Desde 1368 hasta 1895
Tang Yin: Crepúsculo vespertino
Desde el siglo XIII, la pintura china se vio con colores más brillantes y vívidos en comparación con la de la época anterior. En 1679 apareció la obra "Nota Gráfica del Jardín Mostaza", en la que se incluía la quintaesencia de muchos grandes maestros y constituyó el primer manual de introducción a la pintura china. En cuanto a los estilos, por un lado, se encontraba la escuela de Wumen encabezada por Shen Zhou, quien conservaba las características de la pintura del literato de la dinastía Yuan; y por el otro, surgió la escuela de Zhe, cuyo exponente fue Dai Jin, quien hizo un gran esfuerzo por revitalizar la pintura de la dinastía Song. En los primeros años de la dinastía Qing, algunos pintores que profesaban el invidualismo, rompieron la tradición para inspirar métodos más libres. Hasta los siglos XVII y XVIII, con la financiación de empresarios que ayudaron a estimular la creación constante por parte de los pintores, ciudades comerciales como Yangzhou y Shanghai, entre otras, se convirtieron en centros artísticos. Desde finales del siglo XVIII y hasta el siglo XIX, los pintores locales tuvieron más contacto con la pintura occidental. Algunos, incluso, abandonaron totalmente la pintura tradicional para estudiar aquella extranjera, otros intentaron integrar las dos. Entre los seguidores de esta escuela, el más famoso fue Qi Baishi, proveniente de una familia campesina.
Edad moderna
Qi Baishi: Insectos y arroz
Desde el comienzo del Movimiento de la Nueva Cultura, los pintores chinos empezaron a aplicar métodos de la pintura occidental y precisamente fue en este período en que se introdujo a China la pintura al óleo. A principios de la fundación de la República Popular China, muchos pintores se unieron al realismo socialista. Entre los años 1956 y 1957, la pintura tradicional china vivió un renacimiento y se incrementó significativamente el número de obras que retrataban la vida cotidiana de los campesinos. Durante la Gran Revolución Cultural, fueron cerradas no sólo las escuelas de arte, sino que las revistas y exposiciones relacionadas con el arte fueron canceladas, lo cual tuvo un efecto devastador en China. Después de esos años de agitación, se restablecieron colegios de arte y grupos profesionales. Del mismo modo, también se establecieron intercambios con instituciones artísticas extranjeras y los artistas chinos continuaron explorando nuevos temas y técnicas.