Libro Amarillo de América Latina y el Caribe 2017-2018 analiza situación regional

2018-06-25 09:16:16
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Recientemente, el Instituto para América Latina de la Academia de Ciencias Sociales de China (CASS, por sus siglas en inglés) y la Prensa Académica de Ciencias Sociales presentaron juntos en Beijing el Libro Amarillo de América Latina y el Caribe 2017-2018, en el que se analiza el cambio y la tendencia de la situación política, económica, social y las relaciones exteriores desde 2017.

En 2017 y 2018, muchos países latinoamericanos celebraron la elección de líderes o de parlamento. En 2017, fueron Ecuador, Bahamas, Chile y Honduras. En 2018, Costa Rica, Colombia, Antigua y Barbuda, Paraguay, Cuba, Venezuela, México y Brasil. Cabe mencionar que algunos partidos tradicionales quedaron en declive, ya que sus líderes se ven involucrados en casos de corrupción. Las ilusiones de la gente sobre los partidos tradicionales y sus políticos se rompen aún más. La corrupción que se extiende en toda la región latinoamericana aumenta la incertidumbre de las elecciones en 2018. Yang Jianmin, director de la Oficina de Investigación de la Política del Instituto para América Latina de CASS, manifestó:

“La corrupción es una variable destacada en las elecciones en este año, por ejemplo, los casos en Brasil, Costa Rica y México. Mientras tanto, el escándalo ‘Panamá Papers' involucra a líderes de Argentina, Brasil, Ecuador, México, Panamá, Perú, Venezuela y otros países, incluyendo al actual presidente argentino Mauricio Macri”.

Conforme a la recuperación de la economía global, el crecimiento de comercios internacionales y el rebote del precio de las materias primas, la economía de América Latina mostró una tendencia ascendiente en 2017. Los principales indicadores, como la inflación y la balanza de pagos internacional, han experimentado algunas mejoras. De acuerdo con las estadísticas de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el año anterior la región latinoamericana terminó su más larga recesión económica desde la década de los ‘90 del siglo XX, y logró una tasa de crecimiento del 1,3 por ciento.

Sin embargo, comparando con otras regiones del mundo, el riesgo de ser marginado de América Latina va en aumento. Yue Yunxia, directora de la Oficina de Investigación de la Economía del Instituto para América Latina de CASS, indicó:

“La economía de los países de América Latina ha mostrado una recuperación de forma general. No obstante, cuando los comparamos con otros países del mundo, en el futuro, la tasa de crecimiento económico será menor que el nivel promedio mundial, del nivel de los países en desarrollo y las economías emergentes, e incluso más baja que la de los principales países desarrollados occidentales hasta el 2019. Es decir, aunque hemos observando un rebote, dentro del incremento se esconde la crisis, el riesgo de ser marginado de América Latina va en aumento”.

Afectado por la situación política y económica, la sociedad de América Latina ha experimentado cambios notables, por ejemplo, la reducción de la pobreza. Entre 2002 y 2014 el nivel de pobreza de la región disminuía continuamente. Sin embargo, en los últimos dos años la centroderecha se convirtió en la principal fuerza política. Los gobiernos del centroderecha llevan a cabo sucesivamente la reforma social con el objetivo de aliviar la carga pesada en las finanzas del estado causada por el alto bienestar social durante la gobernanza anterior de la izquierda, y disminuir el costo de mano de obra, así como perfeccionar el entorno de inversión, entre otras metas. Asimismo se ha terminado el ciclo de auge económico, después de 2014 la liberación de la pobreza en la región latinoamericana cayó en el estancamiento, de tal modo que el nivel de la pobreza volvió a elevarse. Li Hua, investigadora adjunta de la Oficina de Investigación de Sociedad y Cultura del Instituto para América Latina de CASS, dijo:

“A partir del 2002 y hasta el 2014, el número de la población pobre de América Latina bajó de 233 a 168 millones, lo que supone una tendencia a la caída. No obstante, desde 2015, dicho número está creciendo. Tomemos el número de la población en pobreza extrema como ejemplo, durante el periodo 2002-2014, 12 años, disminuyó de 63 millones a 48 millones, pero luego en solo 3 años aumentó hasta 62 millones. Esto muestra que el alivio de la pobreza en la región latinoamericana ha sufrido un cuello de botella en los últimos tres años, y la fuerza motriz que impulsa constantemente la reducción de la pobreza se enfrenta a una grave escasez”.

El mayor cambio en el entorno exterior de los países latinoamericanos en el 2017 proviene del gran ajuste de políticas hacia América Latina en la administración del presidente Donald Trump de los Estados Unidos. Sus nuevas políticas incrementan la incertidumbre del entorno exterior para el desarrollo de esta región, agravan la preocupación de los países mencionados, sobre todo a los gobiernos de izquierda, también profundizan en cierta medida las contradicciones y diferencias entre estos países. Chen Yuanting, subdirectora de la Oficina de Investigación de Relaciones Internacionales del Instituto para América Latina de CASS, señaló:

“En cuanto al factor de los Estados Unidos, por un lado, salvo México, Venezuela y Cuba, la región latinoamericana seguirá siendo marginada en la estrategia global de la administración del presidente Donald Trump de los Estados Unidos; por otro lado, en la actualidad América Latina es la primera víctima del impacto de Donald Trump, cuyas medidas aumentan la influencia negativa en el entorno exterior de esta región, y en la estabilidad de la economía regional”.

El Libro Amarillo de América Latina y el Caribe 2017-2018 también apunta que hoy en día el tema principal de las relaciones exteriores e interiores de América Latina se tratan de adaptar a cambios del orden global y tomar medidas adecuadas para resolver una serie de difíciles problemas diplomáticos en una situación económica y política con mucha incertidumbre.

Actualmente China es el mayor socio comercial y una importante fuente de inversiones para un gran número de países de América Latina, y la estructura económica relativamente unitaria y las infraestructuras atrasadas de la región se han mejorado. La Iniciativa de la Franja y la Ruta propuesta por China ha sido bienvenida en América Latina, región que se ha convertido en la extensión natural de la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI y en socio indispensable de la iniciativa.

De "Hecho en China" a "Creado en China", las centrales hidroeléctricas, los proyectos de generación de energía fotovoltaica, los proyecto de transmisión de superalta tensión, carreteras y puentes construidos por compañías chinas, los trenes, vehículos, autobuses electrónicos, teléfonos móviles, acondicionadores de aire de fabricación china, los servicios de comercio en línea ofrecidos por empresas chinas, así como los productos de uso diario hechos en china, han mejorado verdaderamente el bienestar de los pueblos latinoamericanos.

En un mensaje de felicitación para la segunda reunión ministerial para el Foro China-Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) celebrado a inicios del año en Santiago, capital de Chile, el presidente de China, Xi Jinping, exhortó a los países de América Latina a participar activamente en la Iniciativa de la Franja y la Ruta y a crear una nueva ruta de cooperación transpacífica con vistas a conectar a China y América Latina de manera más estrecha. Hace cuatro años planteó la Iniciativa de la Franja y la Ruta con el objetivo de instalar una nueva plataforma de cooperación internacional en interconectividad con la esperanza de impulsar el desarrollo común en todo el mundo. La propuesta ha sido cálidamente recibida por la comunidad internacional, incluyendo a muchos miembros de CELAC. En el pasado, los ancestros del pueblo chino y del pueblo latinoamericano superaron grandes dificultades para cruzar vastos océanos y crearon juntos la Ruta Marítima de la Seda en el Océano Pacífico. Xi exhortó a las dos partes a trabajar de manera estrecha en el marco de la Franja y la Ruta.

La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hua Chunying, manifestó que la política de China hacia América Latina no apunta a ninguna tercera parte, ni intenta desafiar o reemplazar el "dominio" de nadie. China desarrolla sus relaciones con otros países en línea con los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica. Puntualizó: “El desarrollo de las relaciones China-América Latina ni apunta, ni repele ni afecta los vínculos de ambas partes con otros países. A pesar de estar separadas por vastos océanos, China y América Latina afrontan la misma tarea de desarrollo. La cooperación entre los dos lados se basan en intereses comunes y necesidades mutuas. Deseamos profundizar y actualizar la cooperación con los países latinoamericanos, particularmente en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta”.

Especialistas del mundo coincidieron que América Latina y China tienen un gran potencial para profundizar la cooperación con una visión a largo plazo que tiene que aprovecharse. El economista jefe del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), Pablo Sanguinetti, aseveró que China representa una fuente de oportunidades para la región en diversas áreas, pero particularmente, en materia de infraestructura. El economista consideró que el desafío radica entonces en aprovechar esta oportunidad histórica para realizar las inversiones necesarias en infraestructura, innovación y recursos humanos, para transformar la renta de los recursos naturales en formas variadas de capital humano, físico e institucional que permitan elevar los niveles de productividad y competitividad.

De igual manera propuso abrir el espectro de la dinámica entre ambas partes empezando por una agenda de negociación comercial, así como pensar en los fomentos de clúster en industrias intensivas en recursos naturales. Estos pueden recibir Inversión Extranjera Directa. Asimismo, consideró que China podría también ayudar a la región latinoamericana y caribeña a financiar proyectos de infraestructura de mayor conectividad e integración física.

Recientemente, el Instituto para América Latina de la Academia de Ciencias Sociales de China (CASS, por sus siglas en inglés) y la Prensa Académica de Ciencias Sociales presentaron juntos en Beijing el Libro Amarillo de América Latina y el Caribe 2017-2018, en el que se analiza el cambio y la tendencia de la situación política, económica, social y las relaciones exteriores desde 2017.

En 2017 y 2018, muchos países latinoamericanos celebraron la elección de líderes o de parlamento. En 2017, fueron Ecuador, Bahamas, Chile y Honduras. En 2018, Costa Rica, Colombia, Antigua y Barbuda, Paraguay, Cuba, Venezuela, México y Brasil. Cabe mencionar que algunos partidos tradicionales quedaron en declive, ya que sus líderes se ven involucrados en casos de corrupción. Las ilusiones de la gente sobre los partidos tradicionales y sus políticos se rompen aún más. La corrupción que se extiende en toda la región latinoamericana aumenta la incertidumbre de las elecciones en 2018. Yang Jianmin, director de la Oficina de Investigación de la Política del Instituto para América Latina de CASS, manifestó:

“La corrupción es una variable destacada en las elecciones en este año, por ejemplo, los casos en Brasil, Costa Rica y México. Mientras tanto, el escándalo ‘Panamá Papers' involucra a líderes de Argentina, Brasil, Ecuador, México, Panamá, Perú, Venezuela y otros países, incluyendo al actual presidente argentino Mauricio Macri”.

Conforme a la recuperación de la economía global, el crecimiento de comercios internacionales y el rebote del precio de las materias primas, la economía de América Latina mostró una tendencia ascendiente en 2017. Los principales indicadores, como la inflación y la balanza de pagos internacional, han experimentado algunas mejoras. De acuerdo con las estadísticas de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el año anterior la región latinoamericana terminó su más larga recesión económica desde la década de los ‘90 del siglo XX, y logró una tasa de crecimiento del 1,3 por ciento.

Sin embargo, comparando con otras regiones del mundo, el riesgo de ser marginado de América Latina va en aumento. Yue Yunxia, directora de la Oficina de Investigación de la Economía del Instituto para América Latina de CASS, indicó:

“La economía de los países de América Latina ha mostrado una recuperación de forma general. No obstante, cuando los comparamos con otros países del mundo, en el futuro, la tasa de crecimiento económico será menor que el nivel promedio mundial, del nivel de los países en desarrollo y las economías emergentes, e incluso más baja que la de los principales países desarrollados occidentales hasta el 2019. Es decir, aunque hemos observando un rebote, dentro del incremento se esconde la crisis, el riesgo de ser marginado de América Latina va en aumento”.

Afectado por la situación política y económica, la sociedad de América Latina ha experimentado cambios notables, por ejemplo, la reducción de la pobreza. Entre 2002 y 2014 el nivel de pobreza de la región disminuía continuamente. Sin embargo, en los últimos dos años la centroderecha se convirtió en la principal fuerza política. Los gobiernos del centroderecha llevan a cabo sucesivamente la reforma social con el objetivo de aliviar la carga pesada en las finanzas del estado causada por el alto bienestar social durante la gobernanza anterior de la izquierda, y disminuir el costo de mano de obra, así como perfeccionar el entorno de inversión, entre otras metas. Asimismo se ha terminado el ciclo de auge económico, después de 2014 la liberación de la pobreza en la región latinoamericana cayó en el estancamiento, de tal modo que el nivel de la pobreza volvió a elevarse. Li Hua, investigadora adjunta de la Oficina de Investigación de Sociedad y Cultura del Instituto para América Latina de CASS, dijo:

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