Ventas de productos agrícolas rusos experimentan un auge en China

Camiones cargados con mercancías rusas como harina de trigo y otros productos agrícolas hacen fila cada día para transportar bienes a China a través del puesto de control fronterizo terrestre de Manzhouli.
　 La ciudad fronteriza más grande entre China y Rusia maneja el 60 por ciento del comercio bilateral que se transporta por vía terrestre.
　 El puesto de control en la región autónoma de Mongolia Interior ha experimentado un auge del comercio agrícola impulsado por la creciente demanda china de productos del campo de alta calidad.
　 Las cifras muestran que las importaciones de productos agrícolas de Rusia por el puesto de Manzhouli involucran más de 30 variedades y ascendieron a 340 millones de yuanes (49 millones de dólares) en los primeros cuatro meses de este año, un aumento interanual del 24 por ciento.
　 "Las granjas rusas están en una buena posición para producir productos agrícolas de alta calidad que satisfagan las demandas del mercado chino", indicó Grisha Grishinka, gerente de Eva Company, una empresa comercial rusa.
　 La compañía de Grishinka se dedica principalmente a la agricultura, la cría y el comercio de animales y cuenta con una granja de 10.000 hectáreas en el lejano oriente de Rusia.
　 La empresaria explicó que los pedidos de China se han convertido en la fuente principal de las exportaciones de su compañía.
　 El comercio agrícola entre China y Rusia alcanzó un récord en 2018 al superar los 5.000 millones de dólares, según el Ministerio de Comercio de China.

　 Las empresas agrícolas chinas también han invertido activamente en Rusia. En el lejano oriente ruso están en marcha 28 proyectos de inversión agrícola de China, por un valor total de 4.000 millones de dólares en sectores como agricultura, silvicultura, comercio y negocios.

(Sofia Wang)