Subtexto de Gran Bretaña sobre Brexit: ¿Quieren irse o quedarse?

CRI 2018-11-22 21:40:42
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El 25 de noviembre se celebrará una cumbre europea especial, en la que se decidirá si se aprueba o no el borrador del tratado de Brexit. El gabinete de Inglaterra ha aprobado este proyecto de 585 páginas, considerándolo como la mejor versión para la negociación. Lo más importante es que en esta cumbre extraordinaria, Teresa May, primera Ministra de este país europeo debería llegar a una declaración política sobre las relaciones bilaterales con la UE después del Brexit. Evidentemente, Inglaterra enfrenta un momento clave que concierne a nada menos que el destino de toda una nación.

A fin de garantizar una exitosa celebración de la cumbre, Teresa May acudió con antelación a Bruselas el 21 del presente mes para encontrarse con Jean-Claude Juncker, Presidente de la Comisión Europea. Aunque no se hayan revelado los contenidos de esta reunión, el portavoz de esta institución expresó que se han logrado buenos avances y el trabajo conjunto seguirá.

 

Efectivamente, aún existen discrepancias para satisfacer las expectativas de ambas partes; entre ellas, cómo serán las asignaciones de derechos de pesca entre Inglaterra y otros países de UE después del Brexit, la demanda soberana por parte de España a Gibraltar, así como los arreglos comerciales entre Inglaterra y Europa en el futuro, entre otros. No solo lo antes mencionado es parte de la negociación, ya que existen disputas tensas en la mesa de tratado, así como sarcasmo y reprochas fuera de la mesa.

 

En general, los miembros del gobierno de Teresa May están de acuerdo con lo siguiente sobre la UE: después del Brexit, no deberían ocurrir cambios vitales respecto a las relaciones bilaterales, ni los arreglos concernientes; debido a que son intereses comunes que contienen otras discrepancias.

 

Sobre la base de este conocimiento común, y a pesar del “olor a pólvora” de Inglaterra contra la UE, este país quería irse y quedarse al mismo tiempo. Esa es la causa de que a pesar de las presiones políticas sufridas desde el interior del país, Teresa May aún persiste en llegar al borrador sobre el tratado de Brexit con la UE. Dicha comunidad y los principales miembros consideran como un borrador justo, en la que ambas partes han concedido.

 

Si se evalúa el contenido del borrador, este garantiza la salida de Inglaterra de la UE de forma jurídica, pero al mismo tiempo asegura que Inglaterra aún pertenezca a este grupo de países en ciertos ámbitos. Tal como el asunto fronterizo entre Irlanda del Norte (bajo jurisdicción de Inglaterra) e Irlanda, país miembro de la UE. Se ha establecido un proyecto de amortiguación en la que se estipula que Inglaterra e Irlanda del Norte bajo jurisdicción de la misma deben quedarse en la Unión Aduanera de la UE así como en el mercado interior de dicha agrupación hasta que ambas partes lleguen a un acuerdo y encuentren una solución final, con el fin de garantizar que no vuelva a establecerse una frontera rígida entre Irlanda e Irlanda del Norte bajo jurisdicción de Inglaterra. De esta manera se mantendrá un estado de libre circulación de personas y mercancías.

 

Por esta razón, dicho proyecto de amortiguación ha revelado efectivamente la intención pedida por ambas partes: mantener el statu quo. Incluso en el futuro, ambas partes harían nuevos arreglos para hacer más convenientes los intercambios de personas y mercancías entre ambas partes. Si es así, ¿habrá alguna diferencia esencial entre que Inglaterra salga o se quede en la UE?

 

Informaciones reveladas por diplomáticos europeos muestran que el ámbito de la declaración política posee una gran relevancia, ya que incluso este podría, en cierta medida, hacer de Inglaterra un país miembro formal. Por estas razones, se podría señalar que, efectivamente, en la esfera de las relaciones bilaterales, no habrán cambios grandes. 

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