Al menos 36 personas perdieron la vida después de que un deslizamiento de lodo enterrara a varias comunidades de la región de Arequipa en el sur del Perú.
El desastre fue provocado por las intensas lluvias que habían caído en la zona durante el fin de semana. El fenómeno se desencadenó el 5 de febrero. En algunas áreas, las carreteras se vieron severamente afectadas. Cientos de edificios fueron destruidos, y muchos más quedaron enterrados bajo el lodo. Las autoridades peruanas reportaron que más de 4.000 familias fueron afectadas.
El Centro de Operaciones de Emergencia Nacional del Perú emitió una alerta por inundaciones y deslizamientos de lodo en más de 200 áreas críticas de 14 departamentos. Entre esas áreas se encuentran Lima y Arequipa.