Se informa de que en los últimos años, las demandas económicas y comerciales de la Unión Europea a China radican principalmente en la expansión del acceso a los mercados. Como país en desarrollo, la apertura gradual ha sido una experiencia importante en la gobernanza de China durante más de 40 años, que ha contribuido a mitigar los riesgos y a sostener la promoción de la misma. Una cosa puede confirmarse: la puerta abierta de China no se cerrará, sino que se abrirá cada vez más.
En la portada de un número reciente de la revista británica, The Economist, un largo túnel ha visto su fin y a la luz final se vislumbra la vacuna para el coronavirus. El titular de la portada decía: De repente, la esperanza. La gente de todo el mundo ha estado luchando arduamente contra la pandemia durante un año, y sólo una vacunación generalizada a la población puede disipar el virus, y en definitiva, hacer que el mundo vuelva a la normalidad.
Las empresas estatales son como el "pilar" y la "piedra angular" para la economía nacional de China. En este año se ha visto un buen ejemplo: las compañías estatales tomaron la iniciativa en la reanudación del trabajo y la producción, y algunas se cambiaron temporalmente a la producción y proporcionaron los suministros que se necesitan con urgencia para la prevención y el control de la epidemia. Impulsadas por la asistencia de compañías estatales, un gran número de pequeñas y medianas empresas privadas pudieron superar las dificultades. Además, las cadenas industriales y de suministros se mantuvieron estables y la economía de China tomó la delantera en una fuerte recuperación, realizando una enorme contribución a la economía mundial.
La ciencia prueba constantemente que solo abandonando los prejuicios y fortaleciendo la cooperación, los países pueden responder juntos a la epidemia y superarla.
David Gross, ganador del premio Nobel de Física en 2004, afirmó recientemente que las epidemias, el cambio climático y las armas nucleares son las tres grandes crisis a las que se enfrenta la humanidad
El 2020 es un año especial. Con el fin de derrotar la pandemia COVID-19, mantener el distanciamiento social es una de las medidas de protección más efectivas para la humanidad, y los viajes transfronterizos de personas entre países se han reducido drásticamente.
El pasado día 24, en una conversación telefónica con la canciller alemana Angela Merkel, el presidente chino, Xi Jinping, indicó que China está dispuesta a continuar la estrecha comunicación con la parte europea en la próxima fase de la importante agenda China-UE
El presidente chino, Xi Jinping, pidió el día 22 de noviembre al G20 esforzarse para enfrentar juntos los retos climáticos y ambientales con el fin de proteger a este planeta.
Hace poco, los dirigentes chinos y europeos decidieron establecer el Diálogo de alto nivel entre China y la UE sobre el medio ambiente y el clima; y el Diálogo de alto nivel entre China y la UE sobre la tecnología digital para crear un socio ecológico y uno de cooperación digital entre China y la UE.
Antes de fin de año, el Acuerdo de Inversión Integral entre China y la Unión Europea será una realidad, según el objetivo trazado en septiembre pasado por los líderes del país asiático y del bloque europeo.