La simetría en la cultura china
Desde los tiempos antiguos, los chinos no han dejado de aspirar a la belleza simétrica. En muchas quintaesencias culturales de China se nota la aplicación de este elemento. Tanto la arquitectura, la pintura y la poesía, como la porcelana, el dístico y la caligrafía, cuidan mucho la estructura simétrica, lo que refleja la filosofía china del equilibrio entre Yin y Yang.
La simetría es originaria de la naturaleza y constituye un rasgo frecuente del universo. Su hermosura proviene de los instintos naturales de la visión del ser humano. El respeto que guardan los chinos hacia la naturaleza se encarna en la aplicación generalizada de la simetría.
Es sabido por todos que, a lo largo de miles de años, los chinos han persistido en conservar el eje en el diseño arquitectónico.
Desde palacios y salones imperiales hasta edificios civiles; desde la planificación general hasta la distribución de un cuarto; desde quioscos y pabellones hasta galerías y terrazas; se puede contemplar la simetría china en prácticamente todos los casos. Este tipo de simetría arquitectónica deja una percepción visual de orden y solemnidad, lo cual, en algún sentido, ha sido testigo del espíritu racional de los chinos, el que ha perdurado por más de dos mil años.
En lo que se refiere a los muebles, tampoco es cosa ajena el elemento simétrico. El mobiliario dispuesto en distancia idéntica, la correspondencia de dibujos y lámparas colocados a ambos lados de la pared, los candeleros de tamaños iguales depositados en los extremos de la mesa, entre otros; expresan perfectamente la forma simétrica dentro del espacio vital.
La porcelana china tiene un criterio estricto para la forma y los motivos, que es la simetría.
En realidad, el carácter chino no es una excepción en cuanto a la simetría por su forma cuadrada y también por su pronunciación y estructura interna. Algunos caracteres, que parecen asimétricos, presentan una simetría entre los trazos que los componen. La mixtura entre simetría y asimetría hace que el carácter chino se transforme en un conjunto tradicional y, al mismo tiempo, renovador.
(Amanda/Mauricio)