Nave Asia-Pacífico debe zarpar en su nuevo viaje bajo principios de abertura, innovación e inclusión

CRI 2018-11-19 15:59:27
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El pasado domingo, se clausuró en Papua Nueva Guinea la 26a Reunión Informal de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que duró dos días. Durante la reunión, bajo el tema de “aprovechar la oportunidad inclusiva, y abrazar el futuro digital”, las economías miembro llegaron a un consenso en cuanto a la promoción de la conectividad, la construcción de una zona de libre comercio Asia-Pacífico, el desarrollo de la economía digital, así como las metas de Bogor y la visión post 2020, emitiendo una señal positiva sobre el apoyo y la defensa del libre comercio, el mecanismo comercial multilateral y la globalización económica.

Cabe destacar que los cinco principios de apertura, desarrollo, inclusión, innovación y regla, explicados por el presidente chino Xi Jinping, han sido ampliamente reconocidos en la reunión. Es de prever que, este “proyecto chino” inyectará dinámicas a la cooperación futura en la región Asia-Pacífico en tres aspectos.

En primer lugar, el futuro de la región radica en la “apertura”.

En la actualidad, esta región se encuentra de nuevo en un cruce histórico: por un lado está gozando de los logros traídos por la globalización económica y de las oportunidades generadas por la nueva revolución tecnológica y la transformación industrial; por el otro, la agudización de la globalización inversa y las fricciones comerciales ha dado lugar a una creciente incertidumbre e inestabilidad para el desarrollo. En la reunión citada, desde una perspectiva estratégica global, el presidente Xi exhortó a que las diferentes economías se enfoquen en la construcción de una economía abierta en la zona Asia–Pacífico, y la promoción continua de la liberalización y facilitación del comercio y la inversión, lo cual ha indicado una dirección y meta generales para el futuro de dicha región.

Tomando a China como ejemplo, en la recién concluida primera Exposición Internacional de Importaciones de China, se ha alcanzado un volumen de negocios de 57.800 millones de dólares, hecho que demuestra los beneficios de la abertura del mercado chino, y las desventajas del aislamiento propio. Por este motivo, en la reunión de APEC, los líderes de las economías miembro expresaron en las discusiones que, se debe defender el mecanismo de comercio multilateral, así como el papel debido de la Organización Mundial de Comercio. Solo con este consenso, se asegurará la navegación segura del buque Asia-Pacífico en una vía correcta y próspera.

En segundo lugar, la clave de la cooperación de la región Aisa-Pacífico consiste en la “innovación”.

Hoy en día, la economía digital se está convirtiendo en la fuerza nuclear para la nueva ronda de transformación industrial mundial. En los últimos años, los miembros de APEC han lanzado estrategias y planificaciones sobre el desarrollo de la economía digital, pero al mismo tiempo, el 35% de estas economías están afrontando muchas dificultades por su ambiente digital y nivel tecnológico menos favorecidos.

Al respecto, el presidente chino indicó que, la economía digital es el futuro para Asia-Pacífico e incluso para el globo, abogando por la búsqueda de nuevas fuerzas motrices y caminos de desarrollo, el fortalecimiento de la infraestructura y capacidad digitales, así como la mejora de la accesibilidad de la economía digital. Estas ideas reflejan la visión china sobre el futuro de la región en este ámbito y su deseo de compartir conocimientos con el mundo.

De hecho, como una potencia digital, la renovación china en la economía compartida, la venta en línea, y el pago móvil están beneficiando al desarrollo de la economía digital en la región Asia-Pacífico. Por ejemplo, en el país anfitrión de esta reunión de APEC, Papua Nueva Guinea, la red dorsal de fibra óptica construida por una empresa china comunica a 14 provincias costeñas del país. El modelo y la experiencia de China en el comercio electrónico también han sido ampliamente acogidos por los representantes presentes en la reunión.

En tercer lugar, el desarrollo de la región Asia-Pacífico requiere la “inclusión”.

Uno de los desafíos para el desarrollo de la región es la diversidad destacada y la debilidad inclusiva. Por ejemplo, todas las economías desean impulsar la economía digital, pero algunas de ellas se encuentran en una posición desfavorecida por su debilidad en la infraestructura, las técnicas y los talentos. Por lo tanto, “aprovechar la oportunidad inclusiva” se ha convertido en un enfoque de dicha reunión.

Con respecto a esto, el presidente Xi Jinping exhortó a que todos los países tomen en cuenta la realidad diversificada, respeten los caminos de desarrollo de los demás, profundicen la materialización de la conectividad y creen un espacio de desarrollo común para todo el mundo, con el objetivo de promover el desarrollo equilibrado, el crecimiento sostenible, la oportunidad igual, y la sociedad inclusiva para la región Asia-Pacífico.

La conectividad es el fundamento para lograr el desarrollo inclusivo. En este aspecto, la iniciativa china de la Franja y la Ruta se considera como una práctica exitosa. En 2017, China exportó a los países a lo largo de la Franja y la Ruta productos por un total de 1.440.320 millones de dólares, y creó 244 mil puestos de trabajo para ellos. En su discurso en la reunión, el presidente Xi Jinping indicó que, tras cincos años de esfuerzos, la construcción conjunta de la Franja y la Ruta ha entrado en una nueva fase de desarrollo. El premier canadiense, Justin Trudeau, que estuvo presente en la reunión, expresó que los proyectos de inversión de la infraestructura, llevados a cabo a nivel global, pueden proporcionar nuevos mercados, recursos y oportunidades para todos los países involucrados.

Es innegable que, bajo una actualidad económica sumergida en la transformación, la cooperación de la región Asia-Pacífico se enfrentará con una serie de retos. Para conducir el buque de desarrollo a un futuro más próspero, todas las economías de la zona deben adoptar el concepto abierto, innovador e inclusivo, persistiendo en la negociación, la cooperación y el desarrollo común.

 

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