¿Es tan atractivo el invierno de Jinan como describe Lao She?
Para un hombre como yo, que solía vivir en Beiping (como se le solía llamar anteriormente a Beijing), sería un milagro si en invierno no hubiera viento pero en Jinan (otra ciudad del norte de China), sí que no hay viento en invierno. Para un hombre como yo, que acaba de regresar de Londres, sería extraño ver el sol en invierno durante el día pero el invierno en Jinan es soleado. Naturalmente, el sol siempre es fuerte en las zonas trópicas y ese clima fuerte es un poco aterrador. Jinan es considerada como un lugar tesoro por ser una ciudad del norte de China y tener un clima suave y soleado en invierno.
Que solo haya sol, no es sorprendente. Pero por favor, cierra los ojos e imagina: una ciudad vieja, rodeada por las montañas y el agua, tomando el sol bajo el cielo, durmiendo confortablemente mientras brilla el sol, a la espera de la llegada de la primavera para despertarse, ¿este no es un mundo ideal?
Toda la ciudad está rodeada de colinas y este anillo de colinas es especialmente agradable en invierno porque parece ser una cuna en donde se tumba la ciudad de Jinan y susurra en voz baja y suave: "tranquila, aquí sin duda es templado". ¿Sabes? la gente de Jinan siempre lleva una sonrisa en invierno. Cada vez que ve las colinas, se tranquiliza porque sabe que tendrá amparo del frío. Y cuando mira desde el cielo a las colinas, recuerda al instante que mañana puede que llegue la primavera, ¿verdad? Con esta temperatura, la hierba en las montañas podría verdear esta noche, ¿verdad? Esta ilusión no se puede lograr en un abrir y cerrar de ojos pero tampoco hay prisa; teniendo un invierno tan prometedor, ¿para qué queremos algo más?
Lo mejor de todo es cuando cae algo de nieve. Mira, los pinos en las colinas se vuelven cada vez más oscuros y la parte superior del árbol está cubierta de flores blancas como una enfermara japonesa. Todo el pico blanqueado, pintando un ribete de color plata en el cielo celeste. En las laderas, hay lugares donde se cubren de nieves gruesas pero en otros lugares, se ve el color del césped. De esta manera, una banda blanca con otra banda amarilla oscura, parece poner un abrigo de ondas de agua a la montaña. Mirando y mirando, este abrigo parece ser movido por el viento, por lo que deseas ver la piel hermosa de la montaña. Cuando se acerca la puesta del sol, la luz amarillenta brilla oblicuamente en la ladera de la montaña, la fina nieve aparece tímida repentinamente y así, se adivina algo del color rosado. Solo puede neviscar, ya que Jinan, con esas colinas demasiado delicadas, no soporta las nevadas fuertes.
La antigua Jinan, cuya ciudad es tan estrecha y cuyo alrededor es tan espacioso. El pueblo se encuentra en la ladera y sobre el techo de las pequeñas casas del pueblo, cae algo de nieve. Sí, es como una pintura tradicional de tinta china, la que quizás termine de realizar un famoso pintor de la dinastía Tang.
En cuanto al agua, no solo no se congela, sino que también hierve en las algas verdes. Las algas son realmente verdes, tanto que parecen haber sido pintadas con el verde que ahorraron durante todo el año. Cuanto más sereno es el clima, más verdes serán las algas. Con este espíritu verde, el agua ya no tiene corazón para congelarse. Además, los sauces llorones de largas ramas todavía quieren ver su reflejo en el agua. Miras, lentamente, desde el río claro hacia arriba, miras el aire, miras el cielo… Se ven tan claros de arriba abajo y tan azules como un cristal celeste. En este cristal están envueltos los techos rojos y las montañas de hierbas amarillas, como sombras de árboles grises de una alfombra. Este es el invierno de Jinan.
Lo anterior es el texto completo de "El invierno de Jinan", un ensayo creado por Lao She, un famoso escritor, dramaturgo y novelista moderno chino. Lo publicó por primera vez en abril de 1931. Desde entonces, ha sido citado durante mucho tiempo en los materiales didácticos de chino. Lao She (del 3 de febrero de 1899 al 24 de agosto 1966), anteriormente conocido como Shu Qingchun, novelista, escritor, maestro del lenguaje y artista del pueblo moderno de China, es el primer escritor en ganar el título de "Artista del Pueblo" de la nueva China. Aproximadamente en 1930, Lao llegó a Shandong donde estuvo enseñando durante siete años en la Universidad Qilu de Jinan y la Universidad de Qingdao. Siempre sintió un afecto profundo por Shandong tanto que la reconoce como su segunda ciudad natal. Después de seis años de estancia en Reino Unido, la niebla dejó una profunda huella en Lao She, por lo que decidió irse a Jinan, la capital conocida como la "la ciudad de los manantiales". Lao She comprendió perfectamente esta característica de "templado y soleado" del invierno de Jinan y describió al paisaje invernal como único y atractivo.
Jinan, ubicada en la parte central y occidental de la península de Shandong, es la capital, el centro político, cultural, educativo, económico, de transporte y tecnología de la provincia. Jinan cuenta con setenta y dos manantiales. Debido a la gran cantidad de manantiales de la ciudad, es conocida como la " ciudad de los manantiales".
Jinan tiene una larga historia y es la cuna de la civilización prehistórica de la "Cultura de Longshan." En Jinan están las ruinas de Chengziya, que se remontan a la era neolítica, la Gran Muralla de la Dinastía Qi, que fue construida muchos años antes de la Gran Muralla de Qin (una de las siete maravillas del mundo). Hay un poema satírico "Dadong" en el Libro de los Cantares, la primera colección de poemas chinos, que es el registro más antiguo documentado de Jinan. En diciembre de 1986, Jinan fue declarada ciudad histórica y cultural nacional por el Consejo de Estado.
Las famosas atracciones de Jinan son el Lago Daming, la Montaña de Mil Budas, el Parque de Manantial Baotu y el Parque del Manantial del Tigre Negro, la Plaza de la ciudad de Manantiales, entre otras.
Para un hombre como yo, que solía vivir en Beiping (como se le solía llamar anteriormente a Beijing), sería un milagro si en invierno no hubiera viento pero en Jinan (otra ciudad del norte de China), sí que no hay viento en invierno. Para un hombre como yo, que acaba de regresar de Londres, sería extraño ver el sol en invierno durante el día pero el invierno en Jinan es soleado. Naturalmente, el sol siempre es fuerte en las zonas trópicas y ese clima fuerte es un poco aterrador. Jinan es considerada como un lugar tesoro por ser una ciudad del norte de China y tener un clima suave y soleado en invierno.
Que solo haya sol, no es sorprendente. Pero por favor, cierra los ojos e imagina: una ciudad vieja, rodeada por las montañas y el agua, tomando el sol bajo el cielo, durmiendo confortablemente mientras brilla el sol, a la espera de la llegada de la primavera para despertarse, ¿este no es un mundo ideal?
Toda la ciudad está rodeada de colinas y este anillo de colinas es especialmente agradable en invierno porque parece ser una cuna en donde se tumba la ciudad de Jinan y susurra en voz baja y suave: "tranquila, aquí sin duda es templado". ¿Sabes? la gente de Jinan siempre lleva una sonrisa en invierno. Cada vez que ve las colinas, se tranquiliza porque sabe que tendrá amparo del frío. Y cuando mira desde el cielo a las colinas, recuerda al instante que mañana puede que llegue la primavera, ¿verdad? Con esta temperatura, la hierba en las montañas podría verdear esta noche, ¿verdad? Esta ilusión no se puede lograr en un abrir y cerrar de ojos pero tampoco hay prisa; teniendo un invierno tan prometedor, ¿para qué queremos algo más?
Lo mejor de todo es cuando cae algo de nieve. Mira, los pinos en las colinas se vuelven cada vez más oscuros y la parte superior del árbol está cubierta de flores blancas como una enfermara japonesa. Todo el pico blanqueado, pintando un ribete de color plata en el cielo celeste. En las laderas, hay lugares donde se cubren de nieves gruesas pero en otros lugares, se ve el color del césped. De esta manera, una banda blanca con otra banda amarilla oscura, parece poner un abrigo de ondas de agua a la montaña. Mirando y mirando, este abrigo parece ser movido por el viento, por lo que deseas ver la piel hermosa de la montaña. Cuando se acerca la puesta del sol, la luz amarillenta brilla oblicuamente en la ladera de la montaña, la fina nieve aparece tímida repentinamente y así, se adivina algo del color rosado. Solo puede neviscar, ya que Jinan, con esas colinas demasiado delicadas, no soporta las nevadas fuertes.