangsu ocupa una superficie superior a 100 mil kilómetros cuadrados y cuenta con una población de 60 millones. El renombrado río Yangtsé y el antiguo Gran Canal son dos importantes vías fluviales de China, los cuales cursan respectivamente de oeste a este y norte a sur. Innumerables lagos salpican su tierra haciéndola aún más bella y fértil, el delta de río Yangtsé es denominado desde tiempos remotos como “la tierra del pescado y del arroz”.
Los platos de Jiangsu comprenden principalmente tres estilos: el de Nanjing, la capital provincial, el de Yangzhou y el de Suzhou, ambas son ciudades milenarias. Se caracteriza por la rigurosa selección de sus ingredientes, su refinada preparación, la correcta adopción de métodos culinarios que resultan idóneos para cada uno de los innumerables ingredientes y ofrece variados platillos de acuerdo a cada estación del año. En cuanto al método de preparación, esta escuela tiene un prestigioso guisado, salteado, cocina al vapor y al mismo tiempo presta atención a la utilización del caldo original, de manera que los platos resultan tiernos, exquisitos, de buena presentación y un poco blandos, todo esto mientras brinda un sabor único a cada plato.
Las tirillas de requesón de soja seca son un plato de Yangzhou, esta ciudad impone su estilo en la receta de este platillo al incluir al pescado del río Yangtsé y algunas aves domésticas como sus principales ingredientes.
En cuanto a este plato, se cuenta la siguiente historia. El emperador Qianlong de la dinastía Qing (1616-1912) fue un líder con mucho humor y le gustaba entretenerse mucho en sus ratos de ocio. Durante su reinado la nación prosperaba y la paz reinaba, además el pueblo vivía con tranquilidad y riqueza. Durante su tiempo de ocioso, al emperador Qianlong le gustaba viajar por todas partes, e incluso salir de la capital. Por eso, en los lugares a los que él viajaba, se habían creado muchas interesantes historias, sin importar que fuesen verdaderas o falsas, se presentaron como historias extraoficiales. Según los datos históricos, el emperador Qianlong había viajado seis veces al sur del río Yangtsé y siempre que llegaba a aquel lugar, los funcionarios locales le ofrecían joyas y platos exquisitos. “El paraíso está en el cielo, y Hangzhou y Suzhou en la tierra.” En esta región, el paisaje es magnífico, tiene una cantidad innumerable de lugares pintorescos, el emperador Qianlong se divirtió tanto en aquel lugar que se olvidó de volver. Con el objetivo de congraciarse con el emperador, los funcionarios locales de Yangzhou gastaron mucho dinero para contratar a varios cocineros de muy alto nivel, siendo así los cocineros no escatimaron esfuerzos y demostraron sus habilidades especiales en la cocina, por ello con mucha dedicación prepararon múltiples platillos, entre ellos había un plato llamado sopa de nueve tirillas, en el cual utilizaron tirillas de requesón de soja seca, de carne de pollo, etc. Debido a que las tirillas de requesón de soja seca se cortaron muy finamente, cuando se cocieron con el caldo de gallo, se obtuvo un sabor fuerte. Después de probarlo, el emperador Qianlong quedó muy satisfecho y lo alabó con muchas ganas, dichos elogios tenían un valor mayor que cualquier publicidad. Desde entonces, este platillo se volvió muy famoso, en el libro Diao Ding Ji de la dinastía Qing (1616-1912) se escribieron varios registros sobre este plato.