Representantes de China y Brasil abordaron en un evento en Brasilia el estado de las relaciones bilaterales y nuevas formas de cooperación

Representantes de China y Brasil analizaron en un evento en Brasilia el estado de las relaciones entre ambos países y abordaron nuevas formas de ampliar la relación, poniendo especial énfasis en la importancia que tienen para ello los medios de comunicación. El evento estuvo liderado por el embajador de China en Brasil, Zhu Qingqiao.

Según Paulo Henrique Rodrigues Pereira, secretario de la Secretaría del Consejo de Desarrollo Económico Social Sostenible de Brasil, "China y Brasil son países con dificultades y desafíos históricos parecidos, el evento fue muy bueno, traer actores chinos y brasileños para conversar sobre estrategias, oportunidades y caminos para este perfeccionamiento, para generar inversiones, organizar nuevos campos de negocio. Este evento tiene mucho para contribuir para los próximos años entre estos dos grandes países".

"El evento de hoy es muy importante porque abre la posibilidad de que podamos discutir aspectos cruciales de la relación Brasil-China, de un lado, y también es importante para que podamos traer temas que son caros para China en su proceso de desarrollo, que ellos llaman de modernización socialista al estilo chino, para que podamos conocer más sobre China y toda su complexidad para que este diálogo, esta relación bilateral, sea más fructífera", dijo Evandro Menezes, coordinador del Núcleo Brasil-China de la Fundación Getúlio Vargas.

Los ponentes destacaron que la relación entre China y Brasil debe impulsarse todavía más gracias al nuevo gobierno brasileño de Lula da Silva, quien próximamente viajará a China y quien ya dejó claro que pretende que el país asiático sea un socio de gran importancia y estrategia para Brasil. 

Jorge Viana, presidente de la Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones (APEX), dijo que "el viaje del presidente Lula puede ser una oportunidad de recuperar lo que llamo de tiempo perdido, el anterior gobierno no consideraba China, no priorizaba China y el presidente Lula hará exactamente lo contrario, tendrá a China como un socio estratégico importante, tanto para las relaciones comerciales como para las demás relaciones que países amigos necesitan tener, una relación estratégica específica con China".

"Son relaciones que se están constituyendo desde hace tiempo y ganaron un salto desde el punto de vista económico y comercial desde la crisis financiera de 2008, incluso en 2009 China pasó a ser nuestro primer socio comercial. Es una relación que tiene mucho para crecer y que necesariamente presupone ampliar para otros temas más allá del económico, pero no hay duda que el económico centraliza porque estamos viviendo una fase de desplazamiento del centro dinámico de occidente para Oriente y Brasil tiene mucho para colaborar, especialmente en las relaciones sur-sur con China", manifestó Márcio Pochmann, presidente del Instituto Lula.

Otro de los puntos resaltados fue la importancia que tienen los medios de comunicación para acercar ambos países, distantes físicamente pero cada vez más cercanos gracias a iniciativas como la del Grupo Bandeirantes, que tiene diariamente un informativo sobre China en todos sus medios.

"Tenemos que hablar más, creo que tenemos un campo inmenso para crecer, y es en esto que el Grupo Bandeirantes se posiciona desde hace mucho tiempo, con una asociación muy fuerte con el Grupo de Medios de China (CMG), CCTV, tenemos cada día un telediario chino en la programación de todos nuestros vehículos, y queremos más proximidad, hablar más de China, queremos que China hable más de Brasil, queremos que los dos pueblos se conozcan más, se aproximen más, toquen más al otro, coloquen más sus deseos, sus cuestiones, y hagan un desarrollo productivo para los dos lados, un juego de gana-gana, una relación diplomática productiva, proficua, en la que los dos países salgan mejor que en el inicio de la relación", dijo André Basbaum, director de Contenido del Grupo Bandeirantes de Comunicación.