Dos palillos que funcionan mágicamente

Algunos dicen que sentarse a la mesa en una fiesta china y no saber cómo usar los palillos es como encontrarse en un campo de batalla. Esto no es exageración, especialmente para quienes gustan de la comida china.

El problema para muchas personas es que, al no estar familiarizados con los palillos, no saben cómo usarlos de manera correcta en presencia de chinos nativos. Así que vamos a ver cómo se puede dominar el arte de usar los dos palillos.

Es bueno saber que los modales comienzan en cuanto los dedos tocan los palillos. En el caso de que la mesa esté llena de platos y usted no está seguro de qué comer, lo mejor es sólo probar el plato más cercano a usted, en vez de jugar con los palillos y vacilar, ya que esto se considera descortés.

Ya cuando se están usando los palillos, no se debe sumergirlos en los platos y explorar dentro, ya que este comportamiento causa muy mala impresión al resto de los comensales.

Como a muchas personas, a los chinos les gusta charlar durante las comidas, y es muy común que los tratos de negocios se cierren durante una cena. En tales situaciones, especialmente en ocasiones formales, es importante no apuntar a otros con los palillos, ya que es igual a señalar con el dedo.

Durante la comida, trate de no pegar los palillos en posición vertical en el plato o tazón de arroz, ya que hacerlo es similar a la colocación de las varas de incienso para los muertos, y puede resultar bastante ofensivo.

Finalmente, al terminar de comer, los palillos se deben poner a un lado y no justo enfrente de usted.

Usar los palillos con delicadeza no es tan fácil, se requiere practicar a lo largo de los años. Es por eso que tales maneras son consideradas por muchos en China como una muestra de la educación de las personas.

Parece que hemos mencionado suficientes reglas por el momento. Pronto hablaremos un poco más sobre sus connotaciones

En la dinastía Shang (alrededor de 1600-1100 a.C.), el Emperador usaba palillos hechos de marfil. Estos palillos eran un símbolo de riqueza y honor. Más tarde los palillos estaban hechos de oro y plata, que eran populares entre las personas de clase alta.

La gente común entonces utilizaba palillos hechos del bambú o de la madera, pues eran baratos y fáciles de utilizar. Y la gente hoy prefiere esos palillos.

Aparte del uso diario, los palillos se dan a veces como regalos.

Como los palillos vienen en parejas, son muy buen regalo para una pareja recién casada para desearles felicidad. También se pueden enviar a amigos y maestros, ya que los palillos son largos, lo que significa una larga y duradera amistad. Incluso se pueden regalar a socios de negocios para indicar que son como dos palillos trabajando en equipo y compartiendo una sociedad de largo tiempo.

A algunas personas les gusta coleccionar palillos decorados con inscripciones, poemas, dibujos o mosaicos. En Shanghai, incluso se puede encontrar un museo de palillos que va más allá de lo imaginable.

El fundador de este museo, Lan Xiang, ha sido un coleccionista dedicado durante 30 años. Con su ayuda, la Comisión de Promoción de la Cultura de los Palillos de Shanghai está planeando solicitar que los palillos sean añadidos a la lista de patrimonio cultural municipal.

"Es importante para nosotros redescubrir el valor cultural de los palillos", dice Cai Fengming, subsecretario de la Academia de Ciencias Sociales de Shanghai, Centro de Investigación de la Cultura de Asia Oriental.

Según Cai, los palillos, que se utilizan en todo el este de Asia, también son un vínculo entre las culturas de los países de esta región.