China será el segundo mayor mercado de vino en el mundo en cinco años

Mucha gente ya ha tenido el concepto de “beber menor cantidad de vino, y preferir el vino de calidad más alta”. Por lo tanto, se observa que el crecimiento del valor de venta de vino es mayor que el del volumen de venta de vino en muchos mercado, sobre todo en Asia Pacífico y América Latina.

Estados Unidos, el mercado de vinos más grande del mundo, siguió creciendo modestamente, con un valor de mercado de 34.800 millones de dólares en 2017. Francia quedó en segundo lugar, con un valor de mercado de 16.700 millones de dólares. China siguió su lugar, con un valor de mercado de 16.500 millones de dólares.

Las perspectivas de Vinexpo/IWSR apuntan a que en cinco años China superará a Francia, como el segundo mercado de vinos más grande del mundo, detrás de Estados Unidos. Se espera que el mercado del vino de China sea valorado en 19.500 millones de dólares para entonces. En la actualidad, las personas están muy conectadas por Internet móvil, el 20 por ciento del consumo de vino de China se realiza a través de canales en línea. La comodidad de las compras en línea y los canales en línea están revolucionando la industria. Mientras tanto, los canales de venta directa que enfrentan los consumidores también se están desarrollando rápidamente.

Para 2022, los vinos finos (con un precio de entre 10 y 20 dólares) serán la fuerza impulsora del crecimiento de las ventas (el valor del mercado de vino aumentará hasta un 15 por ciento entre 2017 y 2022). China y los Estados Unidos son los dos mayores consumidores de vinos finos, y llevará a cabo la mayor contribución a esta ronda de crecimiento.

Tan Wen, de un banco de inversión, expresó su opinión: “En China, durante los últimos años, la economía de vino es próspera. Cada día hay más consumidores que conocen el vino y saben distinguir los precios exagerados de algunos vinos importados. El vino ya no se considera como un producto de alta categoría como antes, incluso algunos chinos elaboran vino sencillo en sus propias casas. El consumo del vino dejó de ser una muestra de estatus o de lujo y ahora está al alcance de muchos clientes chinos. Es mejor seguir esta corriente, tomar el camino de aproximarse a los consumidores, y cultivar la costumbre de beber una determinada marca de vino a sus consumidores, o sea, su mercado objetivo”.

Para satisfacer la demanda de vino, China amplía las plantaciones de uvas. Por ejemplo, la región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, famosa por la abundancia y calidad de sus uvas, planea establecer más bodegas y expandir las plantaciones de esta fruta. Según un plan sobre el desarrollo de la industria vinícola publicado recientemente por el gobierno regional, para 2025 Xinjiang tendrá más de 150 cavas, con lo que su producción anual llegará a los 300.000 kilolitros. Para la misma época, el sector de la elaboración de vinos tendrá un valor de producción de 10.000 millones de yuanes (1.450 millones de dólares), de acuerdo con el documento. Al mismo tiempo, el área de plantación de vides se ampliará de las actuales 32.966 hectáreas a 53.333.

Tradicionalmente, los habitantes locales consumen las uvas al natural, aunque las uvas pasas también constituyen un alimento común. Sin embargo, en los últimos años se han construido más bodegas para satisfacer la creciente demanda de los amantes de los vinos. En la actualidad, en la región hay alrededor de 100 de estas instalaciones. La administración regional también espera promover la integración de la cultura del vino con la industria turística, con el fin de aumentar los ingresos de la población local.

Hoy día, en China, el consumo de vino es cada vez más popular. Esto produce una gran oportunidad comercial. Las empresas chinas también apuestan por el mercado chino de vino, inyectan más inversión al sector del vino de China. Incluso Maotai, una famosa marca china de licor, ahora invierte en el sector del vino. El licor Maotai, en China, no es una bebida alcohólica más. En 1935, los soldados del Ejército Rojo que llegaron al pueblo Maotai compraron dos cajitas de licor de Maotai con cuatro yuanes para limpiar sus pies. Posteriormente, la gente empezó a creer que el Maotai podía curar las heridas. En 1949, durante una reunión celebrada en Zhongnanhai, el primer ministro de la época, Zhou Enlai, señaló el Maotai como bebida alcohólica principal para el banquete con motivo de la fundación de la Nueva China. Desde esa época, el Maotai preservó su espacio en el escenario político. Desde 1949 a hoy día, el Maotai aparece en casi todos los banquetes nacionales, y se considera un símbolo de la excelencia de las bebidas alcohólicas chinas.

Pero ahora esta marca invierte en la industria del vino debido al crecimiento de la demanda de vino en China. En julio de 2002, gracias a las inversiones del Grupo Kwei Chou Moutai, se conformó la compañía Changli Moutai Wine que comenzó a producir vino con técnicas importadas de Burdeos, Francia. La compañía se formó en el distrito de Changli, en la provincia china de Hebei, conocido como “el hogar de la uva de vino en China” y también como “la ciudad del vino tinto seco de China”. El lugar se encuentra localizado a una latitud de 39º Norte, una región reconocida como una de las mejores zonas del mundo para el cultivo de la vid. Cuenta con condiciones climatológicas comparables a las de la región francesa de Burdeos, que justamente ha centrado su actividad económica en el sector vinícola. Por esta razón, dicho municipio se ha convertido en sede de las bodegas chinas más importantes, entre las que destacan Great Wall, Maotai y Dragon Seal. El presidente de la compañía Changli Moutai Wine, Zhong Huaili, nos explicó: “El insumo es más importante que la técnica para garantizar la buena calidad del vino. Tendremos tierras de más de 600 hectáreas, que ofrecen la mejor materia prima para cosechar el vino”.

Actualmente, su producción anual de vino excede las 10.000 toneladas, con activos fijos que han superado los 100 millones de yuanes. El presidente de la compañía Changli Moutai Wine, Zhong Huaili, nos manifestó: “Después de mantener un aumento anual de más del 25%, tenemos un volumen de ventas que ahora supera los cientos de millones de yuanes. Pero en comparación con otras marcas chinas de vino, nuestro volumen de ventas es muy pequeño, no pasa del 2% del mercado. También constatamos que la dimensión de este mercado es muy grande”. Con 1.865 millones de botellas de vino tinto consumidas en 2013, China se convirtió en el mayor consumidor de vino tinto del mundo, por delante de Francia, Italia, los Estados Unidos y Alemania.

A diferencia de antes, cuando el vino se consideraba una bebida de lujo porque los precios eran altos, la tendencia ahora viene determinada por una mayor popularización, acompañada de unos precios más reducidos. Conforme aumenta la calidad del vino nacional, se aceptan por más consumidores las marcas nacionales de vino, cuyos precios son diferentes según el nivel de productos.

Para diversificar sus productos, en abril de 2013, la compañía Changli Moutai Wine adquirió Chateau Loudenne SAS de Francia, una de las bodegas más antiguas del país europeo, con una superficie de 132 hectáreas. El presidente de la compañía Changli Moutai Wine, Zhong Huaili, nos dijo: “Producimos buenos vinos en el extranjero, que completan nuestra cadena industrial. Mientras tanto, el vino de Maotai va a cotizar en Bolsa en el futuro, propuesta que se ha incluido en el plan del Grupo Maotai”.

Además, la compañía Changli Moutai Wine vincula la producción de vino con el viaje y ocio de los turistas. En 2008, empezó a construir la bodega Moutai, también en el distrito de Changli. Hace seis años, abrió las puertas de la bodega Maotai en este distrito de la provincia de Hebei, que también es la primera instalación para el almacenamiento subterráneo de vino en China. La bodega inaugura una nueva forma de almacenamiento de vino en el país, asegurando una temperatura constante y evocando los elementos diferenciales del vino Moutai y de las bodegas de vino tradicionales. Todos estos esfuerzos responden a una concienzuda preparación para lograr una mayor venta y aceptación del vino entre más consumidores en el futuro.

Además, la provincia de Gansu de China, cuenta con ventajas naturales y condiciones industriales favorables para la industria del vino. Conforme a la orientación del desarrollo local, ha firmado acuerdos de cooperación con España en la industria de vino a través de colaboraciones sobre el mejoramiento del suelo, las técnicas de cultivo, y las vitivinícolas, así como la producción de vino. A pesar de las diferencias culturales entre la provincia de Gansu y España, ambas partes comparten el deseo de desarrollar la economía, para lo que es necesario ampliar aún más la cooperación bilateral. El comercio bilateral entre China y España en 2018 totalizó 34.010 millones de dólares y creció un 9,8 por ciento en comparación con el año anterior. Al terminar el ejercicio pasado, China era el décimo destino para las exportaciones y el tercero origen de las importaciones de España, según datos del Ministerio de Comercio de China.

Los consumidores también elogian el vino de América Latina. Por ejemplo, en 2017, China se convirtió en el primer destino de los vinos chilenos, reconocidos en el mundo por su variedad y su calidad. En 2018, el país sudamericano exportó 55,3 millones de cajas de este producto derivado de la uva, según datos de Vinos de Chile. China mantuvo a su vez el liderazgo entre los principales destinos de envíos del producto el año pasado, al alcanzar 8,1 millones de cajas, con valor de 254 millones de dólares. Desde que entró en vigencia el Tratado de Libre Comercio (TLC) con China en 2006, actualizado el pasado mes de marzo, las exportaciones de vino chileno al país asiático han crecido entre el 30 y el 50 por ciento al año.

Mucha gente ya ha tenido el concepto de “beber menor cantidad de vino, y preferir el vino de calidad más alta”. Por lo tanto, se observa que el crecimiento del valor de venta de vino es mayor que el del volumen de venta de vino en muchos mercado, sobre todo en Asia Pacífico y América Latina.

Estados Unidos, el mercado de vinos más grande del mundo, siguió creciendo modestamente, con un valor de mercado de 34.800 millones de dólares en 2017. Francia quedó en segundo lugar, con un valor de mercado de 16.700 millones de dólares. China siguió su lugar, con un valor de mercado de 16.500 millones de dólares.

Las perspectivas de Vinexpo/IWSR apuntan a que en cinco años China superará a Francia, como el segundo mercado de vinos más grande del mundo, detrás de Estados Unidos. Se espera que el mercado del vino de China sea valorado en 19.500 millones de dólares para entonces. En la actualidad, las personas están muy conectadas por Internet móvil, el 20 por ciento del consumo de vino de China se realiza a través de canales en línea. La comodidad de las compras en línea y los canales en línea están revolucionando la industria. Mientras tanto, los canales de venta directa que enfrentan los consumidores también se están desarrollando rápidamente.

Para 2022, los vinos finos (con un precio de entre 10 y 20 dólares) serán la fuerza impulsora del crecimiento de las ventas (el valor del mercado de vino aumentará hasta un 15 por ciento entre 2017 y 2022). China y los Estados Unidos son los dos mayores consumidores de vinos finos, y llevará a cabo la mayor contribución a esta ronda de crecimiento.

Tan Wen, de un banco de inversión, expresó su opinión: “En China, durante los últimos años, la economía de vino es próspera. Cada día hay más consumidores que conocen el vino y saben distinguir los precios exagerados de algunos vinos importados. El vino ya no se considera como un producto de alta categoría como antes, incluso algunos chinos elaboran vino sencillo en sus propias casas. El consumo del vino dejó de ser una muestra de estatus o de lujo y ahora está al alcance de muchos clientes chinos. Es mejor seguir esta corriente, tomar el camino de aproximarse a los consumidores, y cultivar la costumbre de beber una determinada marca de vino a sus consumidores, o sea, su mercado objetivo”.

Para satisfacer la demanda de vino, China amplía las plantaciones de uvas. Por ejemplo, la región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, famosa por la abundancia y calidad de sus uvas, planea establecer más bodegas y expandir las plantaciones de esta fruta. Según un plan sobre el desarrollo de la industria vinícola publicado recientemente por el gobierno regional, para 2025 Xinjiang tendrá más de 150 cavas, con lo que su producción anual llegará a los 300.000 kilolitros. Para la misma época, el sector de la elaboración de vinos tendrá un valor de producción de 10.000 millones de yuanes (1.450 millones de dólares), de acuerdo con el documento. Al mismo tiempo, el área de plantación de vides se ampliará de las actuales 32.966 hectáreas a 53.333.

Tradicionalmente, los habitantes locales consumen las uvas al natural, aunque las uvas pasas también constituyen un alimento común. Sin embargo, en los últimos años se han construido más bodegas para satisfacer la creciente demanda de los amantes de los vinos. En la actualidad, en la región hay alrededor de 100 de estas instalaciones. La administración regional también espera promover la integración de la cultura del vino con la industria turística, con el fin de aumentar los ingresos de la población local.