La crisis de la OMC destaca la necesidad de oponerse firmemente al proteccionismo y al unilateralismo

Debido a la continua obstrucción de Estados Unidos, el Órgano de Apelación de la OMC quedó paralizado el miércoles pasado debido a jueces insuficientes. Esto ha sido descrito por la opinión pública como el "golpe más fuerte para el sistema multilateral de comercio", lo que significa que el orden comercial internacional puede volver a la era de las irregularidades, lo que traerá daños irreparables y consecuencias impredecibles, y destaca la necesidad de que las reformas de la OMC deban persistir en la dirección de oposición del proteccionismo y el unilateralismo.

En el mecanismo de solución de controversias de la OMC, los miembros generalmente negocian primero, y si la negociación falla, presentan la resolución del panel, y si hay alguna objeción, apelarán ante el órgano de apelación. Por lo tanto, el Órgano de Apelación se conoce como la "Corte Suprema" del Comercio Mundial, y su informe es obligatorio y vinculante como una "sentencia definitiva". Según las estadísticas, en los 25 años transcurridos desde el establecimiento de la OMC, el panel de expertos y el órgano de apelación se han pronunciado sobre más de 200 disputas, resolvieron con éxito la mayoría de las disputas y desempeñaron un papel clave en el cumplimiento de las funciones de la OMC.

Sin embargo, desde que el actual gobierno de los EE. UU. asumió el cargo, ha pisoteado abiertamente el sistema de libre comercio mundial basado en normas y ha utilizado la decisión del Órgano de Apelación de la OMC para afectar los derechos y obligaciones de los miembros, obstruyendo la extensión y selección de jueces de la institución, lo que llevó a que desde 2017 el Órgano de Apelación ha estado en un estado "ausente". Dado que el mandato de los dos jueces de la agencia finalizó hace días, al órgano de apelación, que debería estar compuesto por siete jueces, solo cuenta con un juez, y ya no es posible manejar nuevas disputas de acuerdo con las normas de la OMC.

La parte estadounidense ha tropezado descaradamente con el funcionamiento de la OMC, y una vez más expuso su lógica hegemónica de "si le sirve, bien, en caso contrario, lo descarta", y ha sido fuertemente criticado por la comunidad internacional. El diario japonés "Nihon Keizai Shimbun" señaló que la OMC está a punto de caer en un estado de "función faltante" y que las fricciones en el comercio mundial pueden intensificarse aún más. El Director General de la OMC, Roberto Azevedo, advirtió que las tensiones en las relaciones comerciales están perjudicando el crecimiento económico y que el mecanismo de solución de controversias debería restablecerse, de lo contrario, las opciones de los miembros pueden generar más incertidumbre y represalias unilaterales sin restricciones.

La acción deliberada de los Estados Unidos por sí sola puede causar un daño enorme al funcionamiento de la OMC y privar a otros miembros del derecho a un mecanismo vinculante de solución de controversias, lo que refleja las enormes deficiencias del mecanismo actual de la OMC y la extrema fragilidad del sistema comercial multilateral.

Para la OMC, es imperativo que el proceso de selección del órgano de apelación se inicie lo antes posible y que se cubran las vacantes. China presentó previamente una propuesta para la selección de un órgano de apelación con 115 miembros de la OMC, y junto con 40 miembros, incluida la Unión Europea, presentó una propuesta para la reforma del órgano de apelación, trabajando para construir un consenso y promover la resolución del problema. En la actualidad, 117 miembros de la OMC han pedido el inicio inmediato de la selección, lo que indica que la gran mayoría de los miembros tiene una fuerte voluntad de reanudar el funcionamiento del órgano de apelaciones.

En la actualidad, la presión a la baja sobre la economía global está aumentando, y el unilateralismo y el proteccionismo están en constante aumento. Una vez que se bloquee el funcionamiento de la OMC, indudablemente causará graves daños a los intereses comunes de todos los países. Por lo tanto, el mundo debe unirse y oponerse decididamente al proteccionismo y el unilateralismo, defender resueltamente la autoridad y la eficacia de la OMC, disipar la bruma del proteccionismo con acciones positivas e inyectar energía positiva en el desarrollo común.