China y Estados Unidos encuentran un camino para resolver sus diferencias de la manera más pragmática posible

La nueva ronda de consultas económicas y comerciales de alto nivel entre China y Estados Unidos finalizó recientemente en Washington. Ambas partes han realizado grandes progresos en diversos campos, como la agricultura, protección de la propiedad intelectual, tipo de cambio, servicios financieros, expansión de la cooperación comercial, transferencia tecnológica y la solución de controversias. Las dos partes han discutido sobre las consultas de seguimiento y han acordado esforzarse conjuntamente para llegar a un acuerdo final. Estados Unidos también cree que esta ronda de consultas ha conseguido grandes resultados durante la primera fase y espera que los dos equipos trabajen duro para terminar el texto del acuerdo de la primera fase y continúen promoviendo las consultas de seguimiento.

Como las dos economías más grandes del mundo, China y Estados Unidos tienen problemas económicos y comerciales muy complicados. No es realista tratar de llegar a un acuerdo conjunto en un corto período de tiempo, después de más de un año de conversaciones y discusiones, China y Estados Unidos se dieron cuenta de que los intereses de los consumidores y los productores deberían ser la prioridad, y que deberían comenzar con los problemas en los que discrepen menos, por así decirlo, de los fáciles a los difíciles, avanzar gradualmente y llegar a un consenso, es la forma más efectiva de resolver sus diferencias.

Tomemos como ejemplo la cuestión agrícola: China y Estados Unidos son, respectivamente, los mayores importadores y exportadores mundiales de productos agrícolas, existe una amplia gama de intereses en la cooperación en dicho sector. El mercado de China tiene una gran capacidad de consumo y se enfrenta a la inminente necesidad de mejorar sus productos. De acuerdo con los principios orientados al mercado y las normas de la OMC, la adquisición acelerada de productos agrícolas por parte de China es sin duda alguna, algo muy bueno para los consumidores chinos y los productores estadounidenses.

No hay un ganador en la guerra comercial, esta es la verdad que la historia y la realidad han demostrado en repetidas ocasiones a lo largo de la historia de la humanidad. Después de más de diez rondas de consultas económicas y comerciales, y de las constantes fluctuaciones entre China y EE.UU., ambas partes han encontrado un camino y vale la pena esperar un resultado razonable y pragmático.

Las relaciones económicas y comerciales chino-estadounidenses son el "ancla" para estabilizar la situación general. Tratar bien esta relación es beneficiosa para China, para Estados Unidos y para la paz, y la prosperidad de todo el mundo. Este es el último consenso alcanzado por China y Estados Unidos. Sobre la base del progreso realizado en la parte actual de las negociaciones, China y Estados Unidos deben hacer un gran esfuerzo para mantener la misma dirección y trabajar hacia el objetivo de alcanzar un acuerdo final para impulsar las relaciones bilaterales en el camino correcto.