Embajador de México en China: seguiremos beneficiando cada vez más de la apertura

2018-11-12 17:29:30
Share
Share this with Close
Messenger Messenger Pinterest LinkedIn WeChat

Con motivo de la celebración de la XIII cumbre del Grupo de los Veinte (G20) que se sostendrá entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre en Buenos Aires, la capital de Argentina, Radio Internacional de China (CRI) hace la entrevista exclusiva con el embajador de México en China, José Luis Bernal Rodríguez.

CRI: ¿Cuáles son sus perspectivas sobre la cumbre del G20 en 2018?

Embajador: Ha sido muy importante el que el G20 haya ampliado su agenda, el que el G20 incorpore a economías de diferentes niveles de desarrollo, todas grandes economías pero con diferentes perspectivas respecto al crecimiento y el comercio internacional. México estará participando en esta cumbre, prácticamente en el último día del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto y el primer día del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, de manera que estaremos exactamente en los días de la transición. Por eso, no impide que no le demos la importancia debida a la agenda. La agenda que nos propuso el gobierno de Argentina, es una agenda muy importante, porque incluye aspectos que tienen que ver con refrendar el compromiso con el libre comercio a nivel internacional, estas tendencias en contra de la globalización preocupan a muchos países, a muchas personas, a muchos sectores. Tenemos que hacer un compromiso los países del G20, de cómo nos podemos seguir beneficiando cada vez más de la apertura. Esta el tema de la infraestructura, la infraestructura básica para que demos pasos adelante, sobre todo las economías en donde estamos aún en un proceso de desarrollo. Hay economías emergentes, hay economías más atrasadas que otras, tenemos que dar pasos importantes las economías más grandes, para seguir fomentando la creación de infraestructura. Está el tema de tecnología e innovación, tenemos que hacer también que la innovación, sobre todo la economía digital, no se concentre ni en pocas empresas, ni en pocos países, sino que sus beneficios no sean solo la conectividad a través de los aparatos terminales, celular, o televisión Internet; sino que en la producción de estos artículos de consumo diario, participemos cada vez más países. Tiene que haber mejores encadenamientos productivos, tiene que haber más colaboración para abrir los procesos y para aumentar las inversiones. Y, al final, la idea es que en el G20 podamos seguir impulsando una agenda que no es ni solamente económica, ni solamente de grandes países, debe ser una agenda incluyente, una agenda que abarque más sectores, y que llegue con beneficios a más personas.

América Latina, como extensión natural de la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI, ya está recibiendo beneficios de la expansión de los flujos de inversiones y de comercio con China en la región, apuntó el experto, titular de la consultora Diagnóstico Político. Esto se observa con mayor claridad en algunos países de la costa del Pacífico, como Chile y Perú. Según datos de las aduanas chinas, China y América Latina y el Caribe registraron volúmenes comerciales de unos 260.000 millones de dólares en 2017, un ascenso interanual del 18,8 por ciento. De acuerdo con el informe más reciente del BID, “Monitor de Comercio e Integración 2018”, las compras de China a América Latina aumentaron 24,1 por ciento en 2017. Se trata de una cifra importante que supera los porcentajes de aumento de compras a la región desde Estados Unidos (7,1 por ciento) o la Unión Europea (UE, 11,8 por ciento).

América Latina recibirá la XIII Cumbre de Líderes del G20 entre consensos de apoyo al multilateralismo y la relevancia de China en el actual contexto, de acuerdo con varios expertos de la región. La capital de Argentina, Buenos Aires, acogerá del 30 de noviembre al 1 de diciembre a líderes del G20, mecanismo que constituye el “epítome de la globalización”. La labor del G20 puede generar puentes para encontrar consensos que permitan avanzar en la negociación de temas cruciales de la agenda internacional. A su vez, para el investigador y director de la carrera de economía de la Universidad Panamericana en México, Gabriel Pérez del Peral, el G20 es la congregación de naciones más integrada de la globalización, donde el comercio internacional es clave. Dijo que en el evento en Buenos Aires podría haber coincidencias entre los países por incentivar las inversiones internacionales en infraestructura, uno de los temas centrales de la reunión, junto con el futuro del trabajo y el futuro alimentario sostenible.

Esta es la primera ocasión que la Cumbre de Líderes se realiza en América del Sur, pero no en la región, luego de que en 2012, México organizó el evento en el balneario de Los Cabos, en Baja California Sur (noroeste). Además de Argentina y México, está integrado en el G20 Brasil, la mayor economía de la región, como el tercer representante latinoamericano en el bloque. Para la economista de la Fundación Getúlio Vargas (FGV) y del Instituto de Estudios Brasil-China (Ibrach), Lia Valls, la cumbre en Buenos Aires servirá para reafirmar la importancia del multilateralismo y evaluar nuevas formas para crear instituciones más inclusivas dentro de este sistema. El G20 se originó en 1999, cuando el G7, que agrupa a las siete naciones más industrializadas, demostró ser insuficiente para dar respuesta a la aguda crisis financiera de fines de esa década. Es importante que el G20 recuerde la importancia de la agenda multilateral y que tenga un mensaje de contención principalmente en el área de política comercial externa, mostrando que el proteccionismo es una amenaza nuevamente al sistema multilateral.

Según la profesora del Ibrach, Anna Jaguaribe, la reunión es buena para lograr arreglos entre los países. Para que se den cuenta de que estamos en un momento de crisis y que hay que buscar mecanismos de cooperación, los caminos del multilateralismo tienen que ser restablecidos. El G20 fue una institución creada para hacer frente a una crisis de representación que todavía existe en casi todos los instrumentos multilaterales. La coyuntura actual representa un buen momento para crear aberturas en el sistema tradicional y reorientar a las instituciones en dirección a lo que puede ser una mejor inserción de las economías emergentes en la economía global. Sobre el papel que juega China en el multilateralismo, el presidente del Centro Brasileño de Relaciones Internacionales (Cebri), José Pio Borges, comentó que el país asiático es hoy un miembro fundamental para el mantenimiento de los organismos multilaterales, especialmente la Organización Mundial del Comercio (OMC), que están amenazados por estas actitudes y desafíos del proteccionismo. Por su parte, el representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Argentina, Paolo Giordano, comentó que el acercamiento de los últimos años entre China y América Latina genera un desafío de importante interpretación para la región, que puede deparar en múltiples oportunidades de desarrollo. Giordano destacó en ese sentido, la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China y su apertura del mercado de consumo interno, como dos elementos conducentes a potenciar los actuales nexos, y que América Latina obtenga una visión regional y no individual de desarrollo. Agregó: “Me parece que visto desde América Latina, esta Iniciativa es importante no sólo en sí misma, que ya lo es, sino que también plantea la necesidad de dar una visión regional al desarrollo de la infraestructura”.

En tanto, en opinión del director del Instituto de Planeamiento Estratégico (IPE) de Argentina, Jorge Castro, la cooperación entre China y América Latina es un proceso en el que todos ganan. Resaltó que la próxima visita del presidente de China, Xi Jinping, a la región, la cuarta desde 2013 como mandatario chino, es de enorme importancia por el papel del país asiático en el sistema mundial. Patricio Giusto también consideró que las relaciones entre China y América Latina son estratégicas y están en plena expansión a partir de ideas rectoras que sirven para apuntalar el vínculo, como la Iniciativa de la Franja y la Ruta.

Como la Cumbre de Buenos Aires del Grupo de los 20 (G20) está a la vuelta de la esquina, expertos en comercio han pedido esfuerzos conjuntos de las principales economías para apoyar y salvaguardar el comercio multilateral en respuesta a los mayores desafíos provocados por el proteccionismo y el unilateralismo. La reunión de este año, con el tema “Construyendo Consensos para el Desarrollo Equilibrado y Sostenible”. Entre una amplia variedad de temas en la mesa para la reunión de los líderes del G20, la decimotercera desde que la primera se llevó a cabo en 2008 en respuesta a la crisis financiera global, el comercio global estará bajo los reflectores. Zhang Yuyan, director del Instituto de Economía y Política Mundiales de la Academia de Ciencias Sociales de China, dijo: “El mundo espera que los miembros del G20 puedan mantenerse cohesionados y proactivos, sostener un diálogo abierto, a profundidad y constructivo, e inyectar nuevo impulso al crecimiento económico y comercial global”.

La cumbre tiene lugar en un contexto de globalización que sufre reveses y de multilateralismo bajo asalto. La Organización Mundial del Comercio (OMC) dijo el lunes que el crecimiento del comercio global podría desacelerarse más en el cuarto trimestre de este año pues su índice de pedidos de exportación se acerca a su punto más débil registrado en 2012 y los índices para automóviles, componentes electrónicos y materias primas agrícolas se han colocado por debajo de la tendencia. La organización internacional con sede en Ginebra advirtió que la tensión entre los principales socios comerciales amenaza cada vez más al crecimiento económico. Debido a la situación sombría, se han incrementado los llamados para actuar. Ruan Zongze, vicepresidente ejecutivo del Instituto de Estudios Internacionales de China, señaló: “Los miembros del G20, que representan 86 por ciento del PIB (producto interno bruto) global y 80 por ciento del volumen comercial agregado, deben continuar ampliando la cooperación económica internacional y mejorar la coordinación macropolítica”.

En un artículo firmado publicado en el periódico “Financial Times”, el ministro adjunto de Relaciones Exteriores de China Zhang Jun reafirmó la convicción de China de salvaguarda del libre comercio y de compartición de la prosperidad común con el mundo, y pidió hacer esfuerzos para oponerse al proteccionismo en todas sus formas, salvaguardar el sistema de comercio multilateral basado en normas, y permitir que el beneficio del comercio sea compartido más ampliamente. China ha enviado una clara señal de oposición al proteccionismo y de apoyo al sistema de comercio multilateral, lo cual facilitará una economía mundial abierta.

Desde su ingreso a la OMC en 2001, China ha sido un firme apoyo y defensor de las normas del comercio multilateral, y ha tomado medidas continuas para reducir aranceles, abrir sectores nacionales y expandir la cooperación con otras economías. La Iniciativa de la Franja y la Ruta fue propuesta para lograr el desarrollo mutuo y se llevó a cabo una histórica exposición de importaciones para permitir al mundo aprovechar las oportunidades del enorme mercado de rápido crecimiento de China. Frente al proteccionismo y al unilateralismo, la OMC también necesita hacer ajustes para garantizar que sus normas estén a la altura de los tiempos. China defiende las reformas necesarias en la OMC para darle más autoridad y hacerla más efectiva, declaró el viceministro chino de Comercio Wang Shouwen. Como integrantes de la OMC, las economías del G20 tienen la habilidad y la responsabilidad de discutir problemas en el comercio global y encontrar soluciones.


Con motivo de la celebración de la XIII cumbre del Grupo de los Veinte (G20) que se sostendrá entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre en Buenos Aires, la capital de Argentina, Radio Internacional de China (CRI) hace la entrevista exclusiva con el embajador de México en China, José Luis Bernal Rodríguez.

CRI: ¿Cuáles son sus perspectivas sobre la cumbre del G20 en 2018?

Embajador: Ha sido muy importante el que el G20 haya ampliado su agenda, el que el G20 incorpore a economías de diferentes niveles de desarrollo, todas grandes economías pero con diferentes perspectivas respecto al crecimiento y el comercio internacional. México estará participando en esta cumbre, prácticamente en el último día del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto y el primer día del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, de manera que estaremos exactamente en los días de la transición. Por eso, no impide que no le demos la importancia debida a la agenda. La agenda que nos propuso el gobierno de Argentina, es una agenda muy importante, porque incluye aspectos que tienen que ver con refrendar el compromiso con el libre comercio a nivel internacional, estas tendencias en contra de la globalización preocupan a muchos países, a muchas personas, a muchos sectores. Tenemos que hacer un compromiso los países del G20, de cómo nos podemos seguir beneficiando cada vez más de la apertura. Esta el tema de la infraestructura, la infraestructura básica para que demos pasos adelante, sobre todo las economías en donde estamos aún en un proceso de desarrollo. Hay economías emergentes, hay economías más atrasadas que otras, tenemos que dar pasos importantes las economías más grandes, para seguir fomentando la creación de infraestructura. Está el tema de tecnología e innovación, tenemos que hacer también que la innovación, sobre todo la economía digital, no se concentre ni en pocas empresas, ni en pocos países, sino que sus beneficios no sean solo la conectividad a través de los aparatos terminales, celular, o televisión Internet; sino que en la producción de estos artículos de consumo diario, participemos cada vez más países. Tiene que haber mejores encadenamientos productivos, tiene que haber más colaboración para abrir los procesos y para aumentar las inversiones. Y, al final, la idea es que en el G20 podamos seguir impulsando una agenda que no es ni solamente económica, ni solamente de grandes países, debe ser una agenda incluyente, una agenda que abarque más sectores, y que llegue con beneficios a más personas.

América Latina, como extensión natural de la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI, ya está recibiendo beneficios de la expansión de los flujos de inversiones y de comercio con China en la región, apuntó el experto, titular de la consultora Diagnóstico Político. Esto se observa con mayor claridad en algunos países de la costa del Pacífico, como Chile y Perú. Según datos de las aduanas chinas, China y América Latina y el Caribe registraron volúmenes comerciales de unos 260.000 millones de dólares en 2017, un ascenso interanual del 18,8 por ciento. De acuerdo con el informe más reciente del BID, “Monitor de Comercio e Integración 2018”, las compras de China a América Latina aumentaron 24,1 por ciento en 2017. Se trata de una cifra importante que supera los porcentajes de aumento de compras a la región desde Estados Unidos (7,1 por ciento) o la Unión Europea (UE, 11,8 por ciento).

Informaciones relacionadas

Share

Los más leídos