Origen del Festival “Qi Xi”: La historia de Niu Lang y Zhi Nv

Los chinos creen que la estrella Vega, al este de la Vía Láctea, es Zhi Nv y, en la constelación de Aquila, en el lado occidental de la Vía Láctea, Niu Lang espera a su esposa.

Se decía que Zhi Nv era la más joven de las siete hijas de la Reina del Cielo. Con sus hermanas, ella trabajó duro para tejer nubes hermosas en el cielo, mientras que Niu Lang era un pobre pastor huérfano, expulsado de su hogar por su hermano mayor y su cruel esposa.

Niu Lang se lamentó por su vida solitaria y pobre, en compañía de apenas una vaca vieja, su única amiga y compañera. La vaca mágica amablemente le habló de una manera de encontrar a una mujer hermosa y agradable como su compañera de vida.

Bajo la dirección del animal, Niu Lang fue a la orilla del río en una tarde, donde las siete hadas salieron de su palacio celestial para bañarse.

Tomó uno de los hermosos vestidos de seda que las hadas habían dejado en la orilla. Cuando las hadas abandonaron el agua, la más joven no pudo encontrar su ropa y tuvo que ver a sus hermanas volar de vuelta al cielo sin ella.

Entonces Niu Lang salió con el vestido y le pidió al hada más joven, Zhi Nv, que se quedara con él.

Pasaron varios años en la Tierra, que solo duraron unos días en el cielo. Niu Lang y Zhi Nv vivieron felices juntos y tuvieron dos hijos antes de que la Reina del Cielo descubriera la ausencia de Zhi Nv.

Estaba tan enojada que hizo que Zhi Nv regresara al cielo. Al ver a su amada esposa volando en el cielo, Niu Lang se sintió aterrorizado. Vio la piel de vaca colgada en una pared. La vaca mágica le había dicho antes de morir en la vejez: "Guarda mi piel para un uso de emergencia".

Poniéndose la piel de vaca, fue tras su esposa con sus dos hijos.

Con la ayuda de esta piel de vaca, Niu Lang pudo seguir a Zhi Nv al cielo. Estaba a punto de alcanzar a su esposa cuando la Reina se presentó y se quitó la horquilla para trazar una línea entre los dos. La línea se convirtió en el Río de Plata en el cielo, o la Vía Láctea.

Zhi Nv regresó al taller celestial, y continuó tejiendo las nubes. Pero estaba tan triste, y echaba tanto de menos a su marido al otro lado del Río de Plata, que las nubes que tejía parecían tristes. Finalmente, la Reina mostró un poco de misericordia, permitiendo que la pareja se reuniera una vez al año en el Río de Plata (Vía Láctea).