Aconsejamos a políticos estadounidenses que no humillen el cociente intelectual de la gente

"No dejes que Trump se escape": este es el titular de un comentario publicado recientemente por The New York Times. El artículo enumera una serie de hechos que prueban que el líder estadounidense está tratando de desviar la atención pública para ocultar el "fracaso catastrófico" de la respuesta a la epidemia de nuevo coronavirus.

Las acciones inconsistentes del líder estadounidense enumeradas en el artículo tienen dos aspectos principales: primero, en respuesta al brote en los Estados Unidos, después de casi dos meses de subestimación, de repente anunció hace unos días que había previsto la gravedad del desastre. El segundo es sobre los esfuerzos de China para combatir la epidemia, primero elogios y afirmaciones, diciendo "muchas gracias por sus esfuerzos y transparencia", y luego continuó difamando a China hasta llamar al nuevo coronavirus "virus chino".

Por supuesto, estos dos aspectos de comportamiento del líder estadounidense están totalmente vinculados. Como revela la información en este comentario: el propósito es "culpar" a China, justificar su pobre respuesta a la epidemia, salvar el mercado de valores de los Estados Unidos y responder a las críticas sociales.

Sin embargo, ¿es tan fácil engañar el público estadounidense? De hecho, una serie de eventos como la "puerta de inteligencia" y la "puerta de acciones" que han estado descubiertos recientemente están provocando una creciente ira pública.

Según informes recientes de los medios estadounidenses, las agencias de inteligencia emitieron advertencias confidenciales ya en enero y febrero de este año, declarando que el nuevo coronavirus podría causar una crisis global. Sin embargo, hasta el 26 de febrero, el líder estadounidense afirmó en una conferencia de prensa que los riesgos que enfrentaban los estadounidenses eran "muy bajos". No fue sino hasta el 13 de marzo que declaró formalmente un estado de emergencia.

Al mismo tiempo, las noticias de que algunos políticos de EE. UU., incluido Richard Burr, presidente del Comité de Inteligencia del Senado del Congreso de EE. UU., vendieron acciones antes de que el mercado bursátil de EE. UU. cayera, también despertaron la crítica de opinión pública de EE. UU. Estos políticos vendieron sus acciones por adelantado sin advertir al público sobre los riesgos.

Si las personas hubieran sido informadas de los riesgos antes y las medidas se hubieran tomado antes, la situación de la epidemia en los Estados Unidos podría no haberse desarrollado hasta ahora. Sin embargo, los políticos estadounidenses no tomaron en cuenta a la gente e hicieron correcciones lo antes posible, sino que desesperadamente culparon injustamente a China para desviar la atención de la gente.

Lo que es más. El sitio web de noticias de EE. UU. Daily Beast.net informó el 21 que, según un mensaje secreto, la Casa Blanca planea unir a múltiples agencias federales para acusar a China de "cubrir la epidemia" y "crear una plaga global", pidiéndoles que enfaticen que "todo debe estar relacionado con China" y describe a Estados Unidos como un gran humanitario. El informe dice que la Casa Blanca planea cambiar las críticas de "esfuerzos insuficientes de prevención de epidemias" centrándose en los "errores" de China.

Quizás algunos políticos en los Estados Unidos sientan que es muy difícil culpar a otros, y están tratando de intentarlo nuevamente con todo el esfuerzo del gobierno. Sin embargo, hacerlo es un esfuerzo inútil y no se puede engañar al pueblo estadounidense y a la comunidad internacional. Es un hecho irrefutable que el gobierno de los Estados Unidos ha perdido un tiempo precioso para la prevención de la epidemia. Incluso ahora, los gobernadores de los estados de EE. UU. todavía se quejan de la falta de suministros médicos y equipos de prueba, y aún es difícil para la gente común solicitar la prueba de coronavirus.