Saludos desde Colombia,
Como colombiano agradezco la elección de este tema para el programa de la semana y las entrevistas con los testimonios de expertos y conocedores del tema del café.
Hoy, precisamente, 27 de Junio, se acaba de celebrar el Día Nacional del Café, coincidiendo con el aniversario de la Federación Nacional de Cafeteros, la institución que promueve la caficultura en el país.
Algunos diarios locales, han apuntado, en esta fecha especial que: más allá de su aporte al producto interno bruto del país, el café se consolidó en una cultura. No se concibe una Colombia sin café no solo por los recursos que aporta, sino por los paisajes, las construcciones y los vestuarios típicos de los caficultores. No en vano la región cafetera fue declarada por la Unesco como patrimonio cultural de la humanidad.
No se concibe una Colombia sin café, porque no es posible imaginar a la gran mayoría de colombianos sin poder tomar un tinto en las mañanas, sin acompañar su desayuno de un café con leche o participar de una reunión de trabajo sin esta bebida.
En torno a un café se finiquitan diariamente innumerable cantidad de negocios, se reencuentran amistades, se reconcilian parejas y se conocen nuevas personas. ¿Quién no ha dicho o escuchado aquella frase rompe-hielo con la cuál se establece una cita: 'te invito a un cafecito'?
En la mañana, en la tarde o en la noche; frío o caliente, un café siempre es bien recibido. Según el más reciente estudio realizado por la Fedecafé el consumo per-cápita de los colombianos está entre 2,5 y 3 tazas de café diario.
Personalmente no tomo tanto café como el resto de mis compatriotas, no en vano reconozco que una deliciosa taza de café con leche, un nevado, un granizado, un capuchino, o cualquiera de sus tantas variedades, son un verdadero disfrute para el sabor y el paladar.
Un abrazo desde la tierra del Café.