La iniciativa de la Franja y la Ruta, una oportunidad para Latinoamérica

El II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional se llevó a cabo en Beijing hasta el 27 del mes, el cual reunió a unos 5.000 participantes de más de 150 países y 90 organizaciones internacionales.

El discurso pronunciado este viernes por el presidente chino, Xi Jinping, en la inauguración del segundo Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional deja clara la determinación del país asiático de seguir fomentando la apertura y la integración mundial.

En el 17 de mayo de 2017, el presidente de China, Xi Jinping, destacó en su reunión con el presidente de Argentina, Mauricio Macri, que América Latina es una extensión natural de la Ruta de la Seda Marítima del siglo XXI. China está dispuesta a fortalecer la cooperación con América Latina, incluido la vinculación estratégica entre China y América Latina en el marco de la construcción de la Franja y la Ruta para promover el desarrollo común y crear una comunidad del destino de China y América Latina.

Jiang Shixue, vicepresidente de la Sociedad de América Latina de China, América Latina ha sido reconocida como una extensión natural de la Franja y la Ruta, que es favorable para mejorar la participación latinoamericana y promover las relaciones entre China y América Latina. Actualmente, China está experimentando una transformación económica y está comenzando una nueva ronda de apertura. América Latina también está experimentando una transformación de la reindustrialización. Tanto China como América Latina enfrentan oportunidades sin precedentes. También existen problemas en la estructura del comercio irracional. Las dos partes pueden usar la plataforma de la Franja y la Ruta para ajustar los métodos de cooperación y profundizar la cooperación económica y comercial. El diseño de la plataforma de la Franja y la Ruta refleja la apertura y la igualdad, y ha ganado el entusiasmo y el apoyo de la participación de los países de América Latina.

En realidad, la extensión de la Franja y la Ruta a América Latina es una tendencia. La Iniciativa de la Franja y la Ruta es una plataforma importante para que China promueva la globalización y construya una comunidad del destino humano. Es abierta e inclusiva. El gran avance de las relaciones entre China y América Latina en el siglo XXI ha sentado una buena base para que la Franja y la Ruta lidere la cooperación entre China y América Latina. A pesar de la distancia geográfica del transpacífico, la gran cantidad de intercambios económicos y comerciales entre las dos partes ha vinculado estrechamente a China y América Latina.

La iniciativa de la Franja y la Ruta es posible en América Latina, y las oportunidades también son obvias, debido a las necesidades de ambas partes. América Latina espera encontrar una opción además de los Estados Unidos. El desarrollo de China es una gran oportunidad para América Latina. La actitud positiva de América Latina hacia el modelo de desarrollo y la experiencia de China también es una ventaja importante para promover la Franja y la Ruta en América Latina. Al mismo tiempo, el desarrollo de China necesita un escenario más grande, y también debe incluir a la gran América Latina.

La iniciativa de la Franja y la Ruta tiene diferentes programas en diferentes países y regiones. Yue Yunxia, directora de la Oficina de Investigación Económica del Instituto Latinoamericano de la Academia China de Ciencias Sociales, cree que se puede vincular la Franja y la Ruta y la cooperación en materia de capacidad entre China y América Latina. En lo que respecta a América Latina, creemos que es un punto de partida y una salida para resolver las dificultades estructurales actuales. La cooperación en materia de capacidad y la económica entre China y América Latina y comercial han progresado muy rápidamente en las últimas dos décadas. Lo hemos resumido como un avance, pero también hay problemas como la estructura comercial, la ruta de desarrollo, el suministro de infraestructura y el grado de integración insuficiente. Todavía hay espacio para la cooperación de capacidad entre China y América Latina en la exportación de industrias intensivas en tecnología. El gran mercado en América Latina es una integración fragmentada. El acuerdo bilateral tradicional no puede resolver el problema actual. La iniciativa de la Franja y la Ruta es una exportación a la cuestión latinoamericana. Puede lograr posibles avances a través del comercio y la conectividad de las instalaciones.

Además, la Franja y la Ruta en realidad ofrece una idea de beneficio mutuo, en la que se mencionan los productos públicos, lo cual es de gran importancia para resolver los problemas conceptuales de China y América Latina. La Franja y la Ruta proporciona un camino de cooperación entre China y América Latina, y es una plataforma para resolver problemas.

El II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional es una oportunidad para que América Latina y el Caribe propongan a China los temas en los que les interesa desarrollar la cooperación, entre ellos, la conectividad digital, señalaron expertos ecuatorianos. El Foro es propicio para que la región defina una hoja de ruta con China dentro de la iniciativa de la Franja y la Ruta, lanzada en 2013. La Franja y la Ruta "marca un nuevo momento en las relaciones y un interés de China de expandir las relaciones más allá del comercio. Esto tiene que ver con financiamiento e infraestructura, pero infraestructura no solo en territorio, sino en lo que han llamado la ruta digital que es muy importante para el comercio global hoy en día. Definitivamente el foro servirá para profundizar en una estrategia común de cooperación. Pero también todo va a depender de qué es lo que le interesa a Latinoamérica y qué es lo que propone, porque ese es el desafío. Ahora está en la mesa de Latinoamérica hacer propuestas más amplias, que vayan más allá, por ejemplo, del comercio.

Hasta ahora, muchas de las relaciones con China están marcadas por relaciones bilaterales por lo que el foro es el marco ideal para lograr una mayor participación en la iniciativa en infraestructura y en la ruta digital que promueve China. Latinoamérica tiene muchos desafíos al intentar insertarse en este panorama de la Ruta de manera marítima y terrestre. Hay un tema interesante de fortalecer la ruta digital pensando en el comercio digital. La visión de China de considerar a América Latina como una extensión natural de la Ruta Marítima de la Seda del siglo XXI y esta iniciativa es una oportunidad que Latinoamérica, no puede dejar escapar. Las relaciones materializadas a partir de la iniciativa de la Franja y la Ruta no están diseñadas para un solo grupo de países con proyectos políticos definidos, de una sola línea política, sino que acoge a una serie de países con diferentes proyectos políticos.

La iniciativa de la Franja y la Ruta tiene como objetivo construir una red de comercio, inversión e infraestructura para conectar a Asia con Europa y África a lo largo de antiguas rutas comerciales. Unos 125 países y 29 organizaciones internacionales han firmado acuerdos de cooperación con China en relación con la iniciativa de la Franja y la Ruta. De la región latinoamericana y caribeña, varios países apostaron por adherirse a la iniciativa, entre ellos Bolivia, Ecuador, Uruguay, Venezuela, Chile, Costa Rica, Antigua y Barbuda, Guyana y Surinam, Perú.

Perú se convirtió el pasado sábado en el 19º país de América Latina y el Caribe en firmar con China el memorando de entendimiento sobre la iniciativa de la Franja y la Ruta. La signatura tuvo lugar en el II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, que se clausuró el sábado en Beijing, y fue uno de los 283 resultados conseguidos durante la preparación y celebración del evento. El ministro de Comercio Exterior y Turismo peruano, Edgar Vásquez, que estuvo en el acto, calificó de momento histórico la rúbrica del memorando, destinado a impulsar conjuntamente la construcción de la Franja y la Ruta. Desarrollo sostenible, conectividad y beneficio recíproco se han convertido en términos utilizados con frecuencia por los líderes de los países de América Latina y el Caribe y de organizaciones internacionales, y también por expertos de esa región, a la hora de hablar sobre la iniciativa.

Perú es el segundo mayor destino de inversión china en América Latina, con un monto que alcanza los 18.400 millones de dólares invertidos principalmente en los sectores de minería y energía. Las relaciones entre China y Perú se han repotenciado con la firma de un memorando de entendimiento sobre la construcción conjunta de la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Más de 170 compañías chinas han invertido hasta el momento capitales y tienen operaciones en Perú, lo que evidencia que el número de compañías se ha incrementado casi siete veces en el país sudamericano tras la vigencia del TLC. Desde 2014, China se ha posicionado de forma consecutiva como el principal socio comercial de Perú. El año pasado, el intercambio comercial bilateral fue de 23.100 millones de dólares.

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, que efectuó una visita de Estado a China del 24 al 28 de abril, destacó los logros tangibles de la iniciativa y su impulso al crecimiento y al desarrollo de los países y al bienestar de los pueblos de América Latina y el Caribe. Una de las grandes ventajas de la Franja y la Ruta es que trabaja sobre áreas muy específicas y proyectos muy concretos, y en solo cinco años ha tenido frutos muy fecundos. El mandatario reiteró su firme defensa del libre comercio y el multilateralismo y consideró que la iniciativa es una oportunidad para que todos nosotros podamos fortalecer nuestro compromiso y practicar ese compromiso con la colaboración, el multilateralismo y el libre comercio. Mario Cimoli, secretario ejecutivo adjunto de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), consideró que la Franja y la Ruta supone mayor integración, mayor diálogo y multilateralismo y hace bien a América Latina.

La conectividad, un objetivo primario de la iniciativa de la Franja y la Ruta, también fue valorada por varios expertos latinoamericanos que aludieron a su papel positivo en favorecer el desarrollo conjunto de sus países. La iniciativa es un ejemplo de cómo ampliar la conectividad entre América Latina y China con una visión profunda y el apoyo del país asiático a la región. Varios países de América Latina y el Caribe que están participando en la construcción conjunta de la Franja y la Ruta han cosechado ya los frutos. Argentina y China, entre tanto, construyen infraestructuras energéticas y ferroviarias en distintos puntos del país sudamericano con resultados como abaratamiento de costos de logística, generación de energías limpias. Hasta abril de este año, Chile, Brasil, Argentina y Panamá han establecido un mecanismo bilateral de cooperación en comercio electrónico con China, según informó el Ministerio de Comercio chino. La deficiente infraestructura en muchos países, tal como rutas, puertos, vías férreas o energía, se ha convertido en un limitante importante al momento de desarrollarse económicamente a través de la inversión, la producción y el comercio.

El II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional se llevó a cabo en Beijing hasta el 27 del mes, el cual reunió a unos 5.000 participantes de más de 150 países y 90 organizaciones internacionales.

El discurso pronunciado este viernes por el presidente chino, Xi Jinping, en la inauguración del segundo Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional deja clara la determinación del país asiático de seguir fomentando la apertura y la integración mundial.

En el 17 de mayo de 2017, el presidente de China, Xi Jinping, destacó en su reunión con el presidente de Argentina, Mauricio Macri, que América Latina es una extensión natural de la Ruta de la Seda Marítima del siglo XXI. China está dispuesta a fortalecer la cooperación con América Latina, incluido la vinculación estratégica entre China y América Latina en el marco de la construcción de la Franja y la Ruta para promover el desarrollo común y crear una comunidad del destino de China y América Latina.

Jiang Shixue, vicepresidente de la Sociedad de América Latina de China, América Latina ha sido reconocida como una extensión natural de la Franja y la Ruta, que es favorable para mejorar la participación latinoamericana y promover las relaciones entre China y América Latina. Actualmente, China está experimentando una transformación económica y está comenzando una nueva ronda de apertura. América Latina también está experimentando una transformación de la reindustrialización. Tanto China como América Latina enfrentan oportunidades sin precedentes. También existen problemas en la estructura del comercio irracional. Las dos partes pueden usar la plataforma de la Franja y la Ruta para ajustar los métodos de cooperación y profundizar la cooperación económica y comercial. El diseño de la plataforma de la Franja y la Ruta refleja la apertura y la igualdad, y ha ganado el entusiasmo y el apoyo de la participación de los países de América Latina.

En realidad, la extensión de la Franja y la Ruta a América Latina es una tendencia. La Iniciativa de la Franja y la Ruta es una plataforma importante para que China promueva la globalización y construya una comunidad del destino humano. Es abierta e inclusiva. El gran avance de las relaciones entre China y América Latina en el siglo XXI ha sentado una buena base para que la Franja y la Ruta lidere la cooperación entre China y América Latina. A pesar de la distancia geográfica del transpacífico, la gran cantidad de intercambios económicos y comerciales entre las dos partes ha vinculado estrechamente a China y América Latina.

La iniciativa de la Franja y la Ruta es posible en América Latina, y las oportunidades también son obvias, debido a las necesidades de ambas partes. América Latina espera encontrar una opción además de los Estados Unidos. El desarrollo de China es una gran oportunidad para América Latina. La actitud positiva de América Latina hacia el modelo de desarrollo y la experiencia de China también es una ventaja importante para promover la Franja y la Ruta en América Latina. Al mismo tiempo, el desarrollo de China necesita un escenario más grande, y también debe incluir a la gran América Latina.

La iniciativa de la Franja y la Ruta tiene diferentes programas en diferentes países y regiones. Yue Yunxia, directora de la Oficina de Investigación Económica del Instituto Latinoamericano de la Academia China de Ciencias Sociales, cree que se puede vincular la Franja y la Ruta y la cooperación en materia de capacidad entre China y América Latina. En lo que respecta a América Latina, creemos que es un punto de partida y una salida para resolver las dificultades estructurales actuales. La cooperación en materia de capacidad y la económica entre China y América Latina y comercial han progresado muy rápidamente en las últimas dos décadas. Lo hemos resumido como un avance, pero también hay problemas como la estructura comercial, la ruta de desarrollo, el suministro de infraestructura y el grado de integración insuficiente. Todavía hay espacio para la cooperación de capacidad entre China y América Latina en la exportación de industrias intensivas en tecnología. El gran mercado en América Latina es una integración fragmentada. El acuerdo bilateral tradicional no puede resolver el problema actual. La iniciativa de la Franja y la Ruta es una exportación a la cuestión latinoamericana. Puede lograr posibles avances a través del comercio y la conectividad de las instalaciones.