En Nepal, las inundaciones y los corrimientos de tierra provocados por las incesantes lluvias han causado la muerte de al menos 151 personas.
Desde las primeras horas del 27 de septiembre, el temporal ha dejado más de un centenar de heridos y más de 50 desaparecidos. La policía de Nepal asegura que más de 3.600 personas han sido rescatadas hasta el momento. Los agentes recuperaron al menos 35 cadáveres de tres autobuses sepultados por un enorme corrimiento de tierras a lo largo de una ruta de viaje clave hacia la capital, Katmandú. Las autoridades cerraron varias carreteras principales y cancelaron temporalmente el transporte aéreo nacional durante el fin de semana. El río Bagmati, que atraviesa Katmandú, ha superado su nivel de peligrosidad. Las deficiencias en el sistema de drenaje han amplificado el impacto del temporal.