Por un mundo para todos, aspiración de la diplomacia china

En la rueda de prensa celebrada el viernes en el marco de la sesión anual de la Asamblea Popular Nacional de China, el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, manifestó las reflexiones del gigante asiático sobre el futuro del planeta, el deseo de Beijing de jugar un mayor papel en la gobernación global, así como la aspiración de la diplomacia china por un mundo para todos.

Como ha indicado el presidente Xi Jinping en varias oacasiones, hoy en día el mundo está experimentando enormes transformaciones nunca vistas en el último siglo. Los países subdesarrollados espera más apoyo por parte de la comunidad internacional a su crecimiento; los países industrializados que sufren de las contradicciones internas causadas por la injusticia social buscan el chivo expiatorio en las naciones en vías de desarrollo; muchos cuestionan la globalización; el orden internacional establecido al término de la Segunda Guerra Mundial tiene enfrente severos desafíos jamás vistos.

En este contexto, el “milagro de China” ha sido reconocido y aprendido por cada vez más países en vías de desarrollo.

En la actualidad, 123 países y 29 organizaciones internacionales han suscrito documentos de cooperación con China en la construcción de La Franja y la Ruta, iniciativa formulado por el presidente Xi Jinping en 2013. Siguiendo las reglas de consultas, cooperación y beneficios entre todos, algunos países han logrado éxitos trascendentales en la infraestructura y en las industrias, como por ejemplo Kenia, donde el ferrocarril Mombasa-Nairobi contribuye 1,5 puntos porcentuales al crecimiento de la economía nacional del país africano.

Por otra parte, Italia, país miembro del G7, ha manifestado su interés de adherirse a dicha iniciativa. En próximo abril, más jefes de Estado y de gobierno vendrán a China para asistir a la segunda edición del Foro de Cooperación Internacional de La Franja y la Ruta.

“La Franja y la Ruta no es una trampa de endeudamiento, sino una tarta en beneficio del pueblo; no es un instrumento geopolítico, sino una oportunidad de desarrollo para todos”, así comentó el canciiler chino.

Lamentablemente, hay quienes vean el desarrollo de China con hostilidad. No escatiman esfuerzo por difamar el país asiático, declarando que deben desvincularse con China, hasta amenazan a otros países con la intención de contener el crecimiento pacífico de la Nación oriental.

Al respecto, el diplomático chinos señaló que una desvinculación de China es la desvinculación de oportunidades y del futuro, y en cierto sentido, del mundo.

El gobierno chino alienta a las empresas e individuales concernientes a defender sus propios intereses con las armas jurídicas. “¡No sean corderos silenciosos!”, dijo el canciller, quien indicó que no sólo se defienden a sí mismos, sino que resguardan los derechos legítimos y debidos de cualquier Nación que desee desarrollarse.

China no tiene la tradición de actuar en forma agresiva, y jamás optaremos por procurar la hegemonía aun cuando sea un país más fuerte. Los chinos siempre abogan por el respeto mutuo entre las civilizaciones, coexistencia entre todas las Naiones, y la cooperación y el beneficio común entre la comunidad internacional. “China será sin duda más poderosa, pero no más dura. China aboga por la independencia, pero no por la arbitrariedad. China defenderá firmemente sus derechos, pero no pretenderá la hegemonía”, así afirmó el ministro Wang Yi.

En realidad, el desarrollo pacífico de China ha ganado cada día más confianza en todo el mundo. Varias encuestas realizadas en Alemania y en Estados Unidos muestran que el público europeo considera China más fiable que Estados Unidos. En la recién clausurada Conferencia de Seguridad de Múnich, muchos comentaristas occidentales destacaron la necesidad y la urgencia de que Europa intensifique la cooperación con Beijing, mientras que la amistad transatlántica ya está al borde de ruptura. Por su parte, la canciller alemana Angela Merkel reconoció que, sin buenas relaciones con China, Alemania no es capaz de mantener su posición líder en el mundo. Frank Sieren, reportero del periódico germano Handelsblatt acreditado en Beijing, opinó que conversar con Beijing sirve más que con Washington en algunos temas internacionales.

La civilización china aprecia el ideal de un mundo para todos. La Nación china, que aportó inumerables inventos y creaciones científicos y culturales al ser humano en la antigüedad, en esta nueva época ofrece un nuevo modelo de desarrollo inclusivo a la prosperidad y la paz del mundo. No cabe duda que una China que asume mayor responsabilidad internacional hará más contribuciones al progreso de todo el mundo.