La historia de los grandes almacenes del mundo
En 1893, Théophile Bader y Alphonse Kahn, dos primos, compraron una tienda de costura en la esquina de la rue La Fayette y de la rue de la Chaussée d'Antin. Aunque la tienda estaba idealmente localizado en las proximidades de la Ópera Garnier, de los grandes bulevares y de la estación de Saint-Lazare, el negocio se encontraba en situaciones difíciles por la capacidad reducida de gestión del dueño anterior.
Una foto del mostrador de guantes de Lafayette, sacada entre 1900 y 1910.
Los dos primos la transformó en un almacén de nuevo modelo, y lo denominó con el nombre de la calle: Aux Galeries Lafayette.
Rápidamente la galería de lujo atrajo a los empleados de oficinas y la gran burguesía.
Con el desarrollo de los negocios, hasta el año 1902, los consumidores ya no cabían en los 70 metros cuadrados de espacio, por lo que Kahn y Bader compraron los inmuebles número 38, 40 y 42 del Bulevar Haussmann, así como el 15 de la rue de la Chaussée d'Antin. Durante la ampliación y adaptación de las nuevas tiendas, el lujo y el aire artístico.
En la etapa inicial de Lafeyette, Kahn y Bader pusieron mucha atención en diferenciarla de los demás almacenes. Su ambición es: hacer a todo el mundo poseer las cosas hermosas y de buena calidad. Por eso, los artículos de este almacén estaban destinados a todas las clases sociales.
LeBon Marche, el primer almacén moderno del mundo.
Las medidas de publicidad y promoción que empleaba Lafayette también eran distintas a las tradicionales. Eran más dramáticos y llamativos. Algunas eran tan únicas que incluso no las superaban las tomadas por los almacenes de nuestra época. Por ejemplo, en 1919, Lafayette ofreció 25 mil francos para buscar a un piloto que fuera capaz de parar el avión en el balcón de hierro fundido sobre su techo. El 19 de enero, el señor Jules Vedrines partió en un avión Gaudron G3 desde el aeropuerto situado en el suroeste de París, y logró aterrizarlo en el punto indicado. Bajo la atención masiva, Lafayette le concedió el galardón. Lo divertido es que a la par llegó una multa de 15 francos, acusándolo “Volar en la urbe de París y aterrizarse en la zona prohibida”.
Muchos artistas tienen interés particular por cooperar con Lafayette. Alquilan los espacios del almacén para organizar sus exposiciones individuales. Por ejemplo, la cantante famosa Edith Piaf convovó una vez su concierto personal a la puerta de Lafayette. El diseñador italiano Gio Ponti puso su exhibición de diseño Domus con la misma en Lafayette.
El Almacén Galeries Lafayette es uno de los “ejemplares” que más vale estudiar en la historia de los almacenes. Sin embargo, no es el primer almacén moderno del mundo. En 1852, el compatriota de los primos Kahn, el empresario Aristide Boucicaut introdujo una gran variedad de productos a su propia tienda de telas llamada LeBon Marche (que quiere decir precio razonable en francés) , acción que atrajo a una gran cantidad de consumidores de París y que condujo a la imitación de muchas otras tiendas de la ciudad. LeBon Marche renovó la manera de promociones, creando un área separada para cada clase de productos, y mandó a todos los vendedores atender a cada cliente con cortesía. Consentía a los consumidores observar los productos de cerca, aunque finalmente no los compraran. Marcaba claramente el precio de las mercancías, para disipar la posible vergüenza que sentían los clientes por consultar el precio.
Un gramófono importado de EEUU en 1929, vendido en Sincero Departmente Store.
A pocos años, ese nuevo modelo de venta a la minorista se extendió al resto del mundo. Por ejemplo, el 20 de octubre de 1917, en la Avenida Nanjing, ciudad de Shanghai, se abrió el Sincero Departmente Store, el primer almacén moderno de China. Fue construido en un complejo donde además de vender mercancías, estaba equipado con un teatro en la planta superior, un hotel y varios restaurantes. Muy pronto, recuperó todas las inversiones para alcanzar rentabilidad. El próximo año, el almacén Wing On se abrió enfrente de Sincere. Los dos gigantes en minorista ocupaban respectivamente el extremo norte y el sur de la Avenida Nanjing, y efectuaban una competencias violentas.
A mediados de la década de 1960, nació un nuevo tipo de almacén, cuya escala era sorprendentemente grande. El supermercado subterráneo y el modelo de arrendamiento de bienes raíces se formaron justamente en ese período. Un ejemplo de su tipo es el almacén Hudson's. Tenía cuatro pisos bajo suelo, entre los cuales dos servían de supermercado. Los espacios de la parte sobre el suelo estaban divididas en 25 segmentos, y entre ellos 16 fueron alquilados por los dueños de las tiendas de distintas marcas: así el almacén se convirtió en un “arrendador”. Durante los años de su apogeo, Hudson's contrataba a hasta 12 mil empleados, y emitía más de 100 mil facturas al día. Incluso compró la tercera estación de comunicación telefónica más grande de EEUU, en que instaló dos centros telefónicos, cuyo tamaño era sólo inferior al del Pentágono y de la Central Telefónica Bell.
En 1893, Théophile Bader y Alphonse Kahn, dos primos, compraron una tienda de costura en la esquina de la rue La Fayette y de la rue de la Chaussée d'Antin. Aunque la tienda estaba idealmente localizado en las proximidades de la Ópera Garnier, de los grandes bulevares y de la estación de Saint-Lazare, el negocio se encontraba en situaciones difíciles por la capacidad reducida de gestión del dueño anterior.
Una foto del mostrador de guantes de Lafayette, sacada entre 1900 y 1910.
Los dos primos la transformó en un almacén de nuevo modelo, y lo denominó con el nombre de la calle: Aux Galeries Lafayette.
Rápidamente la galería de lujo atrajo a los empleados de oficinas y la gran burguesía.
Con el desarrollo de los negocios, hasta el año 1902, los consumidores ya no cabían en los 70 metros cuadrados de espacio, por lo que Kahn y Bader compraron los inmuebles número 38, 40 y 42 del Bulevar Haussmann, así como el 15 de la rue de la Chaussée d'Antin. Durante la ampliación y adaptación de las nuevas tiendas, el lujo y el aire artístico.
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