Hou Yi derribó los soles

CRI

En la remota antigüedad, en el cielo había 10 soles que aparecían simultáneamente. El sol fuerte asaba a la tierra hasta que fue quemada. Los cultivos se marchitaban. La gente se sentía mucho calor sin aliento y se echaba al suelo en estado de inconsciencia. Debido al calor abrasador, algunos monstruos y bestias feroces salían de los ríos y lagos secos y de los bosques sofocantes, y dañaban a la humanidad.

Los catástrofes de la humanidad alarmó al Soberano del Cielo, quien ordenó a Hou Yi, Dios de Flecha a descender al mundo para auxiliar a la humanidad a librarse de miseria. Hou Yi llevó consigo un arco rojo otorgado por el Soberano del Cielo, una bolsa de flechas blancas y su esposa hermosa Chang E a venir al mundo.

Al llegar al mundo, Hou Yi persuadió primero a los 10 soles a salir por turno. Así se podía dar calor y luz a la humanidad para evitar que la tierra estuviera demasiamo asada. Pero los soles no se seguían oir el consejo de Hou Yi. Hou Yi, quien estaba furioso, empezó el combate del disparo de sol. Quitó ese arco rojo desde su hombro, tomó las flechas blancas y disparó hacia los soles. Pronto, 9 soles fueron derribados. En el cielo, sólo quedó un sol. La humanidad podía vivir feliz y trabajar en paz. Por eso, la gente agradecía mucho por la ayuda de Hou Yi.

La hazaña de Hou Yi fue envidiada por los Dioses del Cielo. Ellos presentaron calumnias ante el Soberano del Cielo, quien estaba alejado de Hou Yi. Por último el Soberano del Cielo decidió degradar a Hou Yi y su esposa Chang E al mundo y no permitía que volvieran al cielo. Hou Yi y Chang E, quien sufrieron una injusticia, tenían que vivir retirados en el mundo y llevaba una vida muy pobre depende de la caza de Hou Yi.

Con el transcurso del tiempo, Hou Yi se sentía que se indigno de su esposa quien fue comprometida por él y vivía en el mundo. Oyó hablar de una medicina mágica de la Reina Madre del Oeste en la montaña Kun Lun. Si tomaba esta medicina, la gente podía subir al cielo. Entonces, cruzaba montañas y ríos y pasaba muchas penalidades a pedir dicha medicina mágica de la Reina Madre del Oeste. Era lamentable que la medicina mágica de la Reina Madre del Oeste sólo era para una persona. Para Hou Yi, le dio pena subir al cielo él mismo abandonando a su querida esposa, al mismo tiempo, no quería que su esposa subiera al cielo sola y le dejara en el mundo. Por eso, llevó a la medicina mágica a la casa y la escondió.

No obstante, Chang E no se acostumbraba a la vida pobre. Se aprovechó de que Hou Yi no estaba en casa para encontrar la medicina mágica y tomarla sola. En seguida, Chang E se sentía que su cuerpo se ponía mucho más ligera y volaba hacia el cielo. Finalmente, fue a la Luna y vivía en el Palacio Guang Han. Cuando Hou Yi se dio cuenta de que su esposa le despidió y subir al cielo, se sentía muy triste. Pero no podía dañarla con su flecha mágica y tenía que despedirse con ella.

Ahora Hou Yi era solitario. Seguía llevando la vida depende de la caza al mismo tiempo recluaba a discípulos para enseñarles a disparar una flecha. Entre sus discípulos, hubo una persona que se llamaba Feng Meng y adelantaba mucho. Pronto, se distinguía su habilidad de disparar. No obstante, a Feng Meng, le parecía que si existiera Hou Yi, no pudiera ser el primero del mundo. Entonces, una vez, cuando su maestro estaba borracho, le disparó con flechas por la espalda y mató a Hou Yi.

Por otra parte, aunque Chang E fue a la Luna, donde sólo habían un conejo pequeño que molía medicina y un viejo que talaba un árbol. Pensando en el buen tiempo que pasaba con su marido y los sentimientos tiernos del mundo, se sintía muy sola y melancólica. Por eso, cada día estaba desanimada en el Palacio de la Luna.