Asombrarse al mundo con sólo un grito
CRI

De los siglos IX a V antes del Cristo, China se encontraba en la época históica llamada “Estados de Guerra”. Durante ese período coexistían unos decenas estados. Para sobrevivir, las políticas convenientes y efectivas tanto hacia interior como al exterior contaban mucha importancia para cada estado. Con esta circunstancia histórica produjo una profesión particular –consejeros para gobernadores. Generalmente, esos consejeros tenían sus propios pensamientos filosóficos y diferentes maneras de gobernación. Muchos de ellos eran expertos en aconsejar a sus jefes con cuentos metafóricos. Así que los gobernadores no les enfadaron, sino aceptarían consejos complacidamente.

A la siguiente vamos a citar un ejemplo muy famoso. Se llama “Asombrarse al mundo con sólo un grito”, lo cual trata de cómo el consejero Zhun Yu Kun exhortaba al jefe del país.

Qi Wei Wang acababa de subir al trono. Cuando era príncipe, tenía elevadas aspiraciones. Hacía mucha afán en el estudio y también prestaba bastante atención en las formas de gobernación de un estado porque él deseaba que una vez subida al tronto pudiera estar preparado para ampliar su estado a un país grande. Sin embargo, cuando realmente llegó al trono, se dio cuenta de que los derechos del poder y del placer para un rey eran mucho más grandes que los para un príncipe. En el trabajo cotidiano los funcionarios lo reuían y lo obedecían. Al volver a la casa le abandaban mejores vinos y mujeres más bellas. Poco a poco, las ambiones de la infancia se estaban perdiendo.

Así que pasaron dos años. Qi Wei Wang se entregaba más al placer. Sus trabajos cotidianos se reducían en bebidas y cacerías, dejando toda la gobernación del estado a sus funcionarios. Surgían gradualmente la corrupción entre los funcionarios y el estado se ponía cada día más débil. Los estados vecinos aprovechaban esta situación para invadir al estado Qi. Todos los ciudadanos se preocupaban por el destino del estado. Con miedo de ser reprochados, no se atrevían a aconsejar al rey.

Había una persona que se llamaba Zhun Yu Kun. Era muy elocuente y sabía dar discursos. A él le gustaba hablar metafóricamente. Cuando se enteró de que Qi Wei Wang también tenía esa costumbre para demostrar su sabiduría, decidió buscar una oportunidad para aconsejarlo.

Un día, Zhun Yu Kun llegó a ver a Qi Wei Wang y le dijo:“Su Majestad. Tengo una adivinanza para Ud.”

Qi Wei Wang preguntó: “¿De qué trata?”

Zhun Yu Kun siguió:

“Erase una vez, en un país había un ave enorme. Ese ave había llevadotres años viviendo en el palacio real. Lo curioso es que nunca se ha levantado para volar, tampoco ha gritado ni una vez. El único trabajo que hace trata de quedarse acurrucado sin ningún motivo. Su Majestad puede decirme qué ave es ése?”

Al escuchar el comienzo, Qi Wei Wang se dio cuenta de que Zhun Yu Kun le aludió a él mismo. Después de pensar un buen rato, Qi Wei Wang le contestó a Zhun Yu Kun, aclarando:

“Lo que ustedes no saben es que este ave, cuando se decida a volar, sube a lo más alto del cielo; y cuando da a gritar, va a asombrar a todo el mundo con solo un grito. Esperen para ver. ”

Desde aquel día, Qi Wei Wang se reflexionaba a solas de sus propios errores. Se decide a cambiar para hacer unas hazañas en su vida. Sus primeros actos trataban a reunir a todos los funcionarios del estado para premiar y castigar respectivamente. Luego se dedicaba a la reforma militar. Poco después, el estado Qi convirtió en un país activo. Otros estados que antes intentavan invadirlo se sorprendieron mucho al enterarse del cambio. Todo el mundo dijo que Qi Wei Wang era justamente ese ave grande, “cuando da a gritar, va a asombrar a todo el mundo con solo un grito”.

Por lo tanto, “Asombrarse al mundo con solo un grito” se convirtió en un refrán para describir a una persona que tiene mucha capacidad. Si él puede utilizarla bien, va a tener, como el ave grande, éxitos asombrosos.