Hay que crear condiciones favorables para obtener consultas con sinceridad y buenos resultados

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, emitió un documento a las 7:17 pm hora local del día 11 (hora de Beijing, 7:17 am), anunciando que el arancel de las exportaciones chinas equivalentes a $ 250 mil millones hacia EE.UU. se pospondrá del 1 de octubre al 15 de octubre. Pero el día anterior, la parte china había anunciado el primer lote de la primera lista de exclusión de los productos arancelarios de los Estados Unidos, para minimizar el impacto de la fricción comercial sobre las empresas chinas.

Según el llamado de los líderes del equipo económico y comercial de China y Estados Unidos el 5 del presente mes, las dos partes acordaron celebrar la decimotercera ronda de consultas económicas y comerciales de alto nivel entre China y los Estados Unidos en Washington a principios de octubre. Ambos grupos realizarán consultas serias y concretas a mediados de septiembre para prepararse plenamente para el progreso sustancial de dichas consultas de alto nivel, las dos partes acordaron que deberán trabajar juntas y tomar medidas prácticas para crear condiciones favorables para las consultas.

En vísperas de esta ronda de consultas, ambas partes tomaron medidas para actuar con buena voluntad, sinceridad y utilizar acciones reales para avanzar en la misma dirección, lo que ha creado condiciones favorables para promover un progreso sustantivo en dichas consultas, que corresponden con las expectativas de la comunidad internacional y es digno de un gran reconocimiento. El proceso de negociación durante el último año muestra que no hay un ganador en la guerra comercial y el problema de aumentar constantemente los aranceles no va a resolver el problema. Solo adhiriéndonos a la igualdad, respeto mutuo, siempre estando abiertos a negociar y cooperar con una actitud tranquila y racional podemos realmente resolver este dilema.

Debido a las diferentes etapas de desarrollo y sistemas económicos, los problemas financiaros y comerciales chino-estadounidenses son complicados y es imposible resolverlos en un solo día. Este trabajo requiere que las partes involucradas se esfuercen con buena voluntad y tomen medidas más prácticas para continuar creando condiciones favorables para las consultas y los avances.

Según el consenso de la reunión entre los jefes de Estado de China y los Estados Unidos en Argentina y el consenso de Osaka, los equipos económicos y comerciales de ambas partes deben intensificar las consultas para cancelar todos los aumentos de tarifas y llegar a un acuerdo concreto potenciando el beneficio mutuo y ganar-ganar lo antes posible. Para lograr este objetivo, ambas partes deben profundizar el entendimiento mutuo para buscar un terreno común y al mismo tiempo resuelven sus diferencias a través de la cooperación mutua. Esta es la primordial responsabilidad de China y los Estados Unidos para alcanzar la paz y el progreso mundial.

Como las dos economías más grandes del mundo, China y los Estados Unidos están muy entrelazados en sus intereses y tienen amplias áreas de cooperación. Las diferencias entre ambas partes se pueden resolver mediante el diálogo y las consultas para encontrar soluciones mutuamente aceptables, pero siempre China contrarrestará firmemente la escalada de la guerra comercial. Se espera que ambas partes continúen apoyándose mutuamente y guiados por el consenso de los dos jefes de Estado, siempre que nos adheriremos a la igualdad y el respeto mutuo, mantendremos la calma, aumentaremos la confianza mutua, expandiremos el consenso y promoveremos un acuerdo económico y comercial de beneficio mutuo. Esto beneficiará a China, a los Estados Unidos y al mundo.