¿Están China y Estados Unidos al borde de un "choque de civilizaciones"?

Xinhua 2019-05-10 17:18:03
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  Mientras Pekín y Washington trabajan duro para resolver sus disputas comerciales, una responsable de planificación política estadounidense ha revivido la polémica idea del "choque de civilizaciones" al formular la política sobre China, lo que ha provocado reproches y críticas tanto dentro del país como en el extranjero.

  En un foro sobre seguridad celebrado la semana pasada, la directora de Planificación de Políticas del Departamento de Estado de EEUU, Kiron Skinner, hizo una analogía entre la competición que está teniendo lugar entre China y Estados Unidos y el "choque de civilizaciones" y alegó que es "la primera vez que tendremos a una gran potencia competidora no caucásica".  

  Esta retórica indignante y anticuada, propia de la Guerra Fría, refleja la creciente ansiedad y las reacciones exageradas de algunos políticos estadounidenses sobre cómo enfrentar a una China en ascenso.  

  Si bien no podemos ignorar las diferencias culturales e ideológicas entre las dos mayores economías del mundo, sus divergencias no deberían exagerarse ni retorcerse.

  En una conferencia de prensa el lunes, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino Geng Shuang afirmó que "es simplemente absurdo y absolutamente inaceptable mirar las relaciones entre China y Estados Unidos desde una perspectiva de 'choque de civilizaciones' e incluso racista".    El pasado y el presente han confirmado sin ambages que los dos países se benefician de la cooperación y salen perdiendo con la confrontación, y que la primera es la única opción correcta para ambos.

  En los últimos 40 años, la cooperación y los intercambios en todos los campos han sido el hilo conductor de las relaciones entre China y EEUU, lo que se ha probado beneficioso y fructífero para una y otra sociedad a ambas orillas del Pacífico.

  Lo que tratan de hacer Skinner y otras personas con ideas afines es amplificar las diferencias entre ambos países con un sesgo racial y de "choque de civilizaciones" y, por lo tanto, buscar excusas para la confrontación. Es peligroso e irresponsable y va en contra de la tendencia mundial hacia la paz y el desarrollo.  

  Comentarios recientes sobre las relaciones entre China y EEUU de veteranos diplomáticos estadounidense como Charles W. Freeman Jr. han demostrado la absurdidad de la idea de Skinner. 

  "El conocimiento no llega encerrándote una habitación para pensar solo. Llega de los intercambios con otras personas", dijo a Xinhua.  

  Añadió que "es mucho más útil centrarse en encontrar cosas sobre las que se está de acuerdo que en las diferencias" y resaltó que "hemos aprendido que el respeto mutuo es la clave para una relación provechosa".  

  En lugar de pensar en el antagonismo y la confrontación, los planificadores de políticas en Washington deben trabajar con China para forjar una forma de cooperación y competencia responsable.

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