El sismógrafo de Zhang Heng

En la sala principal del Museo Nacional de la Historia China, en Beijing, se conserva una copia del primer sismógrafo del mundo, cuya autoría se atribuye a Zhang Heng, conocido científico que vivió durante la dinastía Han del Este.

Zhang Heng (78 - 140), nació en Nanyang (provincia de Henan) y es recordado como un importante científico que dedicó su vida al estudio y a la lectura de obras, particularmente, de cánones relacionados con la astronomía, el calendario y las matemáticas.

En el año 132, Zhang Heng logró producir en Luoyang (entonces capital del imperio) un primer modelo de sismógrafo conocido como "sismógrafo de viento". Éste estaba realizado en bronce y tenía la forma de una taza de té con tapadera. En la superficie del aparato hay ocho dragones verticales, con la cabeza hacia abajo, apuntando a las direcciones de norte, sur, este, oeste noreste, sureste, noroeste y suroeste. La boca de cada dragón contiene una bola de bronce y debajo de cada una hay ocho sapos, también de bronce, con la cabeza levantada y la boca abierta. La estructura interna del sismógrafo es fina e ingeniosa. Cuando se produce un terremoto en alguna dirección, el dragón que apunta a esa dirección abrirá la boca y dejará caer la bola en la boca del sapo, indicando automáticamente la dirección en la que se ha producido el terremoto. Un día del año 138, la bola del dragón que apuntaba al oeste cayó y justamente en Longxi, actualmente provincia de Gansu, a mil kilómetros de distancia, se produjo ese mismo día un terremoto. Esta fue la primera vez que el ser humano fue capaz de detectar un terremoto utilizando la tecnología.

Zhang Heng produjo además la primera esfera armilar del mundo que resistra, en la cual se registraban todos los fenómenos astronómicos de importancia ya conocidos. Por medio de esta esfera, se pueden observar los movimientos astronómicos. Como ingeniero mecánico, Zhang Heng logró también producir un águila de Madera capaz de volar y un aparato que registraba la distancia recorrida.

Zhang Heng es una figura altamente respetada y reconocida en cuyo nombre se celebran con frecuencia actos conmemorativos. Un cráter de la luna fue bautizado en honor de este científico.