El viaje de Pompeo con segundas intenciones al Medio Oriente expuso aún más sus ambiciones políticas

El día 27, hora local, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, puso fin a un viaje al Medio Oriente lleno de malas intenciones y cálculos. Durante esta visita, no solo llevó al extremo el unilateralismo de Estados Unidos, sino que también rompió la tradición, intervino abiertamente en la política interna estadounidense como diplomático y sacó provecho durante para subir un día a la cima del poder estadounidense. El espectáculo de viaje de cuatro países de Pompeo en el Medio Oriente se ha convertido así en una verdadera representación del caos en la política estadounidense actual.

Como ya había predicho ampliamente el mundo exterior, un propósito importante de la visita de Pompeo es atacar y reprimir a Irán. Como todos sabemos, el 14 de julio de 2015, Irán y Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Rusia, China y Alemania alcanzaron un acuerdo histórico integral sobre el problema nuclear iraní. Según el acuerdo, Irán prometió restringir sus actividades nucleares a cambio del levantamiento de sanciones por parte de la comunidad internacional. La Resolución No. 2231 del Consejo de Seguridad aprobada entonces decidió mantener el embargo de armas de la ONU sobre Irak hasta el 18 de octubre de 2020. Dado que se acerca el día en que se levanta el bloqueo, Estados Unidos no puede quedarse quieto. Recientemente, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas propuso un proyecto de resolución para extender el embargo de armas a Irán. Pero Estados Unidos solo obtuvo un voto a favor, mientras que los aliados tradicionales como Gran Bretaña, Francia y Alemania se abstuvieron. Esto provocó un alboroto en los medios estadounidenses, que ironizaron que "quería aislar a Irán, pero descubrí que era yo quien estaba aislado" y "Washington estaba completamente aislado en el escenario internacional".

Por este resultado, Pompeo naturalmente no está dispuesto a darse por vencido. Durante esta reunión con líderes de Oriente Medio, clamó repetidamente por "contrarrestar conjuntamente la mala influencia de Irán". El día en que terminó su viaje a Oriente Medio, Pompeo publicó en las redes sociales que anunciaba que Estados Unidos reanudaría las sanciones contra Irán el 20 de septiembre. Esta acción fue en contra del consenso del Consejo de Seguridad de la ONU y promovió desenfrenadamente el unilateralismo, situándose descaradamente en el lado opuesto del mundo.

Como señaló la mayoría de los miembros del Consejo de Seguridad, Estados Unidos se retiró unilateralmente del acuerdo nuclear con Irán ya en mayo de 2018, y ha perdido sus calificaciones como participante en el acuerdo, y sus requisitos no tienen ninguna base legal.

Lo que hay que señalar es que la visita de Pompeo a Oriente Medio en momento del Congreso Nacional Republicano de Estados Unidos no es solo para reprimir a Irán, sino que también tiene cálculos políticos más profundos. Durante esta visita, Pompeo calificó el anuncio de Emiratos Árabes Unidos e Israel de la normalización de las relaciones diplomáticas a mediados de agosto como una "gran victoria" en la mediación diplomática del líder estadounidense, tratando de mostrar los "logros diplomáticos" del actual gobierno a los Estados Unidos. Pero, de hecho, la mejora de las relaciones entre los Emiratos Árabes Unidos e Israel se deriva del vigoroso desarrollo de los Emiratos Árabes Unidos del turismo, el transporte, la inteligencia artificial y otras industrias "no petroleras", e Israel es su mercado y socio potencialmente importante; por otro lado, el acercamiento de los dos países también está destinado a contener conjuntamente el desarrollo ulterior del "Arco chiita". Evidentemente, la llamada mediación norteamericana no influye de manera decisiva en el tema del planteamiento de los dos países, la insistencia de Pompeo en cubrir de alabanzas al líder norteamericano está en consonancia con su estilo halagador.

Desde el colapso de la prevención y el control de la epidemia hasta el aumento de la discriminación racial, Estados Unidos se encuentra ahora atrapado en múltiples crisis de gobernanza, en que no se puede disculpar a políticos tan egoístas como Pompeo. En repetidas ocasiones han colocado los intereses y el bienestar personales por encima de los intereses nacionales, lo que hacen es como conducir un automóvil que ha sido tomado por intereses privados.