¿Hasta dónde llegará Alberto Leung en el camino creativo?

52 años de edad, Alberto Leung está a punto de convertirse en un verdadero abuelo. Lo que preocupan a muchos es si todavía tiene la capacidad de seguir escribiendo. A esas dudas, la respuesta de Leung es: “Creo que todavía no pasa mis años dorados, porque todavía puedo encontrar en mí mismo esa personalidad auto-flagelación y de capricho.”

Alberto Leung

Alberto Leung, de nombre original Leung Wei Man, es el letrista más prestigioso del campo musical contemporáneo de China. Desde que comenzó a trabajar en la composición de letras, ya ha escrito cerca de 4.000 canciones. Las letras de Alberto Leung, bellas en forma y profundas en significado, se erigió como un estilo sui generis. En 2008, Leung fue galardonado con el “Premio de Aguja de Oro”, símbolo del honor vitalicio superior de la escena musical de Hong Kong.

Debido a la posición peculiar de Leung en el círculo de música, los fanes se acostumbraron a llamarle “Xi Ye” (que significa Abuelo Leung en mandarín). El tiempo vuela sin que se den cuenta. Ahora, 52 años de edad, Alberto Leung casi se ha convertido en un verdadero abuelo, pero su apariencia todavía parece estancada en el pasado. El cabello delantero suelto, que cubre la mitad derecha de la frente, se fusiona con el marco negro de los lentes. Rezuma un tipo de aire único perteneciente a los artistas hongkoneses de hace dos décadas.

Como el letrista más caro del círculo musical contemporáneo de China, Alberto Leung es sobresale por la diligencia, el alto rendimiento, y la sorprendente rapidez en escribir. Compuso una vez más de 200 letras en tan solo un año. Aunque a veces no pueda entregar el pedido en tiempo y quiera reembolsar el dinero a las empresas discográficas, rechazan a recibirlo. A partir de que publicó la primera composición Una vez, en 1985, ha creado cerca de 4.000 obras, de los cuales los más famosos son para las superestrellas como Leslie Cheung, Anita Mui, Jacky Cheung, Faye Wong, Eason Chan,etc.

Leung dice que la alta productividad y la rapidez, no necesariamente significa escribir mal. Por ejemplo, la canción Acuerdo para Faye Wong, fue compuesto durante su época de mayor rendimiento, y sólo gastó dos horas. “Como en aquel entonces estaba escribiendo todos los días, siempre que escuchaba las notas, aparecerían muchas palabras relacionadas en mi mente", presentó Leung. Piensa que para un letrista, lo más importante es mantenerse sensible con las palabras.

El límite de la libertad

En los últimos años, el estilo de Alberto Leung cambia. Las letras de Leung solían ser tristes, llenas de soledad y depresión. Sin embargo, estos años escribe unas más positivas y alentadoras. Estos cambios son particularmente notables en las letras que escribe para Eason Chan. Leung atribuyó este contraste al cambio de edad. 

Creciendo la edad, aumenta la ambición.

En los años recientes, la insatisfacción con la industria de composición de letras musicales, le impulsó a escribir algunas “obras con ambición”, que sin ningún embalaje, revela de manera franca la verdad de la vida. Está siempre convencido de que, en las letras con vitalidad, uno puede encontrar la clave que buscaba.

En la computadora de Leung, hay una larga lista, que son nombres o simples palabras que puede n servir de títulos para las canciones. Estas palabras, pueden tener su origen en el título de los libros, las películas, etc. por ejemplo, Cien Años de Soledad, Carta de amor olvidada después de una sonrisa, Guardar el centeno, etc, vienen precisamente de algunas obras literarias maestras. En la lista están incluidas otras dos sublistas en que coleccionan las palabras relacionadas con Jin Yong (un famoso novelista de artes marciales y caballerosidad de Taiwán) e Yi Shu (famosa literata de Hong Kong).

Alberto Leung intenta escribir “el límite de la libertad”, porque el noventa por ciento de la libertad la abandonamos nosotros mismos. Recordó su propia experiencia: “Quiero escribir letras desde antes de graduarme de la secundaria, luego lo logré, y resultó que alcancé la libertad que buscaba. Pero vinieron los problemas consecutivos: tego que escribir algunas cosas que a mí no me gustan, porque si no las escribiera, perdería la libertad de escribir lo que me gusta, lo que quiero escribir, las cosas significativas para el mundo. La libertad es totalmente ajena de los deseos. Por eso, si tienes ideal, estás desando algo, es imposible ser libre.”

El estado de ánimo

Los estudios en las obras clásicas del confucionismo y taoísmo, profundizaron el entendimiento de Alberto Leung sobre la libertad. Hace muchos años ya leyó la Sutra del Corazón, pero no profundizó sus estudios en las sutras budistas hasta en 1999. Desde entonces comenzó a penetrar las teorías del budismo en sus obras, revelando la verdad de la vida.

Alberto concede suma importancia al concepto del “estado de ánimo”. Dice que el humor determina el dibujo que tramas. “Ya que nuestra mente tiene la capacidad de determinar qué pintamos, como Van Gogh pudo pasar alto por el hecho de que la noche estaba oscura, al revés, los impactos del mundo exterior en nuestro corazón, también puede dejar diferentes reflejos según el estado de ánimo de cada uno”, opinó. En los últimos años, Leung escribió en varias ocasiones en las columnas de los medios la manera de hacer cara a la realidad y crear el estado de ánimo positivo. Quizás eso tiene algo que ver con el trastorno de ansiedad que le torturó hace años.

Fue mientras creó la letra de esta canción Shall We Talk de Eason Chan cuando comenzó a sentirse enfermo. En la canción escribió: " Habla conmigo, habla conmigo hasta que demos con la razón por la que nos alejamos finalmente; ¿Quién no se atreve a hablar?, ¿quién puede vivir una tragedia más amarga que un tango bailado por uno solo?...... " Alberto una vez describió la sensación de aquel entonces: “Cuando me atacó la enfermedad, cada vez que quería escribir, sentía mareo y se me volvían tensos los músculos. Lo más terrible es que la garganta parecía ser tapado por algún bulto, y el corazón latía como si lo pudiera escupir a cualquier hora.” Actualmente ya se ha recuperado completamente de la enfermedad, pero esa lucha física y psicológica que experimentó durante el tratamiento queda impresa en su cerebro, lo cual siempre le recuerda la importancia del “humor”. 

La poesía clásica de China

Además del estado de ánimo promovido en las obras budistas, a Leung también le gustan los descritos en los poemas antiguos de China. Un importante motivo de la popularidad de las letras de Leung es que son "frescas de estilo estético, y profundas de significado”. Todo eso viene de su intento en escribir poemas modernos y su absorción de las esencias de la poesía clásica. Le encantan los poetas como Li Bai, Du Fu, Tao Yuanming, etc., especialmente su ídolo Su Shi.

A ojos de Leung, leer la biografía y los poemas de Su Shi, es uno de los mejores remedios para aliviar la presión. El verso favorito de Alberto Leung es "Mirando hacia atrás, quedan los árboles que azotaron el viento y las lluvias. Regreso. No importa si hace lluvia o hace sol." En las situaciones de adversidad, uno se puede alegrar en su interior. Por eso, sea soleado o nubado el día, no le importa. Los cambios caprichosos del mundo tampoco influenciarán en su emoción.

52 años de edad, Alberto Leung está a punto de convertirse en un verdadero abuelo. Lo que preocupan a muchos es si todavía tiene la capacidad de seguir escribiendo. A esas dudas, la respuesta de Leung es: “Creo que todavía no pasa mis años dorados, porque todavía puedo encontrar en mí mismo esa personalidad auto-flagelación y de capricho.”

Alberto Leung

Alberto Leung, de nombre original Leung Wei Man, es el letrista más prestigioso del campo musical contemporáneo de China. Desde que comenzó a trabajar en la composición de letras, ya ha escrito cerca de 4.000 canciones. Las letras de Alberto Leung, bellas en forma y profundas en significado, se erigió como un estilo sui generis. En 2008, Leung fue galardonado con el “Premio de Aguja de Oro”, símbolo del honor vitalicio superior de la escena musical de Hong Kong.

Debido a la posición peculiar de Leung en el círculo de música, los fanes se acostumbraron a llamarle “Xi Ye” (que significa Abuelo Leung en mandarín). El tiempo vuela sin que se den cuenta. Ahora, 52 años de edad, Alberto Leung casi se ha convertido en un verdadero abuelo, pero su apariencia todavía parece estancada en el pasado. El cabello delantero suelto, que cubre la mitad derecha de la frente, se fusiona con el marco negro de los lentes. Rezuma un tipo de aire único perteneciente a los artistas hongkoneses de hace dos décadas.

Como el letrista más caro del círculo musical contemporáneo de China, Alberto Leung es sobresale por la diligencia, el alto rendimiento, y la sorprendente rapidez en escribir. Compuso una vez más de 200 letras en tan solo un año. Aunque a veces no pueda entregar el pedido en tiempo y quiera reembolsar el dinero a las empresas discográficas, rechazan a recibirlo. A partir de que publicó la primera composición Una vez, en 1985, ha creado cerca de 4.000 obras, de los cuales los más famosos son para las superestrellas como Leslie Cheung, Anita Mui, Jacky Cheung, Faye Wong, Eason Chan,etc.

Leung dice que la alta productividad y la rapidez, no necesariamente significa escribir mal. Por ejemplo, la canción Acuerdo para Faye Wong, fue compuesto durante su época de mayor rendimiento, y sólo gastó dos horas. “Como en aquel entonces estaba escribiendo todos los días, siempre que escuchaba las notas, aparecerían muchas palabras relacionadas en mi mente", presentó Leung. Piensa que para un letrista, lo más importante es mantenerse sensible con las palabras.

Muchos están preocupados por si Alberto Leung todavía puede seguir escribiendo a esa edad. En frente de estas dudas, Leung siempre retira la sonrisa, y responde sin vacilar: “Creo que todavía no pasa mis años dorados, porque todavía puedo encontrar en mí mismo esa personalidad auto-flagelación y de capricho.” “Ser mayor de edad es una ventaja particular para escribir, porque los intereses se amplían, y la creación estará menos limitada.”

Leung explica: “Cuando me dé cuenta de que ya no está en el apogeo, dejará de escribir. Eso es igual que cuando un cocinero tiene mala la nariz, ¿por qué sigue cocinando? No escribo para conservar el prestigio, sino por dejar algo con valor a la sociedad."

Referencia: http://www.nbweekly.com/culture/arts/201309/34586.aspx

LXQ/Mauricio