El primer día del año
El primer día del año, todo el mundo se viste de forma elegante. En primer lugar, felicitan a los padres. Entonces, cada niño recibe algo de dinero como regalo del nuevo año envuelto en papel rojo. La gente del norte de China otra vez come jiaozi en ese día, para desayunar puesto que su pronunciación puede significar "despedir a lo viejo y entrar en lo nuevo". La forma del jiaozi asimismo asemeja un lingote de oro de la China antigua. Por eso, la gente se los come y desean tener dinero y tesoros.
Los chinos del sur comen niangao (el pastel del año nuevo hecho de arroz glutinoso) porque su pronunciación también puede significar "más y más alto, un año tras otro".
El tallarín es también una comida que no puede faltar en los días del Año Nuevo Chino, y es porque esta larga tira de macarrones cocidos significa para nosotros la longevidad. Así, si la forma abultada de los ravioles simboliza una felicidad completa, las tiras del tallarín simbolizan larga vida para los comensales.
La clave del sabor del tallarín está en la salsa, que es, como el relleno de los ravioles, bien variable. Puede ser desde muy sencilla hasta muy complicada y costosa, pero todas son exquisitas.
La salsa más barata está hecha de carne picada y frita con salsa de soya, mientras que las más caras y deliciosas contienen, además de carne, mariscos, finas verduras y un montón de condimentos.