La urbanización de China, importante fuerza motriz para el crecimiento económico

La urbanización de China sucedida en los últimos 40 años, se considera como una importante fuerza motriz para el crecimiento económico porque se le ofrece una abundante mano de obra, tierra con precio bajo y buena infraestructura.

Los residentes urbanos permanentes del país asiático ascendían a 810 millones a finales de 2017, un aumento de 640 millones respecto a 1978, con un crecimiento promedio anual de 16,44 millones, de acuerdo con el Buró Nacional de Estadísticas (BNE) de China. El índice de urbanización fue de 58,52 por ciento, por encima del 17,92 por ciento de hace cuatro décadas. El número de ciudades chinas aumentó más del triple para llegar a 661 entre 1978 y 2017. Dieciséis ciudades tienen más de 5 millones de residentes, de acuerdo con datos del registro de hogares, mientras que sólo Shanghai alcanzó ese nivel hace 40 años.

Además, la reforma del sistema de “hukou” que es uno de los desafíos en la urbanización china. Se calcula que en el año 2030, el número de la población urbana de China llegará a mil millones, y la tasa de urbanización del país será cerca del 70%.

Li Xian, experto chino del sector, opinó que China debería hacer la transición desde el sistema del registro civil “hukou” al sistema unificado de la residencia en manera graduada. Al respeto nos expresó: “El abolir el sistema de hukou, por supuesto no se pude completar en un instante, dado que al mismo tiempo de cancelar el sistema, hace falta desarrollar el bienestar social y garantizar a cada uno de los ciudadanos a aprovechar el beneficio social. Esto también es otro desafío en la reforma de sistema de hukou. Pero el gobierno chino ha empezado a enfrentarse a estos desafíos y tomar medidas respectivas”.

China ha impulsado la relajación de las restricciones a la residencia permanente para la población rural que trabaja en las ciudades. Como parte de la nueva campaña de urbanización, los gobiernos municipales fortalecen la construcción de infraestructuras y el suministro de servicios públicos para garantizar las condiciones de vida de los nuevos residentes, afirmó el funcionario. China ha publicado un documento que describe las tareas clave para este año en materia de urbanización, y en el que informa que las ciudades con poblaciones de entre uno y tres millones de habitantes deberán eliminar las restricciones a la expedición de permisos de residencia permanente. Para las ciudades con poblaciones de entre tres y cinco millones, los requisitos para tales permisos deberán ser relajados, y las restricciones para que ciertos grupos clave de personas obtengan dichos permisos deben eliminarse. Tales grupos incluyen la nueva generación de trabajadores migrantes que tienen empleos estables en ciudades y las personas de origen rural que han vivido en ciudades durante más de cinco años.

Anteriormente el país había abolido gradualmente las restricciones de residencia permanente en ciudades pequeñas y medianas con menos de un millón de habitantes. Es necesario hacer mayores esfuerzos para garantizar que los residentes permanentes de las ciudades, incluida la población rural, tengan plenamente garantizado el derecho al bienestar social en las ciudades en que residen. De acuerdo con el Ministerio de Seguridad Pública de China en 2018 se concedieron registros urbanos a 13,9 millones de personas de las zonas rurales.

La rápida urbanización en China ha llevado grandes flujos de población de las áreas rurales a las ciudades, sin embargo, solo las personas registradas con permisos de residencia permanente tienen derecho a los servicios de bienestar social en las ciudades donde residan. Los servicios públicos básicos deben garantizarse para los habitantes permanentes no registrados en las ciudades, con una mayor oferta educativa en las ciudades donde hay un número considerable de hijos de trabajadores migrantes. La cobertura de las viviendas de alquiler con apoyo gubernamental y los fondos de asistencia de vivienda deben ampliarse para beneficiar a más habitantes permanentes no registrados.

China tiene como objetivo añadir 100 millones de residentes urbanos permanentes registrados de 2016 a 2020. A finales de 2018, la proporción de dichos residentes respecto a la población total del país fue del 43,37 por ciento, un aumento de 1,02 puntos porcentuales con respecto al año anterior, según datos del Buró Nacional de Estadísticas.

Wen Ningyun, analista del Centro de Investigación de Desarrollo Social de China, opina que una reforma profunda apoyará la construcción del nuevo tipo de urbanización en China. Al respecto afirmó: “El camino para mejorar la urbanización requiere una profunda reforma en las áreas delanteras, por ejemplo, tenemos que promover la movilidad del mercado laboral y resolver los problemas que existen en el sistema de seguridad social. La urbanización es también un proceso en el que se incorpora el factor social, por lo tanto es necesario que alentemos el capital social a participar en el proceso de urbanización. Además, debemos desarrollar el mercado inmobiliario, controlar la contaminación, y tomar el camino de bajo carbón”.

Zhang Ping, profesor de la Universidad de Finanzas y Economía de Sudoeste de China, elogió admiración a la determinación de China de tomar el camino del nuevo tipo de urbanización, al mismo tiempo dio su esperanza de que este informe pudiera ser una guía para otros países del mundo en cuanto a resoluciones de los problemas que surgen de la urbanización. Él manifestó: “Creo que el caso chino funcionará como una referencia para otro países en la construcción de una ciudad más habitable y limpia bajo sus respectivas situaciones”.

Después de la reforma y apertura, la urbanización del país asiático ha conseguido un ritmo acelerado. Actualmente el desarrollo de la urbanización del país asiático ha entrado en una etapa crítica. Aunque China evitó algunos problemas comunes que habían aparecido en el proceso de urbanización de otros países, ahora están empezando a mostrarse las presiones, tales como: la aparición de las ciudades ineficientes por causa de la tierra extensiva, la amenaza de la contaminación, la escasez del agua y tierra cultivable. Según las previsiones de los expertos, en las próximas dos décadas, la tasa de urbanización de China seguirá creciendo, hacia el 75% y 80%. Los expertos también hacen un análisis sistemático sobre los problemas históricos y actuales consiguientes de la alta tasa de urbanización en América Latina, resumen la experiencia y las lecciones aprendidas de las experiencias en muchos países de la región que siguen flotando en el nivel de ingreso medio.

El doctor Xie Wenze, investigador adjunto de la Historia Económica del Instituto de América Latina de la Academia de China de Ciencias Sociales, indicó que la tasa de urbanización de China superó el 50% en 2011, mientras que dicha tasa en América Latina ha alcanzado el 80%. El estudio sobre la urbanización en América Latina, puede proporcionar una referencia para el desarrollo en China. Al respecto sostiene: “En el último medio siglo, la tasa de urbanización en América Latina ha atravesado el 60%, 70% y 80%, realizando tres saltos, mientras que el número de la población urbana de América Latina creció a más de 300 millones, se multiplicó por tres. Eso también tiene una referencia con respecto tanto al futuro de urbanización china, como a la reforma de la economía y de la administración política del país.” Aunque desde el 1960 la tasa de urbanización en América Latina creció a pasos agigantados, los datos muestran que durante este período el crecimiento medio del PIB de América Latina fue tan sólo del 3,9%. Este fenómeno, que el nivel de desarrollo económico está por debajo del nivel de la urbanización, se conoce como “sobre-urbanización”. Según el doctor Xie, la causa de este fenómeno en América Latina, es el proceso estancado en la industrialización y el consumo reprimido de los hogares.

Sobre el problema del consumo familiar, Xie Wenze nos dijo: “El problema de consumo de los hogares en América Latina se observa en que el trabajo no conduce a enriquecerse, y el sueldo no satisface a la demanda cotidiana. En los países de la región, la proporción que el ingreso laboral ocupa en la renta nacional es generalmente baja, y el ingreso laboral de la familia es insuficiente para cubrir las necesidades básicas”.

Han Yanming, experto del sector resumió las experiencias de la urbanización en distintos países, tomando como ejemplos los casos de Europa y de América Latina. El Reino Unido llevó 300 años en cumplir la urbanización por medio de privar la tierra de los agricultores, y EE.UU. tomó 100 años en realizar el dicho proceso a través de alentar a los campesinos con poder económico en la anexión de tierra. En cuanto a la urbanización latinoamericana, manifestó: “El problema que no se resuelve en la urbanización de América Latina es el empleo de una gran cantidad de personas que entraron en las ciudades. Por eso, el gobierno chino debería tomar una medida relacionada con este problema”.

Añadió que la urbanización es una medida importante que el gobierno chino impulsa para el desarrollo económico. La urbanización es un proceso de transferencia de mano de obra rural excedente a la ciudad, también es un proceso de promover la industrialización y el desarrollo económico del país. Tendrá un importante impacto positivo en tratar con las desigualdades sociales y elevar la productividad laboral. Sobre el futuro de la urbanización en China, él tiene mucha confianza. “Aunque hemos logrado grandes éxitos, todavía tenemos un largo camino por recorrer; a pesar de que tenemos un largo camino por recorrer, hemos elegido el camino correcto; aunque hemos elegido el camino correcto, en el avance aparecerán diferentes vueltas y dificultades. Sin embargo, tenemos confianza en que a mediados de este siglo, China se convertirá en un país socialista moderno próspero, poderoso, democrático, civilizado y armonioso”.

La urbanización de China sucedida en los últimos 40 años, se considera como una importante fuerza motriz para el crecimiento económico porque se le ofrece una abundante mano de obra, tierra con precio bajo y buena infraestructura.

Los residentes urbanos permanentes del país asiático ascendían a 810 millones a finales de 2017, un aumento de 640 millones respecto a 1978, con un crecimiento promedio anual de 16,44 millones, de acuerdo con el Buró Nacional de Estadísticas (BNE) de China. El índice de urbanización fue de 58,52 por ciento, por encima del 17,92 por ciento de hace cuatro décadas. El número de ciudades chinas aumentó más del triple para llegar a 661 entre 1978 y 2017. Dieciséis ciudades tienen más de 5 millones de residentes, de acuerdo con datos del registro de hogares, mientras que sólo Shanghai alcanzó ese nivel hace 40 años.

Además, la reforma del sistema de “hukou” que es uno de los desafíos en la urbanización china. Se calcula que en el año 2030, el número de la población urbana de China llegará a mil millones, y la tasa de urbanización del país será cerca del 70%.

Li Xian, experto chino del sector, opinó que China debería hacer la transición desde el sistema del registro civil “hukou” al sistema unificado de la residencia en manera graduada. Al respeto nos expresó: “El abolir el sistema de hukou, por supuesto no se pude completar en un instante, dado que al mismo tiempo de cancelar el sistema, hace falta desarrollar el bienestar social y garantizar a cada uno de los ciudadanos a aprovechar el beneficio social. Esto también es otro desafío en la reforma de sistema de hukou. Pero el gobierno chino ha empezado a enfrentarse a estos desafíos y tomar medidas respectivas”.

China ha impulsado la relajación de las restricciones a la residencia permanente para la población rural que trabaja en las ciudades. Como parte de la nueva campaña de urbanización, los gobiernos municipales fortalecen la construcción de infraestructuras y el suministro de servicios públicos para garantizar las condiciones de vida de los nuevos residentes, afirmó el funcionario. China ha publicado un documento que describe las tareas clave para este año en materia de urbanización, y en el que informa que las ciudades con poblaciones de entre uno y tres millones de habitantes deberán eliminar las restricciones a la expedición de permisos de residencia permanente. Para las ciudades con poblaciones de entre tres y cinco millones, los requisitos para tales permisos deberán ser relajados, y las restricciones para que ciertos grupos clave de personas obtengan dichos permisos deben eliminarse. Tales grupos incluyen la nueva generación de trabajadores migrantes que tienen empleos estables en ciudades y las personas de origen rural que han vivido en ciudades durante más de cinco años.

Anteriormente el país había abolido gradualmente las restricciones de residencia permanente en ciudades pequeñas y medianas con menos de un millón de habitantes. Es necesario hacer mayores esfuerzos para garantizar que los residentes permanentes de las ciudades, incluida la población rural, tengan plenamente garantizado el derecho al bienestar social en las ciudades en que residen. De acuerdo con el Ministerio de Seguridad Pública de China en 2018 se concedieron registros urbanos a 13,9 millones de personas de las zonas rurales.