Disparates de Navarro reflejan insuficiencia del mecanismo de toma de decisiones estadounidense

En una entrevista reciente con la cadena Fox News, Peter Navarro, asesor comercial de la Casa Blanca afirmó que estaba perplejo ante el hecho de que Estados Unidos quede dividido como consecuencia de la pandemia por el nuevo coronavirus y que los estadounidenses dirijan la ira contra sus connacionales. En su opinión, si los estadounidenses hubieran transferido todas sus emociones negativas a China, Estados Unidos se habría recuperado de la COVID-19 más rápidamente. Al parecer, la pretensión de eludir la responsabilidad del gobierno federal por su fracaso en la lucha contra la epidemia ha hecho que Navarro empiece a decir disparates.

Como uno de los halcones más radicales en Washington, Navarro ha fabricado continuamente rumores para difamar a China desde el brote de la epidemia. En la entrevista con Fox, Navarro repitió una vez más sus mentiras en tono racista, diciendo que China "fabricó el virus", "oculta el virus" y "acabó con" todos los equipos de protección médicos disponibles en el mundo. Los cibernautas estadounidenses no pudieron soportarlo más y tuitearon en las redes sociales, acusando a Navarro de "ser un hipócrita" y reseñando que "los ignorantes son los más propensos a culpar a los demás" y le pidieron que proporcionara pruebas. Algunos cibernautas se burlaron de él diciendo estar "confundidos" por el hecho de que Estados Unidos haya sido el país con el mayor número de casos confirmados por el nuevo coronavirus a nivel mundial, pero Navarro sigue culpando a China por la incompetencia del gobierno estadounidense.

Obviamente, las mentiras y calumnias de Navarro han calado desde hace mucho tiempo. La comunidad internacional entiende que China fue el primer país en informar a la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre casos de neumonía de causa desconocida, pero eso no significa que el virus se originara en Wuhan.

Desde el 3 de enero, China comenzó a enviar periódicamente y por iniciativa propia las informaciones oportunas sobre la epidemia a la OMS, a Estados Unidos y otros países pertinentes así como a varias organizaciones regionales. Dos días después, la OMS dio la alarma de casos de neumonía inexplicable. El Washington Post informó que los funcionarios estadounidenses que trabajaban en la sede de la OMS también "transmitieron dichas informaciones en tiempo real a la actual administración estadounidense", pero esta última no comenzó a afrontar la amenaza del virus hasta 70 días después.

En cuanto a la falacia de que China había acabado con todos los equipos de protección médica en el mundo, simplemente no vale la pena refutar. Es obvio para todo el mundo que China ha brindado apoyo dentro de su capacidad al enfrentaminto mundial a la pandemia a través de la cooperación de carácter comercial y la asistencia humanitaria. Tomemos el caso de Estados Unidos como ejemplo. Según estadísticas incompletas de la Aduana de China, del 1 de marzo al 17 de abril, China proporcionó a Estados Unidos 1.864 millones de mascarillas, 258 millones de pares de guantes médicos y de otros tipos, 29,19 millones de batas de protección y 3,13 millones de gafas protectoras, 156 ventiladores invasivos y 4254 ventiladores no invasivos. Navarro no tenía moral en absoluto para difundir agravios y rumores. Este economista extremadamente hostil a China, que una vez inventó historias en su libro y engañó a editores y lectores, ha venido atacando a China apoyándose en sus ilusiones.El hecho de que una persona como Navarro haya llegado a ser uno de los principales asesores de la Casa Blanca, he hecho que la gente se sienta preocupada por el futuro de Estados Unidos.

Cabe señalar que sólo dos días antes de la entrevista de Navarro con Fox, el número de casos confirmados por el nuevo coronavirus en los Estados Unidos había superado los 5 millones, y las víctimas fatales desgraciadamente había ascendido a los 162.800.

La cada vez más vergonzosa realidad de la lucha contra la epidemia y la proximidad de las elecciones presidenciales en Estados Unidos son probablemente las principales razones del comportamiento de Navarro. Como la única superpotencia del mundo, Estados Unidos tenía las condiciones económicas y sociales necesarias para combitar con eficiencia la Covid-19. Sin embargo, debido a la desviación colectiva de quienes toman las decisiones, ¡el pueblo estadounidense ha pagado un alto precio!